El histórico exjugador y exdirector deportivo del Recreativo de Huelva analizó sin tapujos en Templo Decano la situación actual del equipo tras la victoria ante el Atlético Malagueño. «Si seguimos así en casa no conseguiremos el objetivo», advirtió, indicando también que el conjunto albiazul necesita más ritmo e intensidad para aspirar a cotas mayores.
Julio Peguero no necesita presentación entre los recreativistas. Exjugador, entrenador, director deportivo y coordinador de la cantera, ha dedicado su vida al club más antiguo del fútbol español. En el espacio Templo Decano, que dirige Carlini en Hispanidad Radio, el alma mater del Decano volvió a ofrecer una reflexión tan sincera como necesaria sobre el momento que atraviesa el equipo de Pedro Morilla.
Tras la victoria por 1-0 frente al Atlético Malagueño, Peguero reconoció que abandonó el estadio antes del final, en el minuto 80, y que hasta ese momento «no vi a la gente disconforme con el equipo». Explicó que la afición «estaba pacífica, sin aplaudir, porque estaba viendo lo que estábamos viendo», y que lo sucedido al término del encuentro «es consecuencia de lo que venimos viendo». Aunque destacó el valor de los tres puntos, lanzó una reflexión directa: «Yo me haría una pregunta… ¿Como estamos jugando vamos a conseguir sumar en otros partidos los tres puntos? Seguramente sufriendo. Algo hay que cambiar».
El onubense lamentó la falta de progresión futbolística del equipo pese a los resultados: «Hicimos el gol a los dos minutos, que es para jugar con tranquilidad, y luego tuvimos dos llegadas con peligro. Pero después sucedió lo del penalti. Se habla de la presión del campo… ¿Pero qué presión? Si mejor que se porta la gente con los jugadores, es imposible. Les aplauden cuando salen a calentar y a jugar. Lo del final fue la consecuencia de la hartura de lo que estamos viendo».
Peguero quiso también romper mitos sobre la supuesta desconexión entre grada y vestuario. «Todo lo que viene del público se escucha abajo. Yo no escuché los pitos porque me fui antes, pero hasta ese momento la gente estaba tranquila, pasiva y aburrida. En la segunda parte hubo momentos donde ellos fueron superiores a nosotros», comentó, reconociendo que el filial malagueño dio buena imagen en el Nuevo Colombino.
Sobre la posición del equipo en la tabla, el exdirector deportivo fue contundente: «Que el equipo vaya segundo, a mí no me dice nada. Yo quiero ver a mi equipo jugar al fútbol. Este es el quinto partido que jugamos y para mí es más de lo mismo. Estoy viendo lo mismo que el primer día. Un equipo que para mejorar tiene que cambiar la intensidad con la que juega». Para Peguero, la clave del salto de nivel pasa por aumentar el ritmo y la agresividad en el juego.
El también exfutbolista, siempre fiel a su estilo directo, advirtió que «si seguimos así en casa no conseguiremos el objetivo, porque el grupo está muy igualado y si esto nos ha pasado con equipos de la zona medio-baja, cuando vengan los que tienen que venir nos crearán muchos problemas».
En su análisis más táctico, Peguero también apuntó al dibujo ofensivo como uno de los factores a revisar: «Creo que no nos da resultados poner a dos delanteros de las mismas características. El que cayó más perjudicado fue Caye porque tenía que caer a las bandas y es el máximo goleador. Roni solo ha hecho un gol y los tres partidos que le he visto no me dice nada. Yo prefiero a Caye cerca del gol».
Finalmente, dejó claro que no cree que el problema sea físico: «Cualquier jugador del Recreativo de Huelva está apto para aguantar noventa minutos tranquilamente».
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