Carlos Martínez ya le ha dado más al Recre en 106 minutos esta temporada que en los 748 de la pasada

 Carlos Martínez llegó la pasada temporada al Recre despertando muchas expectativas e ilusión entre la afición debido a su buen currículum en el grupo IV de Segunda B. Formado en las categorías inferiores del Córdoba, en dicha categoría vistió las camisetas del Ciudad de Lucena, La Hoya Lorca, Cartagena, Lorca y Murcia, siendo casi siempre titular indiscutible, mostrando una gran visión de juego y teniendo además también una buena capacidad goleadora. La llegada de José María Salmerón al banquillo albiazul fue clave para su fichaje, ya que tuvo al cordobés a sus órdenes en la segunda vuelta liguera de la anterior campaña después de que no estuviera teniendo demasiados minutos con el Lorca en la categoría de plata. Carlos Martínez es sinónimo de éxito, y es que ya ha disputado cinco 'play-offs' de ascenso a Segunda División en su carrera deportiva, con el Ciudad de Lucena, La Hoya Lorca, Lorca, Murcia y Recre, es decir, con todos los equipos en los que ha estado excepto con el Cartagena, logrando subir con la camiseta del Lorca en 2018.  La pasada campaña no tuvo suerte en el Decano, con el que disputó 748 minutos pero siempre mostrándose intermitente y sin continuidad, por lo que no pudo mostrar todo el fútbol que atesora. En gran parte le lastraron las lesiones que padeció. Jugó 20 encuentros, pero su rol fue sobre todo el de revulsivo en las segundas mitades. Así, fue titular en ocho partidos y únicamente jugó completo el de la primera jornada liguera en el Nuevo Colombino ante el Don Benito, y después salió desde el banquillo hasta en 12 ocasiones. En la segunda vuelta únicamente fue titular frente al Jumilla y el Atlético Malagueño, mientras que en los cuatro duelos de los 'play-offs' de ascenso no jugó ni un minuto. Era de los pocos futbolistas de la plantilla albiazul que tenía firmada una temporada más con el Recre, aunque el pasado verano se especuló bastante con su posible rescisión de contrato para marcharse a otro club en el que tuviese más oportunidades. Pero Carlos Martínez se veía con condiciones para triunfar en Huelva. Tenía una espinita clavada con la afición albiazul y además muy pronto su nuevo entrenador, Alberto Monteagudo, que le conocía sobradamente de la categoría, le convenció de que confiaba en él para que se convirtiera en un hombre importante dentro de su esquema de juego. Primera campaña sin ver puerta en Segunda BY paulatinamente, y sin hacer mucho ruido, Carlos Martínez ha ido ganando protagonismo en el actual Recre después de no tenerlo nuevamente fácil por unas molestias físicas surgidas en la pretemporada. Ya le ha aportado más al Decano en los 106 minutos que ha disputado esta temporada que en los 748 de la pasada, que por cierto fueron sus peores números históricos en Segunda B, además del primer ejercicio en el que se quedó sin ver puerta. El exquisito centrocampista cordobés disputó 46 minutos contra el Talavera y 10 ante el Villarrobledo antes de jugar 4 en Mérida en los que fue clave con una gran asistencia desde la banda a Chuli para que el delantero onubense hiciera el gol del triunfo albiazul. Y el pasado domingo su entrada fue vital para que el Decano se impusiera al Don Benito, y es que marcó un buen gol a pase de Óscar Ramírez y después estuvo bastante entonado cada vez que entró en contacto con el balón. Va a más y se le nota más feliz y cómodo en el campo.

La llegada de José María Salmerón al banquillo albiazul fue clave para su fichaje, ya que tuvo al cordobés a sus órdenes en la segunda vuelta liguera de la anterior campaña después de que no estuviera teniendo demasiados minutos con el Lorca en la categoría de plata. Carlos Martínez es sinónimo de éxito, y es que ya ha disputado cinco 'play-offs' de ascenso a Segunda División en su carrera deportiva, con el Ciudad de Lucena, La Hoya Lorca, Lorca, Murcia y Recre, es decir, con todos los equipos en los que ha estado excepto con el Cartagena, logrando subir con la camiseta del Lorca en 2018.

 Carlos Martínez llegó la pasada temporada al Recre despertando muchas expectativas e ilusión entre la afición debido a su buen currículum en el grupo IV de Segunda B. Formado en las categorías inferiores del Córdoba, en dicha categoría vistió las camisetas del Ciudad de Lucena, La Hoya Lorca, Cartagena, Lorca y Murcia, siendo casi siempre titular indiscutible, mostrando una gran visión de juego y teniendo además también una buena capacidad goleadora. La llegada de José María Salmerón al banquillo albiazul fue clave para su fichaje, ya que tuvo al cordobés a sus órdenes en la segunda vuelta liguera de la anterior campaña después de que no estuviera teniendo demasiados minutos con el Lorca en la categoría de plata. Carlos Martínez es sinónimo de éxito, y es que ya ha disputado cinco 'play-offs' de ascenso a Segunda División en su carrera deportiva, con el Ciudad de Lucena, La Hoya Lorca, Lorca, Murcia y Recre, es decir, con todos los equipos en los que ha estado excepto con el Cartagena, logrando subir con la camiseta del Lorca en 2018.  La pasada campaña no tuvo suerte en el Decano, con el que disputó 748 minutos pero siempre mostrándose intermitente y sin continuidad, por lo que no pudo mostrar todo el fútbol que atesora. En gran parte le lastraron las lesiones que padeció. Jugó 20 encuentros, pero su rol fue sobre todo el de revulsivo en las segundas mitades. Así, fue titular en ocho partidos y únicamente jugó completo el de la primera jornada liguera en el Nuevo Colombino ante el Don Benito, y después salió desde el banquillo hasta en 12 ocasiones. En la segunda vuelta únicamente fue titular frente al Jumilla y el Atlético Malagueño, mientras que en los cuatro duelos de los 'play-offs' de ascenso no jugó ni un minuto. Era de los pocos futbolistas de la plantilla albiazul que tenía firmada una temporada más con el Recre, aunque el pasado verano se especuló bastante con su posible rescisión de contrato para marcharse a otro club en el que tuviese más oportunidades. Pero Carlos Martínez se veía con condiciones para triunfar en Huelva. Tenía una espinita clavada con la afición albiazul y además muy pronto su nuevo entrenador, Alberto Monteagudo, que le conocía sobradamente de la categoría, le convenció de que confiaba en él para que se convirtiera en un hombre importante dentro de su esquema de juego. Primera campaña sin ver puerta en Segunda BY paulatinamente, y sin hacer mucho ruido, Carlos Martínez ha ido ganando protagonismo en el actual Recre después de no tenerlo nuevamente fácil por unas molestias físicas surgidas en la pretemporada. Ya le ha aportado más al Decano en los 106 minutos que ha disputado esta temporada que en los 748 de la pasada, que por cierto fueron sus peores números históricos en Segunda B, además del primer ejercicio en el que se quedó sin ver puerta. El exquisito centrocampista cordobés disputó 46 minutos contra el Talavera y 10 ante el Villarrobledo antes de jugar 4 en Mérida en los que fue clave con una gran asistencia desde la banda a Chuli para que el delantero onubense hiciera el gol del triunfo albiazul. Y el pasado domingo su entrada fue vital para que el Decano se impusiera al Don Benito, y es que marcó un buen gol a pase de Óscar Ramírez y después estuvo bastante entonado cada vez que entró en contacto con el balón. Va a más y se le nota más feliz y cómodo en el campo.

Era de los pocos futbolistas de la plantilla albiazul que tenía firmada una temporada más con el Recre, aunque el pasado verano se especuló bastante con su posible rescisión de contrato para marcharse a otro club en el que tuviese más oportunidades. Pero Carlos Martínez se veía con condiciones para triunfar en Huelva. Tenía una espinita clavada con la afición albiazul y además muy pronto su nuevo entrenador, Alberto Monteagudo, que le conocía sobradamente de la categoría, le convenció de que confiaba en él para que se convirtiera en un hombre importante dentro de su esquema de juego.

Y paulatinamente, y sin hacer mucho ruido, Carlos Martínez ha ido ganando protagonismo en el actual Recre después de no tenerlo nuevamente fácil por unas molestias físicas surgidas en la pretemporada. Ya le ha aportado más al Decano en los 106 minutos que ha disputado esta temporada que en los 748 de la pasada, que por cierto fueron sus peores números históricos en Segunda B, además del primer ejercicio en el que se quedó sin ver puerta.

El exquisito centrocampista cordobés disputó 46 minutos contra el Talavera y 10 ante el Villarrobledo antes de jugar 4 en Mérida en los que fue clave con una gran asistencia desde la banda a Chuli para que el delantero onubense hiciera el gol del triunfo albiazul. Y el pasado domingo su entrada fue vital para que el Decano se impusiera al Don Benito, y es que marcó un buen gol a pase de Óscar Ramírez y después estuvo bastante entonado cada vez que entró en contacto con el balón. Va a más y se le nota más feliz y cómodo en el campo.