Monteagudo ya está en Huelva y apretará en las negociaciones para que le aseguren un proyecto competitivo

 Alberto Monteagudo está en la capital onubense desde anoche, como ha avanzado en su edición de hoy el diario Huelva Información, y durante el fin de semana la intención del Recre es la de cerrar los flecos que faltan de cara a su contratación para la próxima temporada y anunciar el fichaje. Ya está todo apalabrado después de que se convirtiera en la primera opción del consejo de administración albiazul tras la negativa a renovar de José María Salmerón, si bien Monteagudo también tiene claro que va a apretar bastante en las negociaciones porque quiere que le prometan que no va a haber problemas de impagos desde el primer momento, además de que va a haber un proyecto competitivo y de garantías para aspirar al ascenso. De hecho, y a falta todavía de que haya un director deportivo en el Decano, Monteagudo asumirá personalmente con Manolo Zambrano y Juan Antonio Zamora el apartado de las renovaciones y de los primeros fichajes la próxima semana, y es que la pretemporada comenzará en sólo dos semanas y se quiere que el grueso de la plantilla ya esté firmada para esa fecha. No debería haber problemas, por lo tanto, para que Monteagudo sea el nuevo técnico albiazul, aunque todo está a expensas de que acepten sus lógicas exigentes condiciones para montar un Recre ganador y que no se conforme con estar en la zona media de la clasificación. Una última temporada dubitativaComo futbolista, el manchego estuvo dos temporadas en el Decano, disputando 32 y 35 encuentros, respectivamente. Fue a las órdenes de Joaquín Caparrós entre 1997 y 1999, logrando el ascenso a Segunda División y completando después una buena campaña también en la categoría de plata. En septiembre cumplirá 45 años y cuenta con un amplio currículum ya como técnico tras haber dirigido en Segunda B al Lucena, Badajoz, Cádiz, Cultural Leonesa, La Roda y tres temporadas al Cartagena, con el que rozó el ascenso a Segunda. La pasada campaña entrenó, sin suerte, cuatro partidos al Apollon de Esmirna griego, donde coincidió con el exdelantero albiazul Boris Garrós, y luego estuvo en la categoría de plata en el Lugo, donde tampoco le fue demasiado bien, ya que fue destituido con el club gallego en puestos de descenso a Segunda B. Fue su debut como técnico en Segunda División, una categoría a la que ahora tratará de llevar al Decano.

De hecho, y a falta todavía de que haya un director deportivo en el Decano, Monteagudo asumirá personalmente con Manolo Zambrano y Juan Antonio Zamora el apartado de las renovaciones y de los primeros fichajes la próxima semana, y es que la pretemporada comenzará en sólo dos semanas y se quiere que el grueso de la plantilla ya esté firmada para esa fecha. No debería haber problemas, por lo tanto, para que Monteagudo sea el nuevo técnico albiazul, aunque todo está a expensas de que acepten sus lógicas exigentes condiciones para montar un Recre ganador y que no se conforme con estar en la zona media de la clasificación.

Como futbolista, el manchego estuvo dos temporadas en el Decano, disputando 32 y 35 encuentros, respectivamente. Fue a las órdenes de Joaquín Caparrós entre 1997 y 1999, logrando el ascenso a Segunda División y completando después una buena campaña también en la categoría de plata. En septiembre cumplirá 45 años y cuenta con un amplio currículum ya como técnico tras haber dirigido en Segunda B al Lucena, Badajoz, Cádiz, Cultural Leonesa, La Roda y tres temporadas al Cartagena, con el que rozó el ascenso a Segunda.

Una última temporada dubitativaComo futbolista, el manchego estuvo dos temporadas en el Decano, disputando 32 y 35 encuentros, respectivamente. Fue a las órdenes de Joaquín Caparrós entre 1997 y 1999, logrando el ascenso a Segunda División y completando después una buena campaña también en la categoría de plata. En septiembre cumplirá 45 años y cuenta con un amplio currículum ya como técnico tras haber dirigido en Segunda B al Lucena, Badajoz, Cádiz, Cultural Leonesa, La Roda y tres temporadas al Cartagena, con el que rozó el ascenso a Segunda. La pasada campaña entrenó, sin suerte, cuatro partidos al Apollon de Esmirna griego, donde coincidió con el exdelantero albiazul Boris Garrós, y luego estuvo en la categoría de plata en el Lugo, donde tampoco le fue demasiado bien, ya que fue destituido con el club gallego en puestos de descenso a Segunda B. Fue su debut como técnico en Segunda División, una categoría a la que ahora tratará de llevar al Decano.