por parte de la junta de andalucía
Luz verde definitiva al plan para los fosfoyesos de Fertiberia, que se dispone a pedir ya la licencia de obras
La materialización del proyecto podría comenzar en las próximas semanas, según la empresa
La Junta da el sí a Fertiberia para su proyecto de tapado de los fosfoyesos
Un millar de onubenses vuelve a echarse a la calle para exigir una marisma sin fosfoyesos
Fertiberia ha obtenido la Autorización Ambiental Integrada (AAI) definitiva por parte de la Junta de Andalucía para comenzar la ejecución de Restore 20/30, su proyecto para la recuperación de la zona de marisma afectada por el vertido de fosfoyesos, a escasos metros del casco urbano de Huelva.
La compañía ya recibió el pasado mes de noviembre la propuesta de resolución favorable para la modificación de la AAI, ahora confirmada por la resolución definitiva, finalizando así el proceso de permisos y abriendo una nueva etapa en Restore 20/30, cuya materialización podrá comenzar en las próximas semanas, según ha anunciado en un comunicado la empresa este lunes.
Fertiberia solicitará de manera inmediata la licencia de obras al Ayuntamiento de Huelva para iniciar en el plazo más breve posible la ejecución del proyecto.
La empresa defiende que el mismo supondrá la inversión de 60 millones de euros y creará más de cien empleos en su fase de ejecución, en la que primará la contratación de profesionales y proveedores locales «para generar el mayor impacto económico positivo en el entorno».
«En estos meses ya se han avanzado todos los trabajos preliminares posibles, como el proyecto detallado de ejecución de esta iniciativa, para iniciar las obras de manera inmediata tras recibir la licencia municipal», ha afirmado David Herrero, director Industrial de la compañía.
Compañía cuyo proyecto para la zona no convence, sin embargo, a un amplio sector de la sociedad onubense -entre ellos, organizaciones ecologistas y ciudadanas como Mesa de la Ría-, que insisten en que el tratamiento de los residuos y su tapado, con el riesgo de colapso y filtraciones añadido, no puede ser considerado una restauración ambiental de la zona afectada, que es a lo que la Audiencia Nacional condenó a Fertiberia.
Tras décadas de vertido a la marisma onubense -los fosfoyesos son un desecho del proceso de fabricación de fertilizantes que la empresa desarrollaba en sus instalaciones del Polo Químico onubense- una sentencia declaró firme la caducidad de la concesión para ejecutarlos ya en 2007, aunque la empresa los mantuvo hasta el 31 de diciembre de 2010.
