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Mustafá, el héroe silencioso
12.00 h. El goleador del ascenso del San Roque es un argelino de 26 años que lleva ya varias temporadas rindiendo a un buen nivel principalmente en clubes sevillanos de Segunda B y Tercera. En Alzira realizó una soberbia actuación que debería valerle para seguir siendo una de las piezas claves del próximo proyecto.
Antes del milagroso gol que le dio el ascenso al San Roque de Lepe en el último minuto de la prórroga el sábado en Alzira, ya el mejor jugador del conjunto aurinegro había sido Mustafá, un incordio constante para la zaga levantina. Tenía muchas ganas de marcar y de ser el héroe silencioso de los leperos. Y lo consiguió. Un argelino del Sahara Occidental de 26 años que se puede desenvolver muy bien en las dos bandas y que se ha ganado el cariño de la afición sanroquista por su humildad y carácter luchador. Además, siempre ha tenido mucha regularidad y gol en los equipos en los que ha militado desde que llegó al fútbol andaluz y español.
Debutó con el Coria en Tercera División en la temporada 2008/09 y las dos siguientes militó en el Alcalá sevillano, una también en Tercera y la otra en Segunda B. Después, en la campaña 2011/12, se enroló en el Mairena, consiguiendo diez goles en Tercera. Y de ahí pasó ya al San Roque, que le reclutó para jugar en Segunda B después de ver que llevaba ya varias temporadas siendo un futbolista bastante destacado. Pese al descenso, consiguió seis goles en 33 partidos, mientras que en el ejercicio recién concluido ha conseguido 10 en 35 choques. Pasó por un mal momento cuando en el mes de febrero el Comité de Competición le castigó con cuatro partidos por propinarle un cabezazo a un futbolista del Conil. Pero ese incidente ya ha quedado en anecdótico. Ahora es el héroe de toda Lepe. Lo que hizo en Alzira bien lo merece.
