El Gobierno insta a los municipios a pactar el reparto del plan Doñana
El Miteco no pone fecha límite a la negociación pero avisa de que si no hay consenso, actuará
Las ayudas del plan Doñana enfrentan a los municipios: desacuerdo en los criterios para acceder a las mismas
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El Ministerio para la Transición Ecológica «espera que se llegue a un consenso, por el bien de Doñana«. Así se han pronunciado fuentes ministeriales después de trascender que el reparto de fondos del plan Doñana entre los ayuntamientos de los 14 municipios del área de influencia del espacio natural está creando tensiones entre los mismos, al no alcanzarse por el momento acuerdo alguno acerca de los criterios a priorizar.
Así, tras dos reuniones en las últimas semanas, las posturas se encuentran, tal y como informaba ayer este periódico, bastante alejadas, sin que se atisbe por el momento un mínimo consenso.
Consenso en el que sí confían por parte del Miteco, que fue el que conminó a los municipios destinatarios de las ayudas -a saber, Almonte, Bonares, Lucena del Puerto, Moguer, Rociana del Condado, Palos de la Frontera, Bollullos par del Condado, Pilas, Villamanrique de la Condesa, La Puebla del Río, Hinojos, Aznalcázar, Isla Mayor y Sanlúcar de Barrameda- a sentarse y acordar los criterios que deben regir en el reparto de ayudas directas a las administraciones locales para poner en marcha proyectos y actuaciones que fomenten la innovación y la diversificación económica en sus municipios.
«El objetivo principal es el acuerdo, el diálogo y el consenso«, insisten fuentes del Ministerio, que por el momento no ha fijado una fecha límite para que los ayuntamientos se pongan de acuerdo y le trasladen su propuesta. De hecho, su interés en que realmente sean los gobiernos locales los que sean capaces de consensuar la mejor fórmula para repartir estos fondos de forma equilibrada y solidaria es lo que motiva la ausencia de esta fecha tope, aunque el deseo es que el acuerdo llegue pronto «por el bien de Doñana, para que los municipios cuenten cuanto antes con financiación«.
Estas mismas fuentes han aclarado que, «en caso de que no se llegue a un acuerdo, el ministerio estudiará los siguientes pasos«.
Aunque aún hay margen de negociación y, de hecho, los ayuntamientos se han emplazado a volver a sentarse en las próximas semanas para ver si acercan posturas, ya hay regidores que han adelantado que no estarían dispuestos a asumir un reparto que consideren lesivo para los intereses de los vecinos de su municipio, prefiriendo en este caso que sea el Miteco el que decida y responda ante los habitantes de la zona acerca de los criterios que se establezcan.
La cantidad de partida, principal escollo
Según ha podido saber este periódico, el punto más conflictivo de la negociación que se está desarrollando radica en la cantidad fija que se queda de inicio cada ayuntamiento, y el modo en el que se reparte la cifra restante.
Así, mientras algunos apuestan por repartirla toda en base a criterios como población, superficie agrícola cultivada o tierras en el Parque Nacional de Doñana, otros consideran que la cantidad de partida para todos los municipios debe ser suficiente como para que las ayudas cumplan su función, que es la de permitir poner en marcha proyectos de reconversión para los trabajadores agrícolas.
En ese sentido, el plan aprobado por la Junta y el Gobierno señala que la Administración General debe «apoyar a los municipios de la zona para garantizar que tengan capacidad suficiente para prestar los servicios demandados por la población».
Ahora el Ministerio confía en que los municipios sean capaces de alcanzar un acuerdo sobre cómo se reparten esos recursos, mientras que desde la Junta de Andalucía en Huelva han preferido no entrar a valorar la situación.
