jugando a las cocinitas… en américa
'Stir fry' a la italiana
Podéis apreciar que sigo en Estados Unidos con solo leer el nombre de la receta. Y es que aquí impera la mezcla absoluta de culturas y sabores. Y en la cocina no iba a ser menos. Precisamente, en nuestra receta de hoy utilizaremos un ingrediente muy italiano: el orzo, que no es más que pasta en forma de arroz. Como toda la pasta, es muy versátil y está buenísima.

Hace mucho (mucho más que en nuestro país) que la comida china llegó a estos lares y los americanos son unos grandes admiradores de la gastronomía oriental. No penséis en la comida del típico restaurante chino de nuestra ciudad, pues nada tiene que ver lo que hay aquí.
China es una país muy grande y con rasgos muy distintos en sus platos, según la región, igual que todos los países. Pero yo no se porque en España ir a comer a un restaurante chino es no salir del rollito de primavera (que sabe igual en todos los chinos) , el pollo con almendras (¡que aquí no encuentras!), y el arroz tres delicias (¡con jamón de York!, empieza a buscarlo aquí y te darás por vencido pronto).

Aquí hay muy buenos restaurantes chinos y todo el mundo esta muy interesado en adaptar recetas o toques de la gastronomía oriental. Por eso es que esta muy de moda la técnica del ‘stir fry’, que además aúna dos principios fundamentales para el americano moderno de hoy día: la rapidez en su consecución y la baja ingesta de calorías.
La receta de hoy incorpora además un ingrediente muy italiano: el orzo. Antes de pasar a la misma, os hablo brevemente de este ingrediente y de la técnica culinaria en cuestión. Yo estoy enganchada y es rara la semana que no comamos en casa un buen ‘stir fry’ con verduras de temporada.
El orzo: la pasta en forma de arroz
El orzo (o risone, o kritharaki) es, como el típico espagueti, un tipo de pasta de sémola de trigo duro. Tiene forma de grano de arroz, aunque algo mas picudo y plano. Su nombre significa cebada, que no en vano es también igual que un grano de orzo.

Como toda la pasta, es muy versátil y esta buenísimo. Se suele usar en sopas y como sustituto del arroz en platos en los que no es necesario su almidón, como el pilaf.
Dicen que funciona estupendamente en rellenos. Cuando lo pruebe, os lo cuento.
Yo lo use en este ‘stir fry’ porque no tenia pasta de arroz, que es lo que suelo poner en estos casos, y porque quería darle un toque distinto. Fue todo un éxito. Ya sabéis que la pasta funciona bien con casi todo.
La técnica china del ‘stir fry’
No penséis que porque hago un apartado especial hablando de la técnica os voy a complicar la vida en la cocina. Nada mas lejos de la realidad. Es facilísimo de hacer, pero me apetece que sepáis un poco más de su elaboración, a ver si os animo y juntos experimentamos ‘stir fry’ a la andaluza o incluso a la onubense, por ejemplo con unas buenas gambitas blancas de nuestra costa.
Esta manera de cocinar se origino por pura necesidad y ahorro económico en las cocinas cantonesas. Para cocinar contaban con hornillas de ladrillo con un agujero central por el que salía la llama de fuego. El wok (sartén redonda y con fondo abombado) cabía perfectamente en ese hueco y con una pequeña llamita la sartén se ponía al rojo vivo, haciendo posible cocinar muy rápidamente, ahorrando así el preciado combustible.
Lo que tiene de especial esta manera de cocinar es que los alimentos se sellan rápidamente, conservando sus jugos naturales. En solo unos minutos (de dos a cinco, aproximadamente) la verduras nos quedan brillantes y crujientes y las carnes y pescados bien dorados por fuera y muy jugosos por dentro.

Los wok están hoy en día muy de moda y se pueden encontrar en casi cualquier superficie y a precios muy distintos. No os recomiendo los antiadherentes, pues la altas temperaturas acabaran por levantar la capa de teflón y creedme, comerse el teflón no es muy saludable. Si tenéis la oportunidad de ir a un súper oriental (en Sevilla hay uno estupendo, Hiper Oriente) podéis encontrar wok bastante decentes y a buenos precios.
La elección del aceite es también importante. Nosotros estamos muy acostumbrados a usar el aceite de oliva para cocinar, y desde luego es la elección más sana de todas, pero no es valida para el ‘stir fry’. Necesitamos un aceite vegetal, tipo girasol, que nos funcione bien a altas temperaturas. Yo usé aceite de sésamo tostado, prensado en frío, riquísimo, pero fue un desperdicio, pues pierde su aroma característico al freírlo. Usad un buen aceite de girasol y aliñad con el de sésamo vuestro plato justo antes de comerlo.
El aceite de sésamo tiene propiedades nutritivas de gran valor y es usado en la medicina ayurveda. Es rico en ácidos omega 6, zinc y una gran cantidad de minerales, así como un gran aporte de vitamina E. Va genial para la memoria por su alto contenido en fosfolípidos y lecitina. ¡Hay vida mas allá del aceite de oliva!
INGREDIENTES:
Ponemos agua a hervir para preparar el orzo, siguiendo las instrucciones de cocción del fabricante.
Preparamos el pollo. Cortamos las pechugas a tiras. En el ‘stir fry’ es importante cortar los ingredientes de manera que no queden grandes trozos, pues todo se ha de cocinar bien rápido. A veces pongo filetes de atún, en vez de pollo, y lo corto a taquitos. Pero como comprenderéis no estoy en Huelva para conseguir un buen atún a un precio decente.
Ponemos el pollo a marinar unos 15 o 20 minutos con sal, aceite de girasol o de sésamo, polvo de ajo, coriandro, jengibre y salsa de soja o tamari. Aquí tengo que hacer un inciso. Procurad comprar una buena salsa de soja, que no sea artificial. Está mucho más rica y es mucho más saludable.
Mientras que el pollo está marinando podemos preparar las verduras, cortándolas en bastoncitos. Si usáis mini zanahorias solo tenéis que cortarlas a lo largo, por la mitad. Intentad que todas las verduras os queden del mismo tamaño.
Poned el wok en el fuego y cuando este bastante caliente añadís el aceite. Cuando el aceite esté muy caliente agregáis el pollo y lo cocináis sin parar de mover y saltear hasta que este sellado. Apartáis.
Agregad mas aceite al wok si lo veis necesario. Poned ahora todas las verduras menos el calabacín. No dejad de mover. Al minuto agregáis el calabacín y sin dejar de mover y voltear el wok a los dos o tres minutos agregáis el orzo ya cocido y escurrido. Volteáis todo bien hasta que se incorporen todos los ingredientes. Añadís salsa de soja al gusto y sal. Cuidado porque la salsa de soja ya es bastante salada, así que comprobad el punto de sazón. Dos minutos más, aproximadamente y ya tenéis vuestro ‘stir fry’ listo.
Podéis servir el pollo en cada plato y encima la preparación de verduras o bien agregar el pollo al ‘stir fry’ cuando esté listo. Yo separo el pollo porque en casa hay vegetarianos. Aliñamos al gusto con aceite de sésamo.
Espero que disfrutéis de la fusión y dejéis corred vuestra imaginación: usad filetes de ternera, pechugas de pavo, filetes de atún, champiñones, gambas‚…