MERCADOS
Los 6 consejos imprescindibles para comenzar a invertir y un 'truco'
Cuando una persona decide invertir por primera vez, su primera opción suele ser el mercado de valores. En este artículo queremos ofrecer algunos consejos sobre cómo invertir en bolsa de forma segura, además de unos “trucos” que nos permiten comprar acciones como si fuéramos genios de las finanzas, pero sin necesidad de serlo.

Antes de andar hay que aprender a gatear. Y, cuando se trata de invertir, esto no es diferente: antes de volvernos locos comprando acciones, debemos aprender tanto como sea posible sobre el mercado de valores y los mercados financieros.
Por ejemplo, qué estrategia de inversión deberíamos o queremos seguir (valor, crecimiento, dividendos, impulso...), qué brókers son los más adecuados, cuál es el riesgo derivado de las inversiones que valoramos, etc.
Estar debidamente capacitado no es solo uno de los mejores consejos para invertir en acciones, sino que también nos mantiene al día con todo lo relacionado con las finanzas. Un buen lugar donde comenzar es a través de Bolsa24.
En general, hay dos tipos de análisis que debemos realizar antes de tomar la decisión de comprar acciones de una empresa: análisis fundamental y análisis técnico.
El análisis fundamental, consiste en determinar el valor de las empresas en función de sus resultados y de sus activos. Para lograrlo, se analizan diversas métricas relacionadas con su rendimiento.
Por otro lado, el análisis técnico busca identificar cualquier tendencia alcista o bajista que permita una adecuada toma de decisiones. El estudio de gráficos es el centro de este análisis. Como norma general, si el valor de una empresa sube, esto debería invitarnos a comprar; mientras que, si su valor disminuye, deberíamos vender y para minimizar pérdidas.
Si ponemos todo nuestro dinero en una empresa y las cosas no salen bien, nuestra inversión estará en riesgo. Si deseamos evitar que esto suceda, debemos diversificar, es decir, distribuir nuestro capital de inversión en acciones de diferentes empresas, tanto (y de la manera más diferente) que nos sea posible.
Así, es más adecuado comprar unas pocas acciones de diferentes empresas, que muchas de una sola empresa o muy pocas. Cuanto más diversificada sea nuestra cartera de inversión, menor será el riesgo.
Un error muy común que cometen la mayoría de los inversores, especialmente al inicio de la actividad, es ignorar las comisiones y los costes de inversión, o lo que es lo mismo, los costes totales. Por ejemplo, en caso de operar a través de un bróker, debemos informarnos sobre cuales sus precios, comisiones y condiciones.
Y es que, a largo plazo, el monto de estos costes puede ser tal que, de hacer el cálculo, nos echaríamos las manos a la cabeza.
Para muchas personas, Warren Buffet es el mejor inversor del mundo. Una vez dijo que “nadie, absolutamente nadie, puede saber qué sucederá con las acciones de una empresa, y menos aún en el corto plazo”. Que eso es algo simplemente impredecible.
Y, por muy contundente que nos parezca esta afirmación, proviniendo de este señor, debe ser tomada muy en serio. Por lo tanto, nuestro consejo a la hora de invertir en acciones es centrarse siempre en las inversiones a largo plazo e ignorar las fluctuaciones habituales del mercado a corto plazo.
Seamos claros, la tendencia del mercado de valores a largo plazo es alcista.
Como se suele decir, el principal enemigo de cada inversor es uno mismo.
En el momento en que nuestro estado de ánimo, ya sea en forma de miedo, emoción, ilusión, esperanza, intuición, etc. entra en juego al invertir, estás perdido.
La inversión debería ser un proceso matemático y frío, desprovisto de emociones o sentimientos.
¿Qué pasaría si te dijéramos que hay una manera muy fácil de invertir en acciones siguiendo unos simples consejos de inversión?
1. La formación necesaria para comenzar a invertir en un fondo indexado o ETF es mínima, especialmente si lo hacemos a través de cualquier gestor automatizado.
2. Ahorro técnico, ya que no tendremos que analizar empresas una a una. Los índices hacen este trabajo por nosotros.
3. Máxima diversificación. Al invertir en fondos o ETF, estamos comprando acciones de cientos o miles de empresas en todo el mundo.
4. Mínimas comisiones. Difícilmente puede encontrar una inversión que cueste menos que un ETF.
5. Son productos de inversión pensados para el largo plazo. Y sabemos que nada ni nadie puede vencer de manera sostenible al mercado en el largo plazo.
6. Emociones a raya. Si automatizamos las inversiones transfiriendo fondos periódicamente desde nuestra cuenta de ahorros a un fondo o ETF, nuestras emociones se quedan fuera de juego.