Exigen medidas «efectivas» ante los trastornos graves de conducta de un alumno del CEIP Juvenal de Vega
Las familias están recogiendo firmas y aseguran que muchos menores no quieren ir a clase por «miedo»
Desde Educación señalan que se están siguiendo los protocolos y que se interviene desde el inicio del curso, prestándose a «ajustar o complementar las medidas existentes»
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Atemorizados. Así aseguran las familias afectadas que están sus hijos ante los problemas de conducta que presenta un compañero de clase, que llegó este año a principios de curso y desde el inicio presentó un perfil conflictivo. La situación se está dando en el CEIP Juvenal de Vega de Huelva, y viene ocasionando graves problemas de convivencia escolar que, según las familias afectadas, no se estarían abordando de manera adecuada por parte de la Delegación de Educación.
Estas familias, que aseguran que en ningún caso van «contra este menor, que entendemos tiene un problema», denuncian el desamparo que sienten y, tras todo un curso escolar «reclamando soluciones y reuniéndonos con todo el mundo», han iniciado una recogida de firmas en la que solicitan medidas «efectivas» y «más recursos» que permitan atajar una situación que, aseguran, mantiene a muchos alumnos y alumnas «en estado de ansiedad, sin querer venir al colegio«.
«Nuestros hijos e hijas están pasando un infierno. Hay alumnos/as que no quieren ir al cole, no duermen, no comen, están amenazados. Hay un grupo de niñas que ha sufrido acoso verbal sexual«, han señalado los padres y madres de la clase afectada, que aseguran sentirse »desesperados y frustrados, porque creemos que tanto a ese menor como a nuestros hijos e hijas se les está privando de una educación digna, a la cual todos tienen derecho«.

Educación defiende su actuación
Po su parte, desde la Delegación de Educación de Huelva han defendido su actuación en este caso desde el inicio del curso, asegurando que «desde el momento en que se notificaron los primeros incidentes» se activaron «de forma inmediata todos los recursos disponibles», con una intervención a través de sus distintos servicios técnicos y especializados.
Intervención que ha estado dirigida siempre a favorecer una «educación inclusiva y respetuosa con la diversidad, mediante la articulación de recursos y apoyos que permitan atender de forma efectiva las necesidades del alumnado, garantizar su bienestar y favorecer la convivencia en la comunidad educativa».
En este sentido, se puso en marcha la intervención y el seguimiento por parte de la Inspección Educativa -«que ha mantenido reuniones periódicas con el equipo directivo y docente para evaluar la evolución del caso y garantizar la correcta implementación de las medidas»- y se activó el protocolo para alumnado con necesidades específicas de aprendizaje, en coordinación con los servicios sanitarios correspondientes.
Educación señala además que se está llevando a cabo una «atención individualizada diaria por parte de profesionales especialistas en Pedagogía Terapéutica y Apoyo a la Integración« con este alumno, y que se ha incorporado una segunda maestra de Pedagogía Terapéutica «para ampliar el tiempo de intervención especializada».
Asimismo, asegura se ha reforzado la vigilancia a este alumno «durante los recreos y otros tiempos no estructurados, asignando un docente encargado exclusivamente de su supervisión«, y se han modificado horarios, »incluyendo la salida del alumno de su grupo-clase en determinados momentos lectivos para favorecer la atención personalizada en habilidades sociales, control emocional e integración escolar«.
Trastornos graves de conducta
La Delegación ha explicado a Huelva24 que la técnica especialista en Trastornos Graves de la Conducta (TGC) del Equipo Técnico Provincial de Orientación Educativa y Profesional (ETPOEP) «ha visitado el centro en múltiples ocasiones desde noviembre de 2024, diseñando y supervisando un protocolo específico de intervención para el profesorado y el personal de apoyo, ajustado a la evolución del alumno«, valorando que »como resultado del conjunto de actuaciones desarrolladas, no se han vuelto a registrar incidencias relevantes relacionadas con la conducta del alumno, lo que permite concluir que las medidas adoptadas están resultando eficaces y están contribuyendo a la mejora y estabilización del clima de convivencia en el centro«.
Sin embargo, las familias están en desacuerdo con esa valoración, e insisten en que «nuestro centro no está capacitado para atender las necesidades de ese menor«, denunciando que la situación que se viene padeciendo estaría privando a sus hijos de »recibir una educación digna«.
Desde la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo y Formación Profesional de Huelva insisten en que «se continúa realizando un seguimiento exhaustivo de la situación y, en caso de ser necesario, se procederá a ajustar o complementar las medidas existentes con nuevas propuestas que refuercen la respuesta educativa y garanticen el bienestar de toda la comunidad escolar«.