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Altas Capacidades: mitos y falsas creencias
Cuando hablamos de Alta Capacidad Intelectual (también conocida como superdotación o sobredotación, aunque no sean estrictamente lo mismo), estamos haciendo referencia a una serie de características que implican, entre otras, un CI (cociente intelectual) superior a 130 puntos, un rendimiento intelectual superior a la media y una alta motivación hacia el aprendizaje, así como la presencia de pensamiento divergente o gran creatividad e imaginación.

Ahora bien, esto que podría parecer una definición mayoritariamente aceptada, en realidad esconde mucho desconocimiento respecto a lo que supone una alta capacidad intelectual, lo que ha generado falsas creencias o mitos alrededor de este tema.
¿Y qué queremos decir cuando hablamos de mitos o estereotipos? Pues nos referimos a las creencias populares que existen sobre un tema que suelen ser muy difíciles de modificar una vez que ya han sido asumidas. Los mitos son prejuicios que nos impiden analizar la realidad de la forma adecuada, lo que nos lleva a actuar de manera poco reflexiva e imprudente.
A continuación, vamos a ver algunos de los mitos más comunes que podemos escuchar sobre las personas con altas capacidades. El objetivo es desmontar los prejuicios existentes para así poder comprender mejor la realidad que viven y, de esta forma, contribuir a la construcción de una sociedad donde se les pueda prestar una atención adaptada a sus necesidades reales.
1. Las personas con alta capacidad siempre sacan buenas notas. No tiene por qué. Alguien puede ser brillante en algunas áreas académicas y en otras no destacar especialmente. Esto dependerá de su perfil de competencia, de su interés personal o de su motivación. Si creamos expectativas poco realistas sobre estas personas, posiblemente se frustrarán y su autoestima quedará dañada.
2. Como son tan inteligentes, no necesitan ayuda en la escuela. Falso. La escuela está diseñada para la media de la población, no para los extremos, así que precisamente por esto es que necesitan ayuda y comprensión: retos intelectuales, mantenerse motivados, orientación social y emocional, etc. Debemos tener en cuenta que son niños que sobresalen por diversos aspectos, así que sí, necesitan ser guiados también.
3. Que los alumnos con altas capacidades sean educados de forma diferente, es elitista. Lo natural en cualquier grupo humano es que haya diversidad, por tanto, una escuela eficaz y justa debería tomar conciencia de esta realidad y respetar el derecho de cualquier alumno a ser educado conforme a sus características y necesidades. Eso se llama equidad, y no debería darse únicamente en quienes sobresalen por encima o por debajo de la media, sino en todos y cada uno de los alumnos; es decir, que lo ideal sería una educación individual y personalizada que les ayude a lograr su pleno desarrollo personal y social.
4. Sólo el 2-3% de los alumnos tiene altas capacidades. Falso. Si sólo tenemos en cuenta el CI, sería cierto, pero hoy sabemos que la inteligencia es múltiple y también se miden otros factores igualmente determinantes para el diagnóstico de altas capacidades. Por tanto, y teniendo esto en cuenta, podemos afirmar que cerca del 10% de las personas poseen algún tipo de alta capacidad (superdotación, sobredotación o talento).
5. Las personas con altas capacidades son solitarias y tienen problemas para relacionarse. Pues dependerá de las circunstancias particulares de cada una, así como del tipo de alta capacidad que presente. Algunos pueden incluso llegar a ser líderes. Otros sí pueden presentar problemas de comunicación e interacción. Lo fundamental es diagnosticar de forma adecuada la alta capacidad para así atender a las necesidades específicas de cada persona.
6. Todos los superdotados han sido precoces, y cuanto más precoces, más inteligentes son. La mayoría de personas sobredotadas ha sido precoz en alguna área del desarrollo, pero no todo el que haya sido precoz tiene por qué ser sobredotado. En un estudio con niños de 5 años de edad, del 2% fueron seleccionados como superdotados; al ser evaluados cinco cursos más tarde, habían perdido esa condición. De igual manera, alumnos que no son considerados sobredotados a edades tempranas, sí lo van siendo al pasar a la adolescencia y a la edad adulta.
7. Los superdotados son distantes, frío y calculadores. Falso. Este es un estereotipo muy televisivo, y es justo lo contrario. Las personas con alta capacidad se caracterizan por tener una gran sensibilidad hacia los sentimientos propios y los de otras personas. Se preocupan por lo que ocurre a su alrededor y a veces su intensidad emocional hace que se involucren en diferentes situaciones personales y sociales. Pueden captar información con fuerte carga emocional, pero si no son capaces de asumirla y procesarla de forma adecuada, es probable que racionalicen sus actos aparentando una frialdad que en realidad es una forma de defensa.
8. Ese niño no es superdotado, es que sus padres lo tienen sobreestimulado. Falso. Por mucho que se intente estimular a un niño, si este no está receptivo o no está preparado para asimilarlo, no tendrá ningún efecto. Y si se intenta forzar, lo más que se puede lograr es el rechazo del niño. Como parece funcionar el tema de la estimulación es así: los niños con más necesidad de estímulos envían señales continuamente a sus padres y, en consecuencia, estos les ofrecen aquellos estímulos que se ajustan a las demandas del pequeño, lo que a su vez facilita el despliegue de su precocidad natural.
9. Los niños con alta capacidad suelen pertenecer a clases sociales altas con medios económicos suficientes para cubrir sus necesidades. Falso. Una adecuada estimulación desde edades tempranas puede favorecer el desarrollo óptimo de estos niños, pero eso no quiere decir que en ambientes desfavorecidos no se encuentren niños con talentos sobresalientes que igualmente podrán alcanzar su máximo potencial si se les brinda la oportunidad. La alta capacidad surge en cualquier ambiente social, y lo que la educación tendría que facilitar es la posibilidad de que todos se desarrollen plenamente independientemente del entorno donde hayan nacido.
10. Los superdotados no quieren relacionarse con la gente porque se consideran superiores. Falso. Muchas veces las personas con altas capacidades no encuentran compañeros con los que compartir sus intereses por algo que se llama disincronía evolutiva (falta de sincronización en el desarrollo intelectual, social, afectivo, físico y motor que aparece en personas con altas capacidades); sin embargo, sus habilidades sociales pueden ser tan buenas como las del resto y pueden tener una vida social plena y satisfactoria.
11. Ocultarle a alguien que es superdotado (o no evaluarlo) le va a evitar problemas ya que una vez lo sepa se sentirá diferente. Más bien al contrario. Una persona sobredotada sin evaluar se puede sentir diferente, no saber por qué y creer que nadie lo comprende. Es frecuente que el diagnóstico suponga un alivio ya que da explicación a sus dificultades, además de que sirve para poder intervenir y ofrecerle un ambiente más rico y adaptado a sus necesidades. Que la persona considere que esa cualidad es un problema va a depender más de su entorno y de cómo lo traten. Por lo tanto, es positivo que entienda que esa diferencia es una buena cualidad y que disfrute de ella.
12. Los superdotados sufren y suelen tener problemas emocionales. No tiene por qué. Las personas con superdotación no tienen más problemas que el resto de la población, el porcentaje con problemas psicológicos y alta capacidad intelectual es el mismo que con capacidad intelectual media.
Es decir, que las personas con altas capacidades sólo se diferencian del resto de la población en su capacidad de aprendizaje. El hecho de que se perciba como un problema está relacionado con que se detectan más los casos de alta capacidad cuando hay otros problemas asociados; cuando no existe ninguna problemática las personas con alta capacidad suelen pasar desapercibidas. Y, por supuesto, sus necesidades son igual de importantes que las de cualquier otra persona y como tales deben ser atendidas.
hola@esperanzaharriero.comEsperanza Gómez Harrierowww.esperanzaharriero.comhttps://www.facebook.com/EGHarrieroTwitter: @EGHarrieroTelegram: telegram.me/egharriero