Mesa de la Ría avisa de que el apilamiento de los fosfoyesos 'es insostenible' en el tiempo

El grupo municipal de Mesa de la Ría ha pedido a las autoridades españolas que desechen el plan propuesto por Fertiberia, cuyo objetivo es “enterrar los fosfoyesos vertidos ilegalmente” en Huelva, tras el desastre medioambiental provocado en Florida, que ha obligado a desalojar localidades cercanas ante el riesgo para la salud de la población.

La organización ha alertado de la inestabilidad del terreno sobre el que se han vertido más de cien millones de toneladas de residuos, que “hace que el apilamiento en altura sea insostenible”, algo de lo que ya avisó el que fuera director del comité de expertos José Borrego Flores, director del departamento de Ciencias de la Tierra de la Facultad de Ciencias Experimentales de la Universidad de Huelva. “Han sido numerosas las ocasiones en las que este científico ha avisado de que las balsas de fosfoyesos de Huelva van a colapsar tarde o temprano”, ha recordado el presidente de la asociación Mesa de la Ría, Juan Manuel Buendía.

Para el portavoz municipal, Rafael Gavilán, el Ayuntamiento de Huelva “tiene en su mano evitar un desastre medioambiental similar en Huelva”, al tiempo que ha lamentado que su propuesta de rechazo al plan de Fertiberia haya sido derrotada en sucesivas ocasiones en el Pleno por los votos de PSOE, PP, Cs y VOX.

Para Gavilán, “todos estos grupos políticos están traicionando a los ciudadanos que les han elegido, entre otras cuestiones, para dar una solución a este problema, puesto que han optado por ponerse del lado del interés económico de Fertiberia, condenada por la Justicia debido a la ilegalidad del vertido, en lugar de optar por la recuperación ambiental de nuestros espacios naturales tan injustamente destruidos”.

Mesa de la Ría ha recordado que denunció en abril de 2019 el vertido de cuatro mil millones de litros de aguas ácidas (en Florida se han vertido unos mil millones), tras haber constatado que el agua embalsada en los fosfoyesos de Huelva había desaparecido además de la aparición de hasta cinco enormes sumideros, por los que ésta se habría vertido a la cuenca del río Tinto.

En la pasada reunión del mes de diciembre de la mesa de los fosfoyesos, el miembro del comité de expertos Rafael Pérez López advirtió de que “el enorme contenido de elementos como el arsénico y el cadmio existente en las aguas contenidas en las balsas convertían a todo el lugar en un vertedero de residuos tóxicos y peligrosos en aplicación de la normativa europea, así como de la existencia de un vertido continuado de estos elementos a la ría”.