medio ambiente

Destruyen una treintena de nidos de un ave protegida en el entorno de Doñana

La asociación El Burrito Feliz denunció ante el Seprona que alguien había sellado los nidos matando por asfixia a los pájaros y sus crías

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Dos agentes del Seprona abriendo las bocas de los nidos que habían sido taponadas h24

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La asociación El Burrito Feliz ha denunciado la destrucción de una treintena de nidos pertenecientes a una colonia de abejaruco en el entorno de Doñana. Los nidos se encontraban en las lindes de la denominada Vereda Hinojos-La Palma y una patrulla del Seprona acudió a la llamada de los denunciantes para tratar de salvar a algunos de los ejemplares.

«Cuando llegaron a la zona, los agentes resultaron sorprendidos por la magnitud del destrozo medioambiental, y es que casi 35 nidos de esta ave protegida y de bellísimo plumaje habían sido sellada durante la noche, de forma planificada, con piedras y argamasa de barro. Un desastre ecológico llevado a cabo, necesariamente, por más de una persona y en el que se utilizaron materiales y agua desplazados a la zona«, señala un comunicado del colectiv o

Los agentes usando palas para al menos salvar alguna de las aves sepultadas. Pero lo profundo de las cavidades, que pueden alcanzar el metro, y las piedras que sellaban los túneles hicieron imposible ese objetivo. «Durante la noche los abejarucos, tanto el macho como la hembra, se turnan para incubar los huevos, motivo por el cual el taponar las salidas en estas horas no solo destruye a las crías, sino que también elimina a los progenitores y se evitan nuevas nidadas. Una muerte horrible por sofocación y asfixia que, según EBF-Doñana podría haber acabado con más de un centenar de aves, ya que normalmente en cada nido salen adelante de seis a ocho pollos».

Según este colectivo, el sellado de la treintena de nidos podría haber supuesto la destrucción de casi la totalidad de una de las colonias más importantes de la zona. «Tanto es así, que el año pasado la empresa TRAGSA, durante las labores de mejora en el pavimento de la vía, llego a establecer un protocolo de protección a estos nidos para evitarles cualquier daño o alteración«.

Desde la Estación Biológica de Doñana advierten que prácticamente también ha desaparecido la colonia de chotacabras en solo dos temporadas. Había unas 26 parejas reproductoras en esa demarcación, de las cuales solo hay constancia de la presencia de una pareja reproductora en el presente año.

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