Cocinar bueno, sano y barato
Fideos con mejillones
Poca grasa y rico en proteína, el mejillón es además sabroso y un auténtico comodín en la cocina. El clásico plato marinero de sofrito, marisco y un 'puñao' de fideos, es una de sus variantes más sabrosas
Perol cordobés
Gazpacho

Un bivalvo de usos multiples. Es un molusco económico y los españoles son los mejores. Cuando compras una red de mejillones, que suelen ser de un kilo, te puede salir por cuatro o cinco euros. Con ellos puedes hacer esta sabrosa receta que aquí te proponemos, pero también puedes tomar los que tengan mejor presencia para colocarlos ya cocidos sobre una de sus conchas y echar por encima un picadillo de pimiento, tomate, cebolla y pepino aliñados con sal, aceite y vinagre. Así de sencillo.
Ya habrá tiempo de daros más recetas de mejillones, como esta riquísima manera de prepararlos, fácil y muy económica, que está inspirada en una receta italiana. Habrá que recordar, de momento, que el mejillón, o almejillón le hemos oído decir en más de una ocasión a los marineros de por aquí, son ricos en vitaminas: A, C y B12, aminoácidos y minerales: yodo, hierro, potasio, fósforo y magnesio. Ricos en proteínas, con apenas grasas de las poco saludables y por el contrario con grasas como el tan mentado omega-3, por lo que su consumo es altamente recomendable.

Elaboración
Ingredientes: Mejillones, ajo, guindilla, tomate, vino blanco, fideos gordos, perejil, pimienta y sal.
1. Abrimos los mejillones al vapor, en una cazuela con una lámina de agua y tapada. Cuando se abran apartamos, colamos el agua que hayan soltado y reservamos los mejillones tras quitarles las conchas.
2. En una cazuela ponemos una lámina mínima de aceite y sofreímos un ajo laminado fino y una guindilla de cayena, o dos, o del tipo que queráis, eso ya a voluntad de cada cual.
3. Pelamos y quitamos las simientes de un tomate maduro y lo troceamos fino. En el momento en que el ajo que estamos sofriendo se vaya a poner dorado, antes, añadimos el tomate troceado. Tapamos la cazuela y esperamos a que el tomate se refría también, momento en el que añadimos vino blanco, un chorrito valiente.
4. Cuando se evapore el vino será el momento de añadir el caldo de abrir los mejillones. Dos meneos y añadimos los mejillones, perejil, pimienta y sal.
5. Al primer hervor añadimos los fideos, damos vueltas para que se pringuen bien y cubrimos todo con agua para dejar cocer hasta que los fideos estén en su punto. Se acabó.