Tramatizado
‘Inestable’: ocho episodios de puro nepotismo Lowe
Se agradecen ciertos brochazos de surrealismo y absurdo en los que, por desgracia, la serie no termina de creer
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Que Rob Lowe se quedó enganchado de por vida interpretando a Chris Traeger de ‘Parks & Recreation’ no es nada nuevo. No importa cuántos proyectos lleve a cabo que desde el momento en que se puso en la piel del hiperenergético personaje todos sus sucesivos papeles han hablado, andado y reaccionado como Chris Traeger . De hecho, tengo mis sospechas de que actúa también así en su día a día y se ha fusionado definitivamente con el personaje.
‘Inestable’ son dos tazas de lo mismo. Dos y media si añadimos a John Owen Lowe, el hijo de Rob tanto en la realidad como en el estreno de Netflix. Vaya por delante que no tengo absolutamente nada en contra de que padres e hijos trabajen juntos. Sin ir más lejos esa fue la base de todos los gremios en Europa durante siglos y no salió ni tan mal la cosa. Aquí en Castilla, de hecho, lo seguimos haciendo a diario en el campo para que ustedes se hinchen a vinos exquisitos. Sin embargo, no es lo mismo ser zapatero o labrador como tu padre porque no te queda otra que hacerte actor y llevártelo crudo porque papá fue un ídolo adolescente en los noventa y tiene muchos coleguitas productores. Todavía Lowe Sénior tiene carisma y vis cómica, pero me temo que Júnior es la versión de Aliexpress de su padre. Ustedes me entienden.
El argumento no tiene mucha novedad. Genio científico y millonario enviuda y empieza a perder la cabeza. La directora financiera de la empresa, que ve el peligro que esto representa para empleados e inversores, llama al hijo del genio para que venga a ayudar a su padre. Y muy poquito más. Unos cuantos enredos, cinco o seis secundarios estereotípicos (ni siquiera llegan a arquetípicos) y mucho tiempo de pantalla para Lowe Júnior para que lo vea toda la industria y siga recibiendo ofertas.
Si acaso, se agradecen ciertos brochazos de surrealismo y absurdo en los que, por desgracia, la serie no termina de creer. Sinceramente creo que era el camino a seguir para que ‘Inestable’ hubiera tenido un poco más de carácter y no se quedara en un producto anodino, olvidable y totalmente innecesario para todos salvo para John Owen Lowe.
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