El adiós de una institución del Recreativo: El doctor Rodolfo Ortiz se emociona en un video de despedida tras 35 años de trabajo
El médico albiazul asegura que para él ha sido «un honor» ligar toda su vida profesional al Decano y que ha «disfrutado muchísimo»
Se despide agradecido al club, al recreativismo y a su familia
El técnico Abel Gómez dice de él que es «una persona espectacular»
Por el Recreativo de Huelva han pasado muchos grandes futbolistas en su historia y en los últimos 35 años todos se han puesto en las manos del doctor Rodolfo Ortiz, un médico querido y apreciado en lo profesional y personal, que ha realizado un servicio impagable.
Ha desarrollado una larga y gran labor y como decía el club es «parte del escudo» de la entidad. Ahora decide poner punto y final y jubilarse.
«Después de 35 años llega la hora de despedirme, de dejar sitio a otras personas. He tenido el honor de durante todo este tiempo, que ha sido toda mi vida profesional, de acompañarla con el Recreativo de Huelva», expone en un video. Asegura que ha «disfrutado muchísimo con el fútbol, los viajes y los compañeros».
A la hora de repartir agradecimientos, no ha querido nombrar a nadie para no ser injusto y olvidarse de alguien. Ha destacado a su familia y en especial a su mujer, que ha sido «la que más ha sufrido las ausencias», así como sus hijos que no obstante, también «ha disfrutado del Recreativo».
Sobre el club ha dicho que «me he sentido uno de vosotros» y ha recordado el apoyo recibido cuando recientemente se lesionó. Ha dado gracias a todos y se ha despedido con un «hasta pronto».
En otro video se puede ver a otras personas que forman parte del club hablando muy bien de Rodolfo Ortiz y deseándole mejor en su jubilación.
Preguntado por este asunto en rueda de prensa, el técnico albiazul, Abel Gómez, manifestó en sala de prensa que hay que «agradecerle y darle muchas gracias por el servicio que ha hecho al club durante tantísimos años». En el trato personal indicó que es «una persona espectacular», con la que se ha llevado «de maravilla» y con la que ha «congeniado muy bien». Le ha deseado «lo mejor y que descanse» y le ha dado «felicidades por el gran trabajo que ha hecho durante este tiempo».
