POR PARTE DE ALUMNOS Y PADRES
El IES Saltés de Punta Umbría pide a la Junta que actúe ante los continuos 'insultos, agresiones y amenazas' a docentes
12.35 h. El claustro del IES Saltés de Punta Umbría presenta un escrito ante la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía para exigir soluciones ante los 'insultos, agresiones y amenazas' que reciben los docentes por parte de alumnos y padres desde hace un tiempo.Han interpuesto más de una decena de denuncias ante la Guardia Civil, a quien, junto a la Policía Local, llaman casi a diario.

El escrito es el siguiente:
El claustro del I.E.S. Saltés de Punta Umbría, a través del presente escrito, desea denunciar la insostenible situación de insultos, agresiones tanto física como verbales y amenazas (proveniente de alumnado y padres) en la que, desde hace ya un tiempo, nos encontramos realizando nuestra labor, con objeto de que la administración educativa tome medidas urgentes y excepcionales que permita realizar nuestra actividad docente en condiciones que garanticen nuestra salud y seguridad.
Deseamos dejar constancia que esta situación actual que denunciamos no es novedosa, viniendo a ser un problema que se ha enquistado en nuestro centro desde hace un tiempo, pero últimamente se ha visto agravada hasta niveles realmente insostenibles que imposibilitan la realización de nuestra labor docente en un ambiente de mínimo respeto o seguridad, motivo por el cual nos ponemos en contacto con la Delegación a través de los cauces de comunicación disponibles para hacer oír nuestra voz en pro de adoptar los medios que vengan a poner fin a esta realidad.
Somos conscientes que en nuestro trabajo es inevitable tener que enfrentarnos a situaciones que impliquen provocaciones y/o insultos por parte del alumnado, y del mismo modo parte de nuestro trabajo conlleva saber gestionar este tipo de situaciones para normalizar el clima de respeto en el aula. Para ello hay establecidos cauces destinados a suprimir este tipo de comportamientos contrarios a las normas de convivencia que deben primar en un centro docente. Sin embargo, cuando esas provocaciones e insultos degeneran en amenazas y agresiones, tanto verbales como físicas, y cuando los medios de los que disponemos demuestran ser claramente insuficientes e ineficaces, es cuando la administración educativa debe tomar medidas extraordinarias que vengan a normalizar el clima de respeto necesarios para un correcto funcionamiento del centro y sus trabajadores.
Esta situación que denunciamos está respaldada a través de los más de mil partes presentados por el personal docente del centro donde quedan reflejados los insultos, agresiones físicas y verbales y/o destrozos de los que ha sido objeto tanto profesores como el centro, y que ejemplificamos en la hoja adjunta a la presente solicitud donde se muestra solo algunos de los casos a los que el personal docente de este centro debe enfrentarse día a día.
A pesar de ello no hemos observado un cambio en la actitud del alumnado ni avance que haga pensar en una futura remisión de los hechos denunciados. Hay que destacar también que en lo que va de curso hemos interpuesto más de una decena de denuncias ante la Guardia Civil, y que los llamamientos tanto a Guardia Civil como Policía Local son casi diarios.
Por si todo esto fuera poco, durante el presente curso hemos tenido que pedir ayuda a la Guardia Civil y Policía local de Punta Umbría para que controlara la venta y consumo de estupefacientes tanto dentro como en el perímetro del centro. Esta situación ha sido denunciada a las siguientes instancias: Ayuntamiento de Punta Umbría, Comandancia de la Guardia Civil de Punta Umbría, Delegación Territorial de Educación de Huelva y Subdelegación del Gobierno de Huelva.
No se trata este del primer escrito que presentamos ante la Delegación en el que hacemos constar la vulneración de las normas de conducta del alumnado de forma sistemática. Sin embargo, en la actualidad no solo comprobamos la continuidad de estos comportamientos sino que estamos siendo testigos de un paso más allá en la que la virulencia de los mismos están dando lugar a otros más graves que sin duda están tipificados como delitos y que, de seguir así, desembocarán irremisiblemente en situaciones más graves que sin duda lamentaremos.
Es por ello que solicitamos a la Delegación Territorial de Educación de Huelva que, con independencia que tenga a bien la consideración de nuestro instituto como centro de difícil desempeño como hemos venido solicitando repetidamente, adopte con carácter inmediato las medidas que estime adecuadas para normalizar la situación que venimos sufriendo.
La inactividad de la Delegación ha creado en nosotros un sentimiento de resignación e indefensión que no estamos dispuestos a seguir soportando durante más tiempo. Recurrimos una vez más a la Delegación como nuestros superiores inmediatos con objeto que dé respuesta de una manera eficaz a todo cuanto hemos expuesto, pero no descartamos que, en caso que no obtener una respuesta más allá de la meramente informativa y burocrática, recurramos a la otros agentes sociales y autoridades para intentar poner fin a este conflicto por cuantos medios estén a nuestro alcance.
En espera de no tener que llegar a este último punto y agradeciéndole su atención, los abajo firmantes respaldamos el presente escrito y quedamos a su completa disposición para solucionar esta situación cuanto antes.