CONFIDENCIAL
El runrún: ¿El Real Madrid en el Trofeo Colombino?
Una vez levantado el bloqueo del Trofeo Colombino, que llevaba sin celebrarse desde el año 2019 debido a la querella criminal interpuesta por la empresa BlackSwan Media contra el Recreativo de Huelva y tres de sus consejeros, este verano va a volver
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Y quiere hacerlo por todo lo alto, aunque la nueva directiva del Decano se está encontrando con bastantes dificultades principalmente debido a que por la premura del poco tiempo que han tenido para organizarlo ya los equipos de Primera División no tienen fechas disponibles debido a que la liga empieza ya el fin de semana del 12 y 13 de agosto.
El Recre buscará celebrar el Trofeo Colombino entre la última semana de agosto y la primera de septiembre, lógicamente un martes, miércoles o jueves para que algún equipo de la máxima categoría pueda venir. Y según ha podido conocer Huelva24.com, uno de los clubes con los que ha contactado el Recre en los últimos días para conocer su posible disponibilidad para medirse al Decano en su Trofeo y luchar por la Carabela de Plata ha sido el Real Madrid. Pero finalmente tras las conversaciones y negociaciones no ha habido posibilidad de llegar a un acuerdo. La entidad albiazul, por lo tanto, había apuntado bien alto para darle glamour al Colombino.
Amnesia inducida en Sexy Zebras
Dice el refrán que 'todo lo que bien empieza bien acaba', aunque también hay quien prefiere los malos principios, quizás porque el desarrollo a mejor está prácticamente garantizado. Otros se inclinan a pensar que lo que cuenta es el final, el regusto último y en fútbol son legión los resultadistas, por encima de cómo se jugó el partido. No sabemos a qué clase pertenece el trío madrileño Sexy Zebras, que este miércoles amenizó con su música la noche de Colombinas, pero lo cierto es que su comienzo no pudo ser más desastroso. Estaba previsto su inicio coincidiendo con la medianoche y se fue hasta casi la una y cuarto. Eso dejó que el recital durara sólo 45 minutos al acabar sobre las dos. Los dichosos problemas técnicos que cuando aparecen son muy fastidiosos tuvieron la culpa de todo.
Los técnicos se afanaban a contrarreloj a tratar de dar con la tecla. Cuando ya por fin comenzó a sonar la música la cosa seguía sin marchar bien. El batería, Jesús Luna, dio sus primeros golpes sobre sus tambores y platillos y se quedó de repente muda. Otro parón. Y cuando ya arrancó la cosa y el cantante y bajista, Gabriel Montes, entonaba el «no puedo parar, soy un semental», era el guitarrista, José Luna, quien decía «para, para, para», porque se le había roto una cuerda. Después continuó la serie de catastróficas desdichas con la rotura de otra cuerda de su instrumento más adelante. Además un chisporroteo de fondo estaba ahí, incomodando la escucha de un gran banda. Los artistas ponían buena cara al mal tiempo y hacían bromas, diciendo que no podían prometer que no siguieran los problemas, pero querían dejar claro que pondrían «toda la pasión» para hacer de su primer concierto en Huelva algo digno de recordar. Después el cantante decía «olvidad ya los problemas técnicos» y resaltó el contraste de que «las canciones que han cambiado tu vida» y la situación hiciera que pareciera que tenían «de nuevo 16 años», cuando eran principiantes.
Poco a poco el buen sabor de boca se impuso. El show pasó de la parte pop a la rock y la banda seguía dando lo mejor y siendo muy divertidos. Organizaron con el público una improvisada piscina olímpica y fueron pidiendo voluntarios para nadarla en los estilos de crol, braza y mariposa. El público se lo pasaba bien y eso es el mejor síntoma de que lograron su objetivo. Al final, al estilo de lo que pasa en las películas de Men in Black, indujeron a la amnesia y quedó muy atrás lo negativo para que brillara lo positivo.
Bocadillo de polvo en Colombinas
Es bien sabido que en el recinto Colombino se puede comer de todo. Desde pescado frito, pasando por las tapas típicas, los montaditos, tortilla, un ponche… Lo que no esperaban los visitantes a las Fiestas Colombinas este miércoles es que les invitaran gratis a un bocadillo de polvo.
Las fuertes rachas de aire durante toda la noche arrastraron el polvo que habita en la gran área de la zona de conciertos y todas calles del recinto, que 'acariciaban' por oleadas a los visitantes a las fiestas, condimentando sus hamburguesas y helados, despeinando y 'maquillando' pestañas. Incluso dentro de las casetas de más tamaño y abiertas, como la municipal, el polvoriento viento campaba a sus anchas. Pero el espíritu colombinero siempre está por encima de todo, con las ganas de diversión como principal elemento, y no hay nada que agüe –o en este caso polvoree– la fiesta. Con el mejor ánimo todo se vence.
