Esther Gómez: 'Hay que vivir aquello que nos nutre el alma, solo así creceremos en vez de envejecer'

PREGUNTA.- ¿Cuál es el principal mensaje que lanza su nuevo poemario, ‘Morder el tiempo’?

RESPUESTA.- 'Morder el tiempo' es un poemario que encierra entre sus líneas al tiempo y A la manera de que este no pase por nosotros sin más. Busca arañar y morder el tiempo, saborearlo. Y narra también en poemas las veces en que es el tiempo quien muerde y araña. 

P.- ¿Qué considera que es el mejor modo de emplear el tiempo para que esa mordedura sea saciante? 

R.- Yo siempre he dicho que la mejor manera de aprovechar la vida es vivirla, que no hemos venido aquí a ponernos a dieta. Y que hay que morder y saborear todos los momentos que se nos presentan. A veces es el propio tiempo el que nos muerde y es duro; hay que esperar a que la marca desaparezca y no recrearnos en ella. Admito que la poesía es mi vía de escape y que es cierto que no siempre sigo todo lo que escribo. Pero hay que vivir aquello que nos nutre el alma, solo así creceremos en vez de envejecer. 

P.- ‘Blanco Roto’ tuvo como semilla dos versos dedicados a su abuelo ¿Cómo ha sido el origen y el proceso de creación de esta obra? 

R.- Este proceso ha sido más largo. El tiempo siempre ha despertado mi interés, me inspira cada día. Tenía poemas ya escritos sobre el tiempo, es una temática que de una manera u otra aparece a menudo en lo que escribo. Y un día, gracias a Juan Cobos y a Daniel Salguero, decidí formar un poemario en torno a este núcleo temático. Creo que es el germen de todo y gracias a esto, un poemario sobre el tiempo puede albergar mucha vida dentro de sí. 

P.- La presentación será este miércoles. ¿Algún detalle que pueda adelantar sobre cómo será? 

R.- Es cierto, la presentación será este miércoles en la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez de Moguer, a las 19.00 horas. La entrada es libre e invito a todas las personas a las que pueda apetecerle conocer a “Morder el tiempo”.  Adelanto que como con “Blanco roto”, la primera presentación la realizo de la mano de Daniel Salguero, por lo que la poesía y el buen hacer con él ya están asegurados. 

P.- ¿Qué diferencias y puntos en común tiene con su anterior poemario, ‘Blanco roto’? 

R.- Pues me es difícil compararlos. Es cierto que “Morder el tiempo” es un poemario más directo, de una lectura más sencilla, pero que no deja de albergar las metáforas a las que suelo acudir para explicarme lo que siento. Así como “Blanco roto” tenía una línea más intimista y otra más social; “Morder el tiempo” queda dividido en tres partes, de las que adelanto, una recoge poemas eróticos y de amor, algo que según me comentan, parece que gusta.

P.- ¿Cómo han evolucionado su estilo literario y sus inquietudes poéticas?

R.- Según me dicen, en 'Morder el tiempo' utilizo un lenguaje más directo, menos artificioso, sin dejar de recurrir a distintas figuras literarias, sobre todo a la metáfora. Últimamente he leído poesía en otros idiomas, sobre todo en francés y me acojo a todo lo que me recomiendan, porque como suelo decir, me considero y me consideraré siempre “novata” y abierta a aquello que quieran enseñarme. 

P.- ¿Se encuentra en el momento creativo que imaginaba hace unos años?

R.- Hace acaso 4 años soñaba con publicar un libro de poemas. Era mi sueño desde niña, una utopía. Hoy me encuentro a punto de publicar mi segundo poemario y sé que no voy a asimilarlo. Mi hipersensibilidad me hace huir de todo aquello que, negativo o positivo, implica sentimientos desmedidos. Soy feliz y afortunada, y estoy muy agradecida. 

P.- ¿En qué encuentra inspiración? ¿La poesía parte de la forma en la que observamos nuestro entorno? 

R.- Suelo encontrar inspiración en casi todo; mi forma de vivir, sentir y explicarme la vida se basa en la poesía. Quienes me conocen dicen que soy hipersensible, que tengo otra forma de percibir lo que ocurre; y ahora, ya sé que no puedo huir de ella. Por motivos profesionales, intenté dejar la poesía el año pasado y lo pasé fatal, verdaderamente. Como digo, creo que quienes tenemos esta extraña forma de ver la vida, no podemos escapar de ella.

P.- ¿Está inmersa en otros proyectos, literarios o no?

R.- Sí. Quizás mi mayor proyecto a día de hoy sea sacarme la plaza de maestra. Es algo para lo que he trabajado muy duro y que he rozado varias veces con la yema de los dedos, pero que al final siempre se ha escapado. A nivel literario, estoy trabajando en un proyecto solidario, en otro poemario y en un libro de aforismos; pero quiero darles tiempo. Quiero disfrutar de 'Morder el tiempo' y de la inspiración que me ofrezca para continuar los anteriores. 

P.- ¿Está la sociedad actual carente de poesía?

R.- Sí y no. Hay mucho movimiento de “poesía en la red” que debíamos cuestionarnos. Pero el interés de las personas por la poesía parece que ha crecido un poco, y deberíamos quedarnos con eso y aprovecharlo; no dejar de ofrecer diferentes formas y que cada uno se quede aquello que le llene. Y favorecer así que la poesía encuentre su sitio.

P.- ¿Qué claves recomendaría a alguien que quiera plasmar sus sentimientos en un poema?

R.- Como suelo decir, no me considero experta en nada y desde esa perspectiva me es difícil aconsejar.  Cuando realizo talleres en centros escolares, por ejemplo, suelo partir de la rima, porque favorece la creación de forma más sencilla y directa. Con el tiempo, yo he intentado desvestir de artilugios el lenguaje y dejarlo puro, buscando la fuerza poética. No sé si me sale, pero es cierto que un poema puede servir a modo de salvavidas, y por eso siempre lo recomiendo. 

P.- ¿Dónde se puede encontrar más información sobre su obra?

 No suele haber dos veces exactamente iguales de ninguna experiencia, aunque habitualmente la segunda va encadenada a la primera, como un paso tras otro en un camino por recorrer. La consciencia de ese camino es el que hace que exista y cuando se desarrolla con una sensibilidad literaria merece ser plasmada en el papel para que perdure en el tiempo. Precisamente el tiempo es la razón de ser del nuevo poemario de Esther Gómez Rodríguez, joven moguereña que en 2017 editó 'Blanco Roto' y que este miércoles vuelve a estar de estreno en el mismo escenario, la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez de Moguer. En la niña que cumplió la utopía de compartir su forma de percibir el mundo el tiempo es un tema recurrente en sus pensamientos y reflexiones y ha decidido darle el protagonismo que merece, con el uso que hacemos de él y el efecto que provoca en nosotros.   PREGUNTA.- ¿Cuál es el principal mensaje que lanza su nuevo poemario, ‘Morder el tiempo’?RESPUESTA.- 'Morder el tiempo' es un poemario que encierra entre sus líneas al tiempo y A la manera de que este no pase por nosotros sin más. Busca arañar y morder el tiempo, saborearlo. Y narra también en poemas las veces en que es el tiempo quien muerde y araña.  P.- ¿Qué considera que es el mejor modo de emplear el tiempo para que esa mordedura sea saciante? R.- Yo siempre he dicho que la mejor manera de aprovechar la vida es vivirla, que no hemos venido aquí a ponernos a dieta. Y que hay que morder y saborear todos los momentos que se nos presentan. A veces es el propio tiempo el que nos muerde y es duro; hay que esperar a que la marca desaparezca y no recrearnos en ella. Admito que la poesía es mi vía de escape y que es cierto que no siempre sigo todo lo que escribo. Pero hay que vivir aquello que nos nutre el alma, solo así creceremos en vez de envejecer.  P.- ‘Blanco Roto’ tuvo como semilla dos versos dedicados a su abuelo ¿Cómo ha sido el origen y el proceso de creación de esta obra? R.- Este proceso ha sido más largo. El tiempo siempre ha despertado mi interés, me inspira cada día. Tenía poemas ya escritos sobre el tiempo, es una temática que de una manera u otra aparece a menudo en lo que escribo. Y un día, gracias a Juan Cobos y a Daniel Salguero, decidí formar un poemario en torno a este núcleo temático. Creo que es el germen de todo y gracias a esto, un poemario sobre el tiempo puede albergar mucha vida dentro de sí.  P.- La presentación será este miércoles. ¿Algún detalle que pueda adelantar sobre cómo será? R.- Es cierto, la presentación será este miércoles en la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez de Moguer, a las 19.00 horas. La entrada es libre e invito a todas las personas a las que pueda apetecerle conocer a “Morder el tiempo”.  Adelanto que como con “Blanco roto”, la primera presentación la realizo de la mano de Daniel Salguero, por lo que la poesía y el buen hacer con él ya están asegurados.  P.- ¿Qué diferencias y puntos en común tiene con su anterior poemario, ‘Blanco roto’? R.- Pues me es difícil compararlos. Es cierto que “Morder el tiempo” es un poemario más directo, de una lectura más sencilla, pero que no deja de albergar las metáforas a las que suelo acudir para explicarme lo que siento. Así como “Blanco roto” tenía una línea más intimista y otra más social; “Morder el tiempo” queda dividido en tres partes, de las que adelanto, una recoge poemas eróticos y de amor, algo que según me comentan, parece que gusta. P.- ¿Cómo han evolucionado su estilo literario y sus inquietudes poéticas?R.- Según me dicen, en 'Morder el tiempo' utilizo un lenguaje más directo, menos artificioso, sin dejar de recurrir a distintas figuras literarias, sobre todo a la metáfora. Últimamente he leído poesía en otros idiomas, sobre todo en francés y me acojo a todo lo que me recomiendan, porque como suelo decir, me considero y me consideraré siempre “novata” y abierta a aquello que quieran enseñarme.  P.- ¿Se encuentra en el momento creativo que imaginaba hace unos años?R.- Hace acaso 4 años soñaba con publicar un libro de poemas. Era mi sueño desde niña, una utopía. Hoy me encuentro a punto de publicar mi segundo poemario y sé que no voy a asimilarlo. Mi hipersensibilidad me hace huir de todo aquello que, negativo o positivo, implica sentimientos desmedidos. Soy feliz y afortunada, y estoy muy agradecida.  P.- ¿En qué encuentra inspiración? ¿La poesía parte de la forma en la que observamos nuestro entorno? R.- Suelo encontrar inspiración en casi todo; mi forma de vivir, sentir y explicarme la vida se basa en la poesía. Quienes me conocen dicen que soy hipersensible, que tengo otra forma de percibir lo que ocurre; y ahora, ya sé que no puedo huir de ella. Por motivos profesionales, intenté dejar la poesía el año pasado y lo pasé fatal, verdaderamente. Como digo, creo que quienes tenemos esta extraña forma de ver la vida, no podemos escapar de ella. P.- ¿Está inmersa en otros proyectos, literarios o no?R.- Sí. Quizás mi mayor proyecto a día de hoy sea sacarme la plaza de maestra. Es algo para lo que he trabajado muy duro y que he rozado varias veces con la yema de los dedos, pero que al final siempre se ha escapado. A nivel literario, estoy trabajando en un proyecto solidario, en otro poemario y en un libro de aforismos; pero quiero darles tiempo. Quiero disfrutar de 'Morder el tiempo' y de la inspiración que me ofrezca para continuar los anteriores.  P.- ¿Está la sociedad actual carente de poesía?R.- Sí y no. Hay mucho movimiento de “poesía en la red” que debíamos cuestionarnos. Pero el interés de las personas por la poesía parece que ha crecido un poco, y deberíamos quedarnos con eso y aprovecharlo; no dejar de ofrecer diferentes formas y que cada uno se quede aquello que le llene. Y favorecer así que la poesía encuentre su sitio. P.- ¿Qué claves recomendaría a alguien que quiera plasmar sus sentimientos en un poema?R.- Como suelo decir, no me considero experta en nada y desde esa perspectiva me es difícil aconsejar.  Cuando realizo talleres en centros escolares, por ejemplo, suelo partir de la rima, porque favorece la creación de forma más sencilla y directa. Con el tiempo, yo he intentado desvestir de artilugios el lenguaje y dejarlo puro, buscando la fuerza poética. No sé si me sale, pero es cierto que un poema puede servir a modo de salvavidas, y por eso siempre lo recomiendo.  P.- ¿Dónde se puede encontrar más información sobre su obra?R.- En las redes sociales, tanto en instagram como en Facebook, donde aparezco como Esther Goroez.  P.- ¿Dónde puede adquirirse el libro?R.- Ya se encuentra en librerías y puede comprarse también en la web de la editorial, donde además pueden pedirlo dedicado, si así lo prefieren. https://www.edicionesenhuida.es/producto/morder-el-tiempo/

P.- ¿Dónde puede adquirirse el libro?

 No suele haber dos veces exactamente iguales de ninguna experiencia, aunque habitualmente la segunda va encadenada a la primera, como un paso tras otro en un camino por recorrer. La consciencia de ese camino es el que hace que exista y cuando se desarrolla con una sensibilidad literaria merece ser plasmada en el papel para que perdure en el tiempo. Precisamente el tiempo

 No suele haber dos veces exactamente iguales de ninguna experiencia, aunque habitualmente la segunda va encadenada a la primera, como un paso tras otro en un camino por recorrer. La consciencia de ese camino es el que hace que exista y cuando se desarrolla con una sensibilidad literaria merece ser plasmada en el papel para que perdure en el tiempo. Precisamente el tiempo es la razón de ser del nuevo poemario de Esther Gómez Rodríguez, joven moguereña que en 2017 editó 'Blanco Roto' y que este miércoles vuelve a estar de estreno en el mismo escenario, la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez de Moguer. En la niña que cumplió la utopía de compartir su forma de percibir el mundo el tiempo es un tema recurrente en sus pensamientos y reflexiones y ha decidido darle el protagonismo que merece, con el uso que hacemos de él y el efecto que provoca en nosotros.   PREGUNTA.- ¿Cuál es el principal mensaje que lanza su nuevo poemario, ‘Morder el tiempo’?RESPUESTA.- 'Morder el tiempo' es un poemario que encierra entre sus líneas al tiempo y A la manera de que este no pase por nosotros sin más. Busca arañar y morder el tiempo, saborearlo. Y narra también en poemas las veces en que es el tiempo quien muerde y araña.  P.- ¿Qué considera que es el mejor modo de emplear el tiempo para que esa mordedura sea saciante? R.- Yo siempre he dicho que la mejor manera de aprovechar la vida es vivirla, que no hemos venido aquí a ponernos a dieta. Y que hay que morder y saborear todos los momentos que se nos presentan. A veces es el propio tiempo el que nos muerde y es duro; hay que esperar a que la marca desaparezca y no recrearnos en ella. Admito que la poesía es mi vía de escape y que es cierto que no siempre sigo todo lo que escribo. Pero hay que vivir aquello que nos nutre el alma, solo así creceremos en vez de envejecer.  P.- ‘Blanco Roto’ tuvo como semilla dos versos dedicados a su abuelo ¿Cómo ha sido el origen y el proceso de creación de esta obra? R.- Este proceso ha sido más largo. El tiempo siempre ha despertado mi interés, me inspira cada día. Tenía poemas ya escritos sobre el tiempo, es una temática que de una manera u otra aparece a menudo en lo que escribo. Y un día, gracias a Juan Cobos y a Daniel Salguero, decidí formar un poemario en torno a este núcleo temático. Creo que es el germen de todo y gracias a esto, un poemario sobre el tiempo puede albergar mucha vida dentro de sí.  P.- La presentación será este miércoles. ¿Algún detalle que pueda adelantar sobre cómo será? R.- Es cierto, la presentación será este miércoles en la Casa Museo Zenobia y Juan Ramón Jiménez de Moguer, a las 19.00 horas. La entrada es libre e invito a todas las personas a las que pueda apetecerle conocer a “Morder el tiempo”.  Adelanto que como con “Blanco roto”, la primera presentación la realizo de la mano de Daniel Salguero, por lo que la poesía y el buen hacer con él ya están asegurados.  P.- ¿Qué diferencias y puntos en común tiene con su anterior poemario, ‘Blanco roto’? R.- Pues me es difícil compararlos. Es cierto que “Morder el tiempo” es un poemario más directo, de una lectura más sencilla, pero que no deja de albergar las metáforas a las que suelo acudir para explicarme lo que siento. Así como “Blanco roto” tenía una línea más intimista y otra más social; “Morder el tiempo” queda dividido en tres partes, de las que adelanto, una recoge poemas eróticos y de amor, algo que según me comentan, parece que gusta. P.- ¿Cómo han evolucionado su estilo literario y sus inquietudes poéticas?R.- Según me dicen, en 'Morder el tiempo' utilizo un lenguaje más directo, menos artificioso, sin dejar de recurrir a distintas figuras literarias, sobre todo a la metáfora. Últimamente he leído poesía en otros idiomas, sobre todo en francés y me acojo a todo lo que me recomiendan, porque como suelo decir, me considero y me consideraré siempre “novata” y abierta a aquello que quieran enseñarme.  P.- ¿Se encuentra en el momento creativo que imaginaba hace unos años?R.- Hace acaso 4 años soñaba con publicar un libro de poemas. Era mi sueño desde niña, una utopía. Hoy me encuentro a punto de publicar mi segundo poemario y sé que no voy a asimilarlo. Mi hipersensibilidad me hace huir de todo aquello que, negativo o positivo, implica sentimientos desmedidos. Soy feliz y afortunada, y estoy muy agradecida.  P.- ¿En qué encuentra inspiración? ¿La poesía parte de la forma en la que observamos nuestro entorno? R.- Suelo encontrar inspiración en casi todo; mi forma de vivir, sentir y explicarme la vida se basa en la poesía. Quienes me conocen dicen que soy hipersensible, que tengo otra forma de percibir lo que ocurre; y ahora, ya sé que no puedo huir de ella. Por motivos profesionales, intenté dejar la poesía el año pasado y lo pasé fatal, verdaderamente. Como digo, creo que quienes tenemos esta extraña forma de ver la vida, no podemos escapar de ella. P.- ¿Está inmersa en otros proyectos, literarios o no?R.- Sí. Quizás mi mayor proyecto a día de hoy sea sacarme la plaza de maestra. Es algo para lo que he trabajado muy duro y que he rozado varias veces con la yema de los dedos, pero que al final siempre se ha escapado. A nivel literario, estoy trabajando en un proyecto solidario, en otro poemario y en un libro de aforismos; pero quiero darles tiempo. Quiero disfrutar de 'Morder el tiempo' y de la inspiración que me ofrezca para continuar los anteriores.  P.- ¿Está la sociedad actual carente de poesía?R.- Sí y no. Hay mucho movimiento de “poesía en la red” que debíamos cuestionarnos. Pero el interés de las personas por la poesía parece que ha crecido un poco, y deberíamos quedarnos con eso y aprovecharlo; no dejar de ofrecer diferentes formas y que cada uno se quede aquello que le llene. Y favorecer así que la poesía encuentre su sitio. P.- ¿Qué claves recomendaría a alguien que quiera plasmar sus sentimientos en un poema?R.- Como suelo decir, no me considero experta en nada y desde esa perspectiva me es difícil aconsejar.  Cuando realizo talleres en centros escolares, por ejemplo, suelo partir de la rima, porque favorece la creación de forma más sencilla y directa. Con el tiempo, yo he intentado desvestir de artilugios el lenguaje y dejarlo puro, buscando la fuerza poética. No sé si me sale, pero es cierto que un poema puede servir a modo de salvavidas, y por eso siempre lo recomiendo.  P.- ¿Dónde se puede encontrar más información sobre su obra?R.- En las redes sociales, tanto en instagram como en Facebook, donde aparezco como Esther Goroez.  P.- ¿Dónde puede adquirirse el libro?R.- Ya se encuentra en librerías y puede comprarse también en la web de la editorial, donde además pueden pedirlo dedicado, si así lo prefieren. https://www.edicionesenhuida.es/producto/morder-el-tiempo/