atletismo
Laura García-Caro, dos semanas después del «despiste» de Roma: «Los dos primeros días era un trapo llorando y no podía estar sola»
La marchadora lepera reconoce que sufrió «un bajón increíble» y que lloró mucho tras perder en la línea de meta el bronce europeo
No obstante, recuerda que lo pasó «incluso peor» en 2023 con el Covid persistente que padeció y ya mira con optimismo a los Juegos Olímpicos de París
Laura García-Caro pierde el bronce sobre la línea de meta del Europeo de Roma
Laura García-Caro pierde el bronce sobre la línea de meta del Europeo de Roma

Laura García-Caro (Lepe, Huelva, 1995) ha contado en el portal Relevo sus sensaciones justo dos semanas después de un día que nunca olvidará. Más bien una imagen, la de la ucraniana Olyanovska adelantándola sobre la línea de meta del Stadio Olimpico de Roma arrebatándole la medalla de bronce europea de los 20 kilómetros marcha cuando ya levantaba el puño celebrándolo.
«Fue un bajón increíble. Los dos primeros días era un trapo, he llorado más que... no sé cuándo en mi vida había llorado tanto. Pero ya vuelvo a recuperarme y ya se ha anunciado la selección para mis segundos Juegos Olímpicos, que es todo un sueño. He pasado por momentos muy duros, pero creo que de estos altibajos emocionales va el deporte y la vida. Estoy con todas las ganas del mundo, porque son unos Juegos en Europa y por toda esa gente que no para de apoyar. Por entrenadores, fisios, por todos los que cada día siguen nuestra carrera deportiva y dan todo tanto como nosotros. Estoy recuperándome, sé que eso [lo ocurrido en Roma] está ahí, pero cada día cobra menos fuerza y quiero ser optimista, como suelo ser. Creo que esto me da también un aprendizaje. A la competición siempre le he dado una definición de ser competitiva, de luchar, de sacar mi mayor garra... pero creo que añado una más con esto y es la revancha», comenzaba contando en una amplia y sincera entrevista concedida a Relevo.
La lepera explicaba también que «los dos primeros días no podía estar sola. He intentado buscar mucha, mucha compañía. Me costó asimilar el choque tan grande que viví cuando llegué a meta y creo que por eso al principio se me veía más entera. Creo que es mi manera de gestionarlo, porque tampoco soy de llegar y pegarle un puñetazo a algo. No es mi personalidad. Pero sí que estaba muy, muy decepcionada y encajando todas las piezas de lo que estaba ocurriendo. Quería hablar porque creo que esto forma parte de nuestro trabajo en las buenas y en las malas, y también creo que el público y toda mi gente se merece que cuente cómo yo lo viví. Después, cuando vi a mi entrenador, sí que rompí a llorar todo lo que pude y creo que en los dos primeros días saqué todo. Creo que tiene esa parte buena de sanar y luego seguir. Estas noticias hay que gestionarlas porque no nos queda otra, si no, no sería persona. Hay que hacer un reset para volver con fuerzas, habrá sentimientos que sé que van a seguir ahí más o menos, pero que podemos con ellos porque he podido con otras situaciones que incluso han sido más dolorosas. Esto forma parte del deporte, de la vida y tenemos que reponernos. Lo que viene es mucho más grande».
💬 “Pensaba que ya lo tenía”.
— Relevo (@relevo) June 7, 2024
Laura García Caro nos cuenta sus sensaciones en su llegada a la línea de meta en los 20 km marcha.
📌 La española estaba celebrando el bronce europeo y la ucraniana Olyanovska aprovechó para adelantarle.
🎥 @AmorosCuatro pic.twitter.com/YEOtAXqfnl
Sobre sus recuerdos de esa aciaga recta final en el estadio Olímpico de Roma, Laura García-Caro recordaba que «yo iba bastante fatigada desde que entramos al estadio, pero yo no paraba de mirar para atrás y me parecía que le llevaba la ventaja suficiente como para que no me cogiera con las fuerzas que tenía, aunque iban muy justas. Quedaba media vuelta y era como, está ahí. Obviamente en ningún momento me creí antes de tiempo, quizás ya cuando quedaban dos metros sí que creía que estaba. Pero yo fui mirando para atrás en el 200, en el 100... iba muy fatigada, pero más o menos veía que tenía ventaja, desde el análisis de ese momento. Después no he visto el vídeo en bucle para analizarlo, pero ahora sí digo que no me puedo confiar en ningún momento y que tengo que seguir hasta el final. Creo que igual, en la última parte, yo pensaba que iba a un ritmo más lento del que yo pensaba y ella venía más rápido del ritmo que yo también analicé en ese momento. Pero así fue... Llámale un despiste o un detalle en el que yo no supe leer la situación fruto de la fatiga o de la emoción. La última vez que miré para atrás creía que con el ritmo que llevaba y con lo que me quedaba, no me podía creer que me podía alcanzar. Aunque ahora mismo es mucho más fácil hacer una lectura».
"No podía marchar ni media hora"
Para los que no lo sepan, la atleta onubense estuvo toda la temporada 2023 fuera por culpa de un llamado Covid persistente: «Es difícil. Pasé muchos días en el sofá con mi compañero Marc Tur, mi amigo del alma, y con muchos amigos y familiares que estuvieron ahí. Fue una situación muy difícil. Ahora cuando yo he comentado con mis amigos 'jolín, cómo voy a afrontar esto que me acaba de pasar', me dicen: 'Lo has pasado muchísimo peor, esto no es nada con respecto a lo que pasaste en 2023'. Y es verdad, porque yo creo que con cualquier lesión física o muscular tú sabes qué tienes que hacer, cuáles son los plazos para volver a competir. Pero en mi situación de salud, no teníamos ni idea ni de cómo recuperarme, ni de cuándo iba a estar mejor ni de cómo mi energía fluctuaba conforme pasaba unas semanas u otras. A veces estaba un poco mejor, pero enseguida que entrenaba un poco más de la cuenta volvía a estar otra vez con muchísima fatiga, dolores de cabeza bastante desagradables... Me costaba a veces hacer el día a día. Fue una situación en la que tuve paciencia. Cuando te falta la salud y te falta algo importante, los objetivos cobran mucha menos relevancia. Es que no podía. Era imposible pensar en ir al Mundial de Budapest cuando no podía marchar ni media hora».