Cultura
El Taller Artístico: La versión 2.0 de la academia clásica
Gustavo Domínguez destaca que este centro está pensado “para la práctica de actividades artísticas, el aprendizaje y el intercambio de ideas para su posterior difusión” y que a diferencia del taller tradicional “abre sus puertas al público y atiende sus necesidades”. Considera “claves” las nuevas tecnologías y su uso dentro del mundo de la formación audiovisual y plástica. Ofrece para noveles y profesionales formación (cursos continuos, talleres y masterclass) creación, difusión (web y redes sociales) y coworking.

La cultura se disfruta en los escenarios de teatros, las salas de conciertos y de cine, las de exposiciones y museos, galerías, bibliotecas, en la calle… pero ésta se cuece en lugares tradicionalmente íntimos y cerrados, donde los artistas, en soledad, armados de talento e inspiración, dan vida a la obra que después adquieren una dimensión pública. Tenemos en la mente esos talleres clásicos, donde pasan del maestro al aprendiz, como fórmulas secretas, las técnicas del arte, ese elemento comunicador con la capacidad de transmitir emociones y pensamientos que transcienden al tiempo.

La esencia no ha cambiado, pero en pleno siglo XXI se han mutiplicado las opciones para crear y comunicar. Ahora un mensaje o una fotografía puede transportarse velozmente a cualquier lugar y hay cantidad de recursos nuevos que aplicar. No ha cambiado que alguien necesariamente haga uso de ellos en el proceso creador, el artista, con sus ideas, ni la figura de quien guía sus pasos, por lo que el concepto de la academia de Platón lo tenemos aún presente, aunque la versión 2.0 ya esté entre nosotros.
Aúnando el perfil clásico y el contemporáneo ha echado a andar recientemente en Huelva El Taller Artístico (calle Miguel Redondo número 52 entreplanta B), un espacio con las puertas abiertas al arte y sus creadores. Gustavo Domínguez Moreno está al frente junto con un equipo de profesionales doctores en Bellas Artes, con gran experiencia tanto artística, como en formación en diversas asignaturas.
Domínguez explica a huelva24.com que “somos una academia de arte que ofrecemos servicios de creación y difusión” con el matiz de que “somos conscientes de nuestro tiempo y por eso le hemos querido dar una vuelta de tuerca”. Es por ello que “sin dejar de mirar a la formación más clásica” pretenden ser “novedosos y actuales, estar a la altura de las necesidades” y por tanto además de los cursos tradicionales de pintura, dibujo, modelado e ilustración, realizan cursos especializados. En ellos tienen cabida “tanto las personas que quieren iniciarse, como los profesionales que necesitan un lugar donde trabajar” para los que pretenden ser “un referente, un punto de encuentro con actividades dentro de la plástica”.

De este modo, desde 3,55 euros la hora, imparten talleres continuos. En su programación mensual los hay de técnicas pictóricas, paisajes, dibujo de modelos, grabado, estampación, cerámicas, etc, además de masterclass, “donde los artistas expondrán sus rutinas, una experiencia que consideramos fundamental y un privilegio dentro de la formación artística”, destaca Domínguez.
La cultura se disfruta en los escenarios de teatros, las salas de conciertos y de cine, las de exposiciones y museos, galerías, bibliotecas, en la calle… pero ésta se cuece en lugares tradicionalmente íntimos y cerrados, donde los artistas, en soledad, armados de talento e inspiración, dan vida a la obra que después adquieren una dimensión pública. Tenemos en la mente esos talleres clásicos, donde pasan del maestro al aprendiz, como fórmulas secretas, las técnicas del arte, ese elemento comunicador con la capacidad de transmitir emociones y pensamientos que transcienden al tiempo. La esencia no ha cambiado, pero en pleno siglo XXI se han mutiplicado las opciones para crear y comunicar. Ahora un mensaje o una fotografía puede transportarse velozmente a cualquier lugar y hay cantidad de recursos nuevos que aplicar. No ha cambiado que alguien necesariamente haga uso de ellos en el proceso creador, el artista, con sus ideas, ni la figura de quien guía sus pasos, por lo que el concepto de la academia de Platón lo tenemos aún presente, aunque la versión 2.0 ya esté entre nosotros.Aúnando el perfil clásico y el contemporáneo ha echado a andar recientemente en Huelva El Taller Artístico (calle Miguel Redondo número 52 entreplanta B), un espacio con las puertas abiertas al arte y sus creadores. Gustavo Domínguez Moreno está al frente junto con un equipo de profesionales doctores en Bellas Artes, con gran experiencia tanto artística, como en formación en diversas asignaturas.Domínguez explica a huelva24.com que “somos una academia de arte que ofrecemos servicios de creación y difusión” con el matiz de que “somos conscientes de nuestro tiempo y por eso le hemos querido dar una vuelta de tuerca”. Es por ello que “sin dejar de mirar a la formación más clásica” pretenden ser “novedosos y actuales, estar a la altura de las necesidades” y por tanto además de los cursos tradicionales de pintura, dibujo, modelado e ilustración, realizan cursos especializados. En ellos tienen cabida “tanto las personas que quieren iniciarse, como los profesionales que necesitan un lugar donde trabajar” para los que pretenden ser “un referente, un punto de encuentro con actividades dentro de la plástica”. De este modo, desde 3,55 euros la hora, imparten talleres continuos. En su programación mensual los hay de técnicas pictóricas, paisajes, dibujo de modelos, grabado, estampación, cerámicas, etc, además de masterclass, “donde los artistas expondrán sus rutinas, una experiencia que consideramos fundamental y un privilegio dentro de la formación artística”, destaca Domínguez.También ofrecen servicios de difusión artística a través de su web (eltallerartistico.com) y cuentan con una participación activa en las redes sociales (Facebook.com/eltallerart y twitter.com/Eltallerart), que les permiten informar e interactuar con sus seguidores y atender sus necesidades. “A diferencia del taller tradicional, un lugar cerrado y solo para el artista, queremos abrir nuestras puertas al público y atender sus necesidades”, indica su cabeza visible, que considera “claves” las nuevas tecnologías y su uso dentro del mundo de la formación audiovisual y plástica. “Por eso hemos introducido cursos continuos de imagen, fotografía ilustración y pintura digital”, afirma.Domínguez resalta que El Taller Artístico ofrecen cuatro servicios fundamentalmente: formación, creación, difusión y coworking. Con ellos tiene la vocación de ser distinto no por el mero hecho de diferenciarse o ser innovador, sino por la amplitud de miras que tiene su concepción, más diversa, enriquecedora y útil. “El taller es un lugar pensado para la práctica de actividades artísticas, el aprendizaje, el intercambio de ideas y para su posterior difusión. Es un lugar abierto donde dar cabida a inquietudes artísticas, tanto las de los que desean empezar a conocer las diferentes técnicas y procedimientos, como para los que quieren perfeccionarse o ya son profesionales y necesitan un lugar donde desarrollar su proyecto”.En esta línea, esta academia cuenta con una plataforma donde dar a conocer los trabajos de los artistas que le dan vida, ya sea en su web, las redes sociales, etc, por lo que este espacio est también una red de contactos y un foro de discusión artística donde fluye la información. “Es un lugar donde establecer relaciones con otros profesionales y con los clientes. Contamos con una exposición permanente tanto en nuestras instalaciones como en la propia web y además afrontamos actividades artísticas por encargo”, expone Gustavo.En cuanto a la formación artística entienden desde esta academia que “debe ser personalizada. No creemos en planes de estudios estereotipados alejados de la necesidad personal y artística de cada individuo” y para ello ofrecen tres vías: cursos, talleres y masterclass. “Los Cursos de formación continua de Pintura, Dibujo, Modelado e Ilustración e Imagen Digital atienden a una formación más amplia y luego hay otros específicos están orientados a una actividad concreta”, explica Domínguez, que añade que a las sesiones de Masterclass acuden “profesionales que nos trasladan sus experiencias, conocimientos, y su método a la hora de enfrentarse al proceso creativo. Sin duda una oportunidad única y un maravilloso complemento a la formación, permitiendo a los artistas hablar con ellos y preguntarles cosas”. Las disciplinas más importantes de la formación son plástica, dibujo, pintura y volumen, y las novedosas ilustración e imagen digital, dando cabida a la incorporación de las nuevas tecnologías. “Nuestro plan docente se basa en la formación que utilizan las Facultades de Bellas Artes, desde ejercicios más sencillos y basados en la formación más tradicional, básicos para el entendimiento de la forma y el color, hasta aquellos más avanzados que se basan en la interpretación y en la búsqueda de un lenguaje personal, para llegar a discursos más complejos que se manifiesta en un proyecto artístico profesional”, manifesta este docente. En lo referente a los talleres específicos recorren la teoría y análisis artístico de diversos aspectos y artistas y también en ellos se desarrollan actividades especiales, como dibujo del natural con modelos, jornadas sobre paisaje, grabado, cerámica, técnicas de pintura mural, policromía, fotografía, técnicas ornamentales. En el aspecto de la creación, Gustavo Domínguez resalta que “podemos atender encargo relacionado con el arte. Si necesitas un mural para decorar tu local o casa, o si quieres una pieza cerámica creada para ti, o una edición de grabado para conmemorar algo, contamos con los medios necesarios para realizarlo. Hacemos ilustraciones para acompañar publicaciones, retratos y cuadros por encargos”. Acerca del coworking artístico o trabajo cooperativo Domínguez expone que “es una forma de trabajo que permite a los artistas compartir un mismo espacio de trabajo, tanto físico como virtual, para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomentan proyectos conjuntos”. Esta nuevo concepto de trabajo permite compartir el taller y su equipamiento y que se fomenten relaciones entre profesionales y del cliente con el artista. “Es una solución para el problema de aislamiento, que te permite hacerte visible en un momento de gran complejidad”. En cuanto a instalaciones, El Taller Artístico se extiende en una sala diáfana de 60 metros cuadrados, concebida para albergar seis puestos de trabajo completamente equipados, con caballetes profesionales tanto de pintura, como modelado; con mesa-paleta individual, banqueta y silla. Además tiene internet wifi y biblioteca especializada.
La cultura se disfruta en los escenarios de teatros, las salas de conciertos y de cine, las de exposiciones y museos, galerías, bibliotecas, en la calle… pero ésta se cuece en lugares tradicionalmente íntimos y cerrados, donde los artistas, en soledad, armados de talento e inspiración, dan vida a la obra que después adquieren una dimensión pública. Tenemos en la mente esos talleres clásicos, donde pasan del maestro al aprendiz, como fórmulas secretas, las técnicas del arte, ese elemento comunicador con la capacidad de transmitir emociones y pensamientos que transcienden al tiempo. La esencia no ha cambiado, pero en pleno siglo XXI se han mutiplicado las opciones para crear y comunicar. Ahora un mensaje o una fotografía puede transportarse velozmente a cualquier lugar y hay cantidad de recursos nuevos que aplicar. No ha cambiado que alguien necesariamente haga uso de ellos en el proceso creador, el artista, con sus ideas, ni la figura de quien guía sus pasos, por lo que el concepto de la academia de Platón lo tenemos aún presente, aunque la versión 2.0 ya esté entre nosotros.Aúnando el perfil clásico y el contemporáneo ha echado a andar recientemente en Huelva El Taller Artístico (calle Miguel Redondo número 52 entreplanta B), un espacio con las puertas abiertas al arte y sus creadores. Gustavo Domínguez Moreno está al frente junto con un equipo de profesionales doctores en Bellas Artes, con gran experiencia tanto artística, como en formación en diversas asignaturas.Domínguez explica a huelva24.com que “somos una academia de arte que ofrecemos servicios de creación y difusión” con el matiz de que “somos conscientes de nuestro tiempo y por eso le hemos querido dar una vuelta de tuerca”. Es por ello que “sin dejar de mirar a la formación más clásica” pretenden ser “novedosos y actuales, estar a la altura de las necesidades” y por tanto además de los cursos tradicionales de pintura, dibujo, modelado e ilustración, realizan cursos especializados. En ellos tienen cabida “tanto las personas que quieren iniciarse, como los profesionales que necesitan un lugar donde trabajar” para los que pretenden ser “un referente, un punto de encuentro con actividades dentro de la plástica”. De este modo, desde 3,55 euros la hora, imparten talleres continuos. En su programación mensual los hay de técnicas pictóricas, paisajes, dibujo de modelos, grabado, estampación, cerámicas, etc, además de masterclass, “donde los artistas expondrán sus rutinas, una experiencia que consideramos fundamental y un privilegio dentro de la formación artística”, destaca Domínguez.También ofrecen servicios de difusión artística a través de su web (eltallerartistico.com) y cuentan con una participación activa en las redes sociales (Facebook.com/eltallerart y twitter.com/Eltallerart), que les permiten informar e interactuar con sus seguidores y atender sus necesidades. “A diferencia del taller tradicional, un lugar cerrado y solo para el artista, queremos abrir nuestras puertas al público y atender sus necesidades”, indica su cabeza visible, que considera “claves” las nuevas tecnologías y su uso dentro del mundo de la formación audiovisual y plástica. “Por eso hemos introducido cursos continuos de imagen, fotografía ilustración y pintura digital”, afirma.Domínguez resalta que El Taller Artístico ofrecen cuatro servicios fundamentalmente: formación, creación, difusión y coworking. Con ellos tiene la vocación de ser distinto no por el mero hecho de diferenciarse o ser innovador, sino por la amplitud de miras que tiene su concepción, más diversa, enriquecedora y útil. “El taller es un lugar pensado para la práctica de actividades artísticas, el aprendizaje, el intercambio de ideas y para su posterior difusión. Es un lugar abierto donde dar cabida a inquietudes artísticas, tanto las de los que desean empezar a conocer las diferentes técnicas y procedimientos, como para los que quieren perfeccionarse o ya son profesionales y necesitan un lugar donde desarrollar su proyecto”.En esta línea, esta academia cuenta con una plataforma donde dar a conocer los trabajos de los artistas que le dan vida, ya sea en su web, las redes sociales, etc, por lo que este espacio est también una red de contactos y un foro de discusión artística donde fluye la información. “Es un lugar donde establecer relaciones con otros profesionales y con los clientes. Contamos con una exposición permanente tanto en nuestras instalaciones como en la propia web y además afrontamos actividades artísticas por encargo”, expone Gustavo.En cuanto a la formación artística entienden desde esta academia que “debe ser personalizada. No creemos en planes de estudios estereotipados alejados de la necesidad personal y artística de cada individuo” y para ello ofrecen tres vías: cursos, talleres y masterclass. “Los Cursos de formación continua de Pintura, Dibujo, Modelado e Ilustración e Imagen Digital atienden a una formación más amplia y luego hay otros específicos están orientados a una actividad concreta”, explica Domínguez, que añade que a las sesiones de Masterclass acuden “profesionales que nos trasladan sus experiencias, conocimientos, y su método a la hora de enfrentarse al proceso creativo. Sin duda una oportunidad única y un maravilloso complemento a la formación, permitiendo a los artistas hablar con ellos y preguntarles cosas”. Las disciplinas más importantes de la formación son plástica, dibujo, pintura y volumen, y las novedosas ilustración e imagen digital, dando cabida a la incorporación de las nuevas tecnologías. “Nuestro plan docente se basa en la formación que utilizan las Facultades de Bellas Artes, desde ejercicios más sencillos y basados en la formación más tradicional, básicos para el entendimiento de la forma y el color, hasta aquellos más avanzados que se basan en la interpretación y en la búsqueda de un lenguaje personal, para llegar a discursos más complejos que se manifiesta en un proyecto artístico profesional”, manifesta este docente. En lo referente a los talleres específicos recorren la teoría y análisis artístico de diversos aspectos y artistas y también en ellos se desarrollan actividades especiales, como dibujo del natural con modelos, jornadas sobre paisaje, grabado, cerámica, técnicas de pintura mural, policromía, fotografía, técnicas ornamentales. En el aspecto de la creación, Gustavo Domínguez resalta que “podemos atender encargo relacionado con el arte. Si necesitas un mural para decorar tu local o casa, o si quieres una pieza cerámica creada para ti, o una edición de grabado para conmemorar algo, contamos con los medios necesarios para realizarlo. Hacemos ilustraciones para acompañar publicaciones, retratos y cuadros por encargos”. Acerca del coworking artístico o trabajo cooperativo Domínguez expone que “es una forma de trabajo que permite a los artistas compartir un mismo espacio de trabajo, tanto físico como virtual, para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomentan proyectos conjuntos”. Esta nuevo concepto de trabajo permite compartir el taller y su equipamiento y que se fomenten relaciones entre profesionales y del cliente con el artista. “Es una solución para el problema de aislamiento, que te permite hacerte visible en un momento de gran complejidad”. En cuanto a instalaciones, El Taller Artístico se extiende en una sala diáfana de 60 metros cuadrados, concebida para albergar seis puestos de trabajo completamente equipados, con caballetes profesionales tanto de pintura, como modelado; con mesa-paleta individual, banqueta y silla. Además tiene internet wifi y biblioteca especializada.
Domínguez resalta que El Taller Artístico ofrecen cuatro servicios fundamentalmente: formación, creación, difusión y coworking. Con ellos tiene la vocación de ser distinto no por el mero hecho de diferenciarse o ser innovador, sino por la amplitud de miras que tiene su concepción, más diversa, enriquecedora y útil. “El taller es un lugar pensado para la práctica de actividades artísticas, el aprendizaje, el intercambio de ideas y para su posterior difusión. Es un lugar abierto donde dar cabida a inquietudes artísticas, tanto las de los que desean empezar a conocer las diferentes técnicas y procedimientos, como para los que quieren perfeccionarse o ya son profesionales y necesitan un lugar donde desarrollar su proyecto”.

En esta línea, esta academia cuenta con una plataforma donde dar a conocer los trabajos de los artistas que le dan vida, ya sea en su web, las redes sociales, etc, por lo que este espacio est también una red de contactos y un foro de discusión artística donde fluye la información. “Es un lugar donde establecer relaciones con otros profesionales y con los clientes. Contamos con una exposición permanente tanto en nuestras instalaciones como en la propia web y además afrontamos actividades artísticas por encargo”, expone Gustavo.
En cuanto a la formación artística entienden desde esta academia que “debe ser personalizada. No creemos en planes de estudios estereotipados alejados de la necesidad personal y artística de cada individuo” y para ello ofrecen tres vías: cursos, talleres y masterclass. “Los Cursos de formación continua de Pintura, Dibujo, Modelado e Ilustración e Imagen Digital atienden a una formación más amplia y luego hay otros específicos están orientados a una actividad concreta”, explica Domínguez, que añade que a las sesiones de Masterclass acuden “profesionales que nos trasladan sus experiencias, conocimientos, y su método a la hora de enfrentarse al proceso creativo. Sin duda una oportunidad única y un maravilloso complemento a la formación, permitiendo a los artistas hablar con ellos y preguntarles cosas”.

Las disciplinas más importantes de la formación son plástica, dibujo, pintura y volumen, y las novedosas ilustración e imagen digital, dando cabida a la incorporación de las nuevas tecnologías. “Nuestro plan docente se basa en la formación que utilizan las Facultades de Bellas Artes, desde ejercicios más sencillos y basados en la formación más tradicional, básicos para el entendimiento de la forma y el color, hasta aquellos más avanzados que se basan en la interpretación y en la búsqueda de un lenguaje personal, para llegar a discursos más complejos que se manifiesta en un proyecto artístico profesional”, manifesta este docente.
En lo referente a los talleres específicos recorren la teoría y análisis artístico de diversos aspectos y artistas y también en ellos se desarrollan actividades especiales, como dibujo del natural con modelos, jornadas sobre paisaje, grabado, cerámica, técnicas de pintura mural, policromía, fotografía, técnicas ornamentales.

En el aspecto de la creación, Gustavo Domínguez resalta que “podemos atender encargo relacionado con el arte. Si necesitas un mural para decorar tu local o casa, o si quieres una pieza cerámica creada para ti, o una edición de grabado para conmemorar algo, contamos con los medios necesarios para realizarlo. Hacemos ilustraciones para acompañar publicaciones, retratos y cuadros por encargos”.
Acerca del coworking artístico o trabajo cooperativo Domínguez expone que “es una forma de trabajo que permite a los artistas compartir un mismo espacio de trabajo, tanto físico como virtual, para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente, a la vez que fomentan proyectos conjuntos”. Esta nuevo concepto de trabajo permite compartir el taller y su equipamiento y que se fomenten relaciones entre profesionales y del cliente con el artista. “Es una solución para el problema de aislamiento, que te permite hacerte visible en un momento de gran complejidad”.
En cuanto a instalaciones, El Taller Artístico se extiende en una sala diáfana de 60 metros cuadrados, concebida para albergar seis puestos de trabajo completamente equipados, con caballetes profesionales tanto de pintura, como modelado; con mesa-paleta individual, banqueta y silla. Además tiene internet wifi y biblioteca especializada.