Jorge Cotallo: «Lo que hace a Huelva capital de Tarteso es su continuidad histórica»

El presidente de la Asociación Arqueo Huelva rueda el documental 'Tarteso, el latido de la tierra', con el que buscan que «se entienda con claridad que Huelva es el origen» de esta civilización

Destaca que la capital onubense, apoyada en los numerosos restos arqueológicos tartésicos, «es la única ciudad que puede presumir de tener esa línea cronológica tan completa»

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Las imágenes de la inauguración de la exposición 'La Joya, vida y eternidad en Tarteso'

Jorge Cotallo, durante el rodaje del documental H24
Mario Asensio Figueras

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Contagiar su pasión por un pasado muy presente que genera conocimiento y orgullo podría ser el lema de vida de Jorge Cotallo, un divulgador de la riqueza arqueológica de Huelva que siempre ha ido un paso más allá. De niño comenzó a alimentar su afán por conocer la historia detrás de todo lo que contemplaba en el Museo Provincial, especialmente los restos de la época tartésica. Tras vivir unos años fuera regresó con la vocación de contar de un modo interesante lo mucho que merece la pena de una civilización que desde Huelva marcó un hito en su tiempo. El perfil de redes sociales @ArqueoHuelva fue el mejor modo de hacerlo para valorar el patrimonio onubense y despertar el sentimiento de identidad por ser herederos del mismo. Pero no se quedó ahí y con otras personas con su mismo impulso constituyeron una asociación cultural muy activa con el mismo nombre. Tras muchas actividades se propusieron recrear el carro tartésico encontrado en la tumba 17 de la necrópolis de la Joya, el símbolo de cénit socioeconómico que alcanzó la ciudad entonces. Es el centro de las miradas de la exposición 'La Joya. Vida y eternidad en Tarteso', hasta enero de 2026 en el Museo de Huelva. El siguiente paso ha sido embarcarse como director y guionista en el rodaje del documental 'Tarteso, el latido de la tierra'. En este proyecto estará inmerso en los próximos meses de la mano del productor onubense José David Díaz, a través de la productora cinematográfica Te lo garantizo Producciones, junto a Enrique Bernal y con el apoyo de The Blue House Films. Sobre todo ello conversa en las siguientes líneas.

-¿Cómo va el rodaje del documental 'Tarteso, el latido de la tierra'? ¿Qué planificación van a seguir, en qué localizaciones y con qué voces autorizadas van a contar?

-El rodaje comenzó a principios de julio y se extenderá durante varios meses. Visitaremos enclaves fundamentales como La Joya, el cabezo de San Pedro, Tejada la Vieja, la propia ría, o incluso puntos del Guadiana como el increíble yacimiento de Casas del Turuñuelo, que nos ayudará a arrojar algo de luz sobre el final de Tarteso. Contaremos con arqueólogos de prestigio, historiadores, pero también con vecinos y personas que aportan una mirada distinta. El equipo técnico y la propia productora están formados por profesionales del audiovisual onubense, con una apuesta firme por la calidad estética y narrativa.

Imagen principal - Rodaje en la excavación de la ciudad tartésica de Tejada la Vieja
Imagen secundaria 1 - Rodaje en la excavación de la ciudad tartésica de Tejada la Vieja
Imagen secundaria 2 - Rodaje en la excavación de la ciudad tartésica de Tejada la Vieja
Rodaje en la excavación de la ciudad tartésica de Tejada la Vieja H24

-¿De dónde surge la idea de realizar este proyecto? ¿Qué enfoque le quieren dar?

- La idea nace de una necesidad, contar de una vez por todas la historia de Tarteso desde una perspectiva más actualizada, rigurosa y, sobre todo más onubense. No es que no me guste cómo se ha contado hasta ahora, pero muchas veces se ha hecho desde clichés o con enfoques excesivamente academicistas o centralistas, dejando a Huelva en un segundo o tercer plano, cuando es aquí donde late con más fuerza esa raíz tartésica, donde el corazón de Tarteso empieza a latir. Nuestro enfoque quiere ser divulgativo, pero también emocional, conectando ciencia y sentimiento, pasado y presente. Queremos que se entienda con claridad que Huelva es el origen de Tarteso.

«Lo más urgente es que Huelva se lo crea, que la gente de aquí entienda el valor inmenso de lo que tiene bajo sus pies»

-¿Qué es más prioritario en el documental, que los onubenses valoren más el legado tartésico o que fuera de Huelva se sitúe a la ciudad como referente de la cultura tartésica de un modo más claro?

- Ambas cosas van de la mano. Pero si tenemos que elegir una prioridad, diría que lo más urgente es que Huelva se lo crea, que la gente de aquí entienda el valor inmenso de lo que tiene bajo sus pies. Sólo cuando eso ocurra, será más fácil que desde fuera nos miren como el referente que realmente somos. Primero sembrar en casa, luego proyectar hacia el exterior.

«Este documental es una herramienta más para despertar ese orgullo dormido, para mirar al pasado no con nostalgia, sino con ambición de futuro»

-En una ocasión me dijo que Huelva, dentro de que es una ciudad con mucha historia, debía centrarse en su pasado tartésico y en ponerlo en valor. ¿Este documental viene a ahondar en esa idea?

-Totalmente. Siempre he creído que el pasado tartésico de Huelva no sólo es un elemento diferencial, sino una oportunidad única para posicionar la ciudad y su identidad. Este documental es una herramienta más para despertar ese orgullo dormido, para mirar al pasado no con nostalgia, sino con ambición de futuro. Tarteso no es sólo una leyenda, un colegio o una calle, es una realidad arqueológica que merece estar en el centro del relato de Huelva.

«Este documental es un homenaje a esa curiosidad, a recuperar esa mirada de niño que nunca se ha ido del todo»

-Quien le conozca sabe de la manera pasional con la que vive su trabajo y la dedicación e ilusión que le pone a todo. ¿Qué significa en el plano personal este documental para quien fue ese niño maravillado por el pasado de Huelva y lo sigue estando?

-Es un nuevo sueño hecho realidad. Desde pequeño me fascinaban las historias que contaban los mayores, los restos antiguos, los misterios del pasado. Recuerdo quedarme embobado en el Museo de Huelva viendo los objetos de la necrópolis de La Joya, preguntándome quiénes serían esas personas. Sin duda, este documental es un homenaje a esa curiosidad, a recuperar esa mirada de niño que nunca se ha ido del todo. Y también es un compromiso con la ciudad que me vio nacer, con la historia y con las generaciones futuras, que merecen conocerla como es, no como nos la han contado. En lo personal, es otro peldaño más, otro proyecto impensable hace apenas tres años, cuando aún vivía lejos de casa. Pero ya es real, es un paso más en mi contribución a la puesta en valor y divulgación del patrimonio onubense.

Imagen principal - Jorge Cotallo: «Lo que hace a Huelva capital de Tarteso es su continuidad histórica»
Imagen secundaria 1 - Jorge Cotallo: «Lo que hace a Huelva capital de Tarteso es su continuidad histórica»
Imagen secundaria 2 - Jorge Cotallo: «Lo que hace a Huelva capital de Tarteso es su continuidad histórica»

-¿Qué elemento cree que hace indiscutiblemente a Huelva capital de Tarteso? ¿Debería aparecer un resto arqueológico que lo reafirmara más?

-Lo que hace a Huelva capital de Tarteso es su continuidad histórica, desde los restos de la Edad del Bronce hasta el siglo VI a.C., pasando por la riqueza funeraria de la necrópolis de La Joya, la importancia del puerto antiguo, el santuario de la calle Méndez Núñez o el yacimiento de La Orden-Seminario. Es la única ciudad que puede presumir de tener esa línea cronológica tan completa. En Huelva se dan todas las 'casualidades' arqueológicas que podrían vincularla con esa posible capitalidad. Los fondos del museo están llenos de vestigios que lo demuestran.

-De manera resumida, ¿cuáles son las fechas y acontecimientos clave de la historia de la civilización tartésica?

-El inicio se da en el siglo X a.C., cuando empiezan a desarrollarse comunidades complejas en el suroeste peninsular y llegan los primeros fenicios a Huelva. Su esplendor se sitúa entre el 750 y el 600 a.C., con una cultura urbana, metalúrgica y comercial plenamente desarrollada, muy vinculada al Mediterráneo y con fuertes contactos con fenicios y griegos. Su final se da entre el 550 y el 500 a.C., cuando Tarteso desaparece como entidad reconocible. ¿Por qué? Aún es un misterio: invasiones, transformaciones internas, catástrofes naturales... Lo cierto es que su legado no desaparece, se transforma y se expande hacia el interior, por el Guadiana.

«Muchas personas, incluso expertos, nos han comentado que nunca habían visto una reproducción -del carro tartésico- tan cuidada, evocadora y con tanto gusto, calidad estética y rigor científico»

-La Asociación Arqueo Huelva que preside es parte importante de la exposición 'La Joya. Vida y eternidad en Tarteso'. ¿Qué balance hace de esta muestra? ¿Qué comentarios les han llegado de la magnífica reproducción del carro tartésico de la tumba 17 que han desarrollado?

-El balance es extraordinario. La exposición ha sido un punto de inflexión en la forma en que Huelva mira a su pasado tartésico. La acogida del público ha superado nuestras expectativas y las del propio museo. El carro es el gran protagonista, el que se lleva todas las miradas y fotos de los visitantes. Muchas personas, incluso expertos, nos han comentado que nunca habían visto una reproducción tan cuidada, evocadora y con tanto gusto, calidad estética y rigor científico. Hemos logrado que la gente no sólo imagine cómo fue esa Huelva de hace 2.700 años. Y eso es impagable.

-¿Se puede decir que 2025 es el año más tartésico de los últimos años? Los restos del puerto de la antigua delegación de Hacienda, la exposición, las nuevas campañas de excavación en Tejada la Vieja, el documental... ¿Lo ve superable?

-Sin duda, 2025 es un año histórico para Tarteso y para Huelva. Todo está confluyendo: los hallazgos, la divulgación, el interés mediático, la implicación institucional y ciudadana. Estamos ante una oportunidad única, casi irrepetible. Pero más que preguntarnos si es superable, lo importante es que no sea un pico puntual, sino el inicio de una nueva etapa, de una política sostenida de puesta en valor. Porque Tarteso tiene mucho más que ofrecernos. Y Huelva también. Es sólo el inicio de algo mucho más grande que todos los onubenses merecemos.

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