El técnico del Recreativo de Huelva reconoció que su equipo necesita ganar en casa, aunque insiste en mantener la tranquilidad y la confianza ante el Atlético Malagueño, colista de la categoría. El preparador sevillano destacó la buena evolución de Viedma y Pineau, la confianza plena en David Gil y el peligro del filial malaguista.
Pedro Morilla celebró su 53 cumpleaños con la mirada puesta en el duelo de este domingo ante el Atlético Malagueño. El técnico del Recreativo de Huelva explicó que «todos están bien, excepto Álex Carrasco, que sigue con recuperación», mientras que Jero Lario es duda: «Hoy ha salido a campo, pero habrá que valorar el estado mañana con el departamento médico».
En la portería, el entrenador mostró plena confianza en su suplente: «David Gil tiene toda la confianza del cuerpo técnico, hizo un buen partido el otro día, igual que Jero lo venía haciendo. Ya determinaremos el domingo quién sale de principio, pero con toda la confianza puesta en David».
También celebró la recuperación de varios jugadores. «Viedma y Pineau están entrenando con el grupo», confirmó, aunque matizó que «tienen menos bagaje porque han estado bastante tiempo lesionados, pero están aptos para poder debutar cuando se les necesite».
El técnico tiene claro el objetivo: «Afrontamos el partido con la mentalidad de hacer las cosas bien. El grupo está entrenando muy bien, los chavales están con muchísima motivación. Intentar ser humildes, ser el equipo que debemos de ser en casa para que no se escapen los tres puntos».
Morilla fue contundente sobre la necesidad de mejorar en el Nuevo Colombino: «Es necesario empezar a ganar en casa. Fuera de casa estamos dando la cara, pero aquí estamos fallando. Hemos hecho méritos para no haber perdido los dos partidos que hemos perdido, tanto Puente Genil como Xerez, pero debemos intentar que los tres puntos se empiecen a quedar aquí de costumbre«.
Sobre el rival, el técnico advirtió que «el Atlético Malagueño es un rival muy atrevido, con chavales que seguramente veamos en fútbol profesional. Es un equipo dinámico, que intenta ser protagonista con balón y, si se siente cómodo, se lo ha puesto complicado a todos los rivales«. Por eso, insistió en que «debemos plantear un partido donde ellos no se sientan cómodos con balón, creer en nuestro juego y ser más prácticos cuando lleguemos a situaciones de finalización».
El entrenador pidió también calma y apoyo al entorno. «Aquí en casa nos tenemos que quitar esa ansiedad o esa prisa por querer ganar sí o sí. Que lo tenemos que hacer, pero desde la tranquilidad. Los futbolistas lo dan todo, pero tenemos que quitarnos esa losa de la ansiedad», señaló. Y concluyó con un mensaje a su equipo y a la afición: «Ellos tienen que estar centrados en el fútbol. Nuestra afición es muy importante y aprovecho para pedir su apoyo desde el minuto uno porque son tres puntos muy importantes. Hay muchísima igualdad en la competición, y esa ansiedad se debe convertir en ganas de ganar, pero desde la tranquilidad».
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