SUCESOS
La Policía Local de Ayamonte evita un atropello múltiple por parte de conductor bebido en la plaza de la Laguna
El vehículo circulaba en sentido contrario por el centro de la localidad y fue interceptado en la calle Isla Cristina tras alertar a peatones y conductores
El cuerpo policial reclama bolardos y macetones en las zonas peatonales para evitar situaciones peligrosas

La plaza de la Laguna es el principal área peatonal de Ayamonte, con una gran afluencia de personas. La irrupción de un conductor bajo los efectos del alcohol allí podría haber provocado una tragedia, pero la Policía Local interceptó a tiempo el vehículo.
La Policía Local de Ayamonte ha hecho público este miércoles que el pasado fin de semana mientras una de las patrullas efectuaba ronda por la zona centro con motivo de los diversos actos programados por el área de Cultura del Ayuntamiento, fueron requeridos por un conductor «bastante nervioso». Informaba de que acababa de observar a un vehículo que circulaba en sentido contrario por una vía de único sentido, teniendo peatones y conductores que apartarse para no ser embestidos.
Bajo los efectos del alcohol
De inmediato los agentes localizaron y detuvieron dicho vehículo que efectivamente circulaba en sentido contrario y cuyo conductor presentaba «síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos del alcohol» cuando esté se dirigía hacia la calle Isla Cristina y por ende hacia el interior de Plaza de la Laguna, una zona peatonal con gran afluencia de personas a esa hora.


Los agentes procedieron a la intervención del vehículo y efectuó posteriormente las diligencias policiales y denuncias administrativas oportunas sobre la persona que lo conducía.
«La rápida actuación al encontrarse la patrulla en las inmediaciones del lugar evitaron que dicho vehículo provocara una situación cuando menos peligrosa para la integridad de las personas», aseguró la Policía Local, que agradeció especialmente al conductor que les alertó de la situación que estaba ocurriendo.
Piden bolardos y macetones
El cuerpo policial aprovechó este caso para hacer «hincapié nuevamente en la necesidad de que las zonas céntricas más concurridas y que están catalogadas como peatonales sean reforzadas con medios físicos», como bolardos y macetones, que impudan el acceso de los vehículos.