al punto de carlos
De postre... choquitos dulces
Se imaginan en casa cuando dicen los niños, ¿qué hay de postre? ¡¡Chocos fritos!! Y es que hoy quiero compartir con vosotros algo más que una receta, más bien una idea para presentar un curioso postre. No son más que unas natillas con su clásica galleta y canela . Eso sí, tenemos que buscar una buena puesta en escena digna del genio del Trampantojo culinario, el gran chef Diego Guerrero.

Necesitamos para hacer unas buenas natillas:
Elaboración:
Mezclamos las yemas con un vaso de leche y reservamos. El resto de la leche la hervimos con el azúcar y la vainilla, la apartamos del fuego y dejamos reposar 5 minutos.
Añadimos a la leche la mezcla de yemas y volvemos a acercar al fuego mínimo y no dejamos de remover hasta que empiece a espesar. Ojo... ¡que no hierva!
Apartamos y añadimos en caliente las hojas de gelatina previamente hidratadas y escurridas. Vertemos en un molde cuadrado dándole una altura de un centímetro y dejamos enfriar toda la noche.
Al día siguiente y con mucho cuidado desmoldamos las natillas y las cortamos con un cuchillo afilado a tiras como los chocos. Rebozamos estas tiras en galleta molida con canela y ya las podemos servir.
Truco: Mojar la hoja del cuchillo al cortar las natillas para que resbale y no se nos rompan al cortarlas