CARTAS AL DIRECTOR
El taxista temerario
El pasado día 30 de diciembre, a eso de las 17.50 horas, veníamos mi esposa, mi padre y yo en mi coche por la avenida de Santa Marta y, al llegar al cambio de sentido que se produce a la izquierda, con dirección hacia la avenida de la Cinta, hay un stop para realizar el giro. Al llegar a ese stop, me detengo con mi coche y ¡cuál es nuestra sorpresa! El vehículo que circulaba justo detrás mía, sin respetar que estábamos detenidos, acelera, me adelanta por mi izquierda, y se cruza temerariamente hacia la avenida de la Cinta.
Era un profesional del taxi. Nos quedamosperplejos; tan sólo tuve tiempo de tomarle la matrícula y de pitarle parallamarle la atención, a lo cual hizo caso omiso. Supongo que tenía mucha prisapor recoger a un cliente. ¡Pobre de él!
Era tal la indignación que sentí que nada más llegar a midomicilio busqué en google el número de teléfono de la Asociación de Autónomosdel Taxi de Huelva, telefoneé, y cuando me atendió una amable señorita y leexpliqué lo ocurrido con todo lujo de detalles, se limitó a contestarme queellos no podían hacer nada y que me dirigiera al Ayuntamiento para presentaruna denuncia. Me quedé de nuevo perplejo e impotente ante semejante desidia. Yes por ello que quise ponerme en contacto con este medio para hacer pública midenuncia como ciudadano.
Ese stop al que ya me he referido es un peligrosísimo puntonegro de esta ciudad en el que pocos conductores, digo pocos, prácticamente nadie,hace el stop. Y un día lamentaremos muertos. Ya he denunciado en otros medioseste hecho, pero hay, jamás se ve control policial.
Lo peor es que ni siquiera un profesional del taxi sea capazde respetar una norma de tráfico tan seria como es un stop. Que Dios nos amparecon gente así.
Un ciudadanocomprometido
