Peregrinación a El Rocío
La Hermandad de Emigrantes se reencuentra con la Blanca Paloma
20.02 h. Como todos los años, el mes de noviembre supone un momento especial para una de las hermandades de la capital. Y es que cada segundo domingo de noviembre, festividad del Amparo de las vírgenes y del Patrocinio, la Hermandad de Emigrantes se postra de nuevo ante las plantas de la Reina de las Marismas.
Un domingo en que la aldea recibía por la mañana a los peregrinos de Emigrantes que partieron desde la ciudad ayer por la mañana. En torno a media mañana cansados pero contentos llegaban desde la pernocta para formar la comitiva desde su Casa de Hermandad en El Rocío.Allí también llegaban las representaciones de las autoridades de la ciudad, que habitualmente acompañan a la filial en cada peregrinación. Asimismo, acompañados por la flauta y el tamboril la comitiva partió conformada por numerosos centros florales y ramos que se le ofrendaron a la Patrona de Almonte durante la Eucaristía.Ésta, dio comienzo a las 13.00 horas en el Santuario de El Rocío, en donde una vez más, no se cabía de la cantidad de personas que quisieron estar presentes en la Misa.A su término, los hermanos de Emigrantes gozaron de una comida de hermandad en donde prevaleció el buen ambiente rociero y la convivencia.
