Según han informado a huelva24.com fuentes de la Polocía Local, a la llegada de los agentes, tras recibirse llamadas de ciudadanos por lo ocurrido, encontraron el vehículo rodeado por ciudadanos que trataban de paliar el efecto del sol dando sombra sobre el coche, estando el menor en su asiento habilitado en el interior con evidentes sintomas de sofoco por alta temperatura, como sudoración, coloración y lloro, dado que llevaba unos 15 minutos atrapado en el vehiculo.
Los agentes solicitaron la presencia sanitaria mientras adoptaron medidas de seguridad urgentes, procediendo a fracturar uno de los cristales del turismo y sacar al menor, que fue trasladado para su estudio al Hospital Juan Ramón Jiménez de la capital por el servicio sanitario una vez fue hidratado y reconocido de urgencia, sin que en ningún momento se temiese por su salud.
Así, según ha relatado a huelva24.com la propia madre del bebé, el niño tan sólo estaba un poco sofocado, porque al final se había puesto un poco nervioso, pero la mayor parte del tiempo había estado riéndose, y los sanitarios comprobaron sobre la marcha que estaba bien. La madre asegura que, aunque su primer impulso fue romper la luna, no lo hizo para que el crío no se asustase, y evitar la posibilidad de que pudiese cortarse con algún cristal; pero sobre todo porque se veía que estaba bien y no hacía falta.
Según la Policía, los hechos serán puestos en conocimiento de la autoridad judicial por si se estimase necesario determinar algunas responsabilidades de la madre por lo sucedido, si bien todo pareció tratarse del despropósito más inoportuno.
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