fútbol playa
España, con Pajón y Guisado, derrota a Bielorrusia (3-1) y sigue intratable en la Liga Europea
20.50 h. Dos partidos y otras tantas victorias para España en la arena rusa. Los goles de Cintas y Pablo y una magnífica actuación del portero y capitán Dona fueron los grandes artífices de un nuevo y muy trabajado triunfo para un equipo español muy serio en Moscú. Dani Pajón fue titular y Fernando Guisado tuvo después sus minutos.
La Selección española de fútbol playa saltó a la arena moscovita sabiendo a ciencia cierta que el partido no iba a ser fácil ante una siempre correosa Bielorrusia. Prueba de ello es la doble ocasión que tuvieron los hoy visitantes en el primer minuto de juego y que entre Dona y Cintas consiguieron despejar en una gran acción defensiva.
El transcurso del primer tercio del encuentro se caracterizó por la igualdad. Ambas escuadras dispusieron de ocasiones pero fue España la autora del único gol en los 12 minutos que abrieron el partido. Cintas llegó desde segunda línea para adelantarse a la defensa bielorrusa y mandar el balón a la red aprovechando una gran asistencia de Dani Pajón.
El segundo periodo comenzó como el primero, con susto para el combinado español. A un palmo estuvieron de empatar los de Marco Octavia pero Pajón salvó de cabeza bajo los palos cuando el balón se colaba.
España tuvo el segundo tanto del encuentro en los pies de Raúl Mérida, pero el 9 almeriense de la Selección no pudo transformar un claro penalti. Este segundo tercio fue una exhibición de Dona, el guardameta español realizó unas intervenciones que justifican que esté considerado como uno de los mejores del mundo en su posición.
Tres minutos antes de finalizar ese periodo, Pablo logró mandar a la red un gran pase al hueco, de nuevo, de Dani Pajón y batir con potente tiro cruzado por arriba a Makarevich.
El último tiempo fue el más complicado para los de Joaquín Alonso. Los bielorrusos se volcaron sobre la portería de un omnipresente Dona. El almeriense repelía todos y cada uno de los disparos que llegaban a su portería, en una exhibición de reflejos, fuerza y valentía. Sin embargo, poco pudo hacer el capitán español ante el libre directo de Bryshtel y el bote del siempre caprichoso balón del fútbol playa.
Con cuatro minutos por delante, España consiguió defender su ventaja en el marcador, logrando así tres nuevos puntos sobre la arena moscovita. El próximo reto se llama Italia.
