Una playa para todos: vuelve el programa 'Un baño sin barreras'
El año pasado las previsiones iniciales eran atender a algo más de 100 personas y finalmente se superaron las 300
Los ayuntamientos de Huelva y Cartaya, junto al equipo de 30 personas voluntarias, hacen posible la 26 edición de este programa destinado a mejorar la vida de quienes tienen más dificultades
Arranca la nueva edición del programa 'Un baño sin barreras', que cumple 25 años
Un verano más de baño sin barreras en Huelva

«Las historias de emoción, superación, acompañamiento y solidaridad que viven el voluntariado y las personas que a lo largo de los dos meses que pueden disfrutar de la playa, son las que dan sentido a 'Un baño sin barreras', un programa que supera obstáculos para hacer realidad la integración y la normalización de la vida de personas con diversidad funcional que, sin esta ayuda, nunca podrían llegar a bañarse en el mar». La presidenta de Cruz Roja Huelva, Patricia Mauri, resume así el funcionamiento de, programa, que cumple 26 años gracias al apoyo del voluntariado y de colaboradores vitales como el Ayuntamiento de Huelva y el Ayuntamiento de Cartaya.
La formación, el compromiso y la solidaridad de unos 30 voluntarios y voluntarias de Cruz Roja, la colaboración del Ayuntamiento de Cartaya y el patrocinio del Ayuntamiento de Huelva son la energía que mueve la maquinaria del programa 'Un baño sin barreras', que de nuevo este año pretende cumplir el gran reto de «hacer posible lo que parece imposible, venciendo todos los obstáculos para que, en los meses de julio y agosto, muchas personas con movilidad reducida puedan disfrutar de la playa de forma plena», aseguró Mauri.



Al programa se han adscrito Aspacehu, Aspapronias, Faisem, el Centro de Personas Mayores de Santa Marta en La Orden, la Residencia de Personas Mayores del Conquero y la Residencia de Personas Mayores de Cartaya, además de numerosas personas particulares que contactan directamente con Cruz Roja durante estos meses, con una afluencia tal que el pasado año las previsiones iniciales eran de algo más de 100 personas y finalmente se superaron las 300.
El voluntariado, imprescindible
Los voluntarios y voluntarias prestan un servicio integral, que incluye la recogida de las personas usuarias y sus acompañantes en su domicilio, previa llamada a la ONG, y en la sede de las asociaciones adscritas, así como el transporte hasta la playa, donde les ayudan a bañarse, gracias a dos vehículos anfibios denominados anfibuggy, al tiempo que hacen posible que pasen una jornada de convivencia y diversión en las carpas habilitadas para el disfrute de cada jornada.
En la presentación oficial llevada a cabo este martes, la concejala de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Huelva, Adela de Mora, ha querido destacar «la enorme satisfacción que supone ver cómo este programa, que impulsamos hace ya 26 años desde el Ayuntamiento de Huelva junto a Cruz Roja, sigue haciendo posible que más de un centenar de personas con diversidad funcional disfruten cada verano de un día de playa». Asimismo, ha agradecido especialmente «la labor incansable de los voluntarios y voluntarias, cuya entrega y profesionalidad hacen que esta experiencia sea mucho más que un baño en el mar: es una verdadera oportunidad de integración, ocio y felicidad para quienes más lo necesitan».
Por su parte, el alcalde de Cartaya, Manuel Barroso, mostró la satisfacción del Ayuntamiento de Cartaya por acoger y apoyar con espacios, servicios y material al equipo de Cruz Roja, «profesionales y voluntariado que hacen un gran trabajo apoyado por el compromiso del Ayuntamiento de Cartaya y la labor que hace la Concejalía de Servicios Sociales por una playa más humana y accesible».
Finalmente, la presidenta de Cruz Roja Huelva, tras agradecer esta «mágica» unión de fuerzas que cambia vidas, señaló que «el equipo de voluntariado procede de distintas áreas asistenciales de nuestra Organización, desde técnicos/as sanitarios a socorristas acuáticos, pasando por educadores/as sociales, hasta conductores/as de vehículos adaptados, de vehículos de apoyo y voluntariado de acompañamiento, todos formados con anterioridad para garantizar la seguridad de todas las personas usuarias en los baños en el mar y para desarrollar las acciones de animación con paseos por la orilla del mar, charlas, talleres, juegos y otras actividades lúdicas que ayudan a normalizar la vida de las personas con movilidad reducida eliminando barreras y llenado de alegría su verano».