Magna de Huelva: La Gran Vía y la plaza de las Monjas estarán sin veladores desde por la mañana
Los establecimientos hosteleros deberán tener libre de mesas el recorrido desde las nueve de la mañana del día 20, por lo que tampoco podrán ofrecer desayunos
En otras calles del centro desaparecerán igualmente a partir del mediodía
Los hosteleros aseguran sentirse «ninguneados» ante la Magna de Huelva: no habrá terrazas en el recorrido oficial
El Ayuntamiento de Huelva se compromete con el Consejo de Hermandades a la coordinación logística de la Magna Mariana

Continúa el malestar en la hostelería onubense por lo que consideran una «falta de previsión y de comunicación» de cara a la organización de la Magna Mariana que la ciudad de Huelva acogerá el próximo sábado, 20 de septiembre.
A poco más de una semana para su celebración, los hosteleros siguen recibiendo indicaciones acerca de las restricciones que tendrán que acatar ese día, y que se han impuesto -lamentan- sin diálogo previo «ya como un hecho consumado, sin consultarnos y sin capacidad de reacción».
Así lo ha señalado el presidente de Bareca, Rafael Acevedo, a Huelva24, después de que se haya trasladado al sector que el recorrido oficial de la procesión, esto es, la plaza de las Monjas y la Gran Vía -a lo largo del que se reparten una treintena de bares, restaurantes y cafeterías- deberá estar libre de veladores desde las nueve de la mañana de ese sábado, con lo que tampoco se podrán ofrecer desayunos.
«Nos han comunicado que los establecimientos de estas dos zonas deberán tener todo retirado a las nueve de la mañana, ya que para esa hora se llevará a cabo el rastreo con perros en la calle y en todo el alcantarillado. Una vez comprobado que todo está despejado, no se podrá poner ni una sola mesa en la vía pública durante toda la jornada», explica Acevedo, que ha insistido en el perjuicio que va a suponer al sector un acontecimiento que, a priori, debería redundar también en su beneficio.
Vías de evacuación
Desde Bareca insisten en que comprenden la necesidad de reforzar la seguridad, pero rechazan la forma en que se ha gestionado el proceso. «Somos los primeros que entendemos que hay que garantizar la seguridad, eso no lo cuestiona nadie, pero consideramos que la organización ha sido pésima. Nos deberían haber consultado y, sobre todo, avisado con anterioridad, no cuando ya contábamos con tantas reservas hechas. La Magna se viene preparando desde hace dos años, ha habido tiempo para llegar a un acuerdo».
En total, una treintena de establecimientos no podrán sacar sus veladores durante toda la jornada del sábado en la Gran Vía y la plaza de las Monjas. Pero las restricciones también se extenderán a calles como Vázquez López, Rábida, Berdigón o Quintero Báez, contempladas como vías de evacuación y que por tanto no pueden tener obstáculos en la calle. La revisión y seguridad del itinerario es competencia de la Policía Nacional.
En estos casos, aunque en varios establecimientos no han recibido aún comunicación definitiva, se prevé que los bares y restaurantes deban retirar sus terrazas a partir de las 16.30 horas.
«La afectación al sector en esta jornada desde luego va a ser indudable, con buena parte de los establecimientos del centro de la ciudad sin poder hacer uso de sus veladores», ha insistido Acevedo, explicando que «hay algunos que han podido acomodar dentro las reservas que tenían hechas desde hace semanas, pero otros no».
Retirada de elementos con antelación
La indignación de los hosteleros se ha acentuado con los cambios de última hora en los plazos para la retirada de elementos como maceteros y separadores de terrazas. «Se nos acaba de comunicar, a menos de una semana, que el desmontaje de estos elementos debe estar listo el miércoles 17 a las ocho de la mañana, cuando en la reunión inicial se había dicho que sería a las 20.00 horas de ese mismo día. Y son trabajos que tenemos que hacer nosotros mismos», critican.
Así, el presidente de los hosteleros ha reprochado no sólo la falta de comunicación con el sector por parte del Consejo de Hermandades, sino también «que en su momento el presidente -Antonio González- llegó a decir que la adecuación de las calles para el desfile correría de su cuenta, y la estamos teniendo que asumir nosotros. La retirada de maceteros, separadores y veladores, por supuesto, está siendo para nosotros, al igual que sus consecuencias«, ha lamentado.