el rocío

¿Por qué la Virgen del Rocío es conocida como la Blanca Paloma?

Una denominación poética que hunde sus raíces en la tradición mariana y la cultura andaluza

El curioso reto que está llevando a cabo un onubense por El Rocío: lleva más de 10 días

¿Pueden entrar los vehículos a la aldea durante la romería de El Rocío 2025?

La Virgen del Rocío en su santuario en una imagen de archivo h24

V. G.

Huelva

La devoción a la Virgen del Rocío trasciende lo religioso para convertirse en una de las expresiones más poderosas de la identidad andaluza. Cada año, miles de personas peregrinan hasta la aldea almonteña para rendir culto a una imagen que, desde siglos atrás, ha sido centro espiritual de fe, tradición y cultura popular. Entre los muchos nombres con que se conoce a la Virgen, uno destaca por su simbolismo y arraigo popular: la Blanca Paloma.

Pero ¿de dónde surge esta denominación tan extendida entre los fieles? ¿Es una invención popular o tiene un origen más profundo? Para responder a esta pregunta hay que remontarse tanto a las fuentes litúrgicas como a la historia de la propia Hermandad Matriz de Almonte.

El origen del nombre Blanca Paloma

La advocación de la Virgen del Rocío, también conocida como la Blanca Paloma, tiene profundas raíces históricas y simbólicas en la tradición cristiana.

Según se cuenta en el libro 'Historia y teología de los títulos Rocío y Blanca Paloma', del sacerdote, historiador y teólogo, Manuel Jesús Carrasco, la imagen de la Virgen fue encontrada en el paraje de Las Rocinas, y originalmente fue conocida como la Virgen de las Rocinas. Con el tiempo, ya en el siglo XVII, su nombre evolucionó durante una época de inundaciones y sequías a Virgen del Rocío.

El título de «Blanca Paloma» está estrechamente vinculado a la celebración de Pentecostés, festividad que conmemora la venida del Espíritu Santo, tradicionalmente representado como una paloma blanca. La romería del Rocío se celebra precisamente en esta fecha, lo que refuerza la asociación simbólica entre la Virgen y la paloma blanca. Esta conexión teológica y simbólica ha arraigado profundamente en la devoción popular, consolidando el apelativo de «Blanca Paloma» para la Virgen del Rocío.

Sobre la romería de El Rocío

Según la Hermandad Matriz de Almonte y los archivos eclesiásticos consultados, el origen del culto a la Virgen del Rocío se remonta al siglo XV, cuando, según la tradición, un cazador halló la imagen en el paraje de Las Rocinas. A partir de ese momento, se comenzó a construir una devoción que culminaría en el siglo XVII con la creación de la Hermandad Matriz de Almonte, encargada de organizar los cultos y custodiar la imagen.

La romería comenzó a tomar forma en el siglo XVIII, cuando diferentes pueblos y hermandades filiales comenzaron a acudir en peregrinación a la aldea de El Rocío. Desde entonces, se ha convertido en una de las concentraciones religiosas más multitudinarias de Europa, con una mezcla única de espiritualidad, folclore, naturaleza y sentimiento colectivo.

Declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional, la romería mantiene vivos ritos centenarios como el salto de la reja, en el que los almonteños sacan a hombros a su Virgen entre la emoción de miles de peregrinos.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación