SEMANA POR EL CLIMA
Fridays for future: una lucha global para la que 'en Huelva hay razones de sobra'
Manifestaciones, entrevistas callejeras o debates sobre el modelo agrícola forman parte de la programación que los jóvenes por el clima onubense han preparado para esta 'Week for future', en la que participan junto a la juventud a nivel internacional.

Tal vez se los encuentre esta tarde por la calle, interpelándole acerca de su percepción sobre el cambio climático y su grado de implicación en la lucha contra el mismo. Son los –y las- jóvenes de Fridays for future Huelva, que en esta Semana por el Clima ('Week for future') se están haciendo más visibles en las calles, también en las de la capital onubense.
Se echaron a la misma el pasado viernes, como en la mayoría de capitales, y la experiencia les sirvió como espaldarazo, para tomar conciencia de que su mensaje, poco a poco, va calando. Así nos lo ha contado Alba Márquez, una de las coordinadoras del movimiento en Huelva, que el viernes vio con sorpresa que “niños de 7 u 8 años nos preguntaban, por ejemplo, por los ficus de la plaza Niña y se interesaban por lo que les contábamos”.

Y es que aunque la lucha de esta juventud por el clima es global, obviamente en Huelva cuenta con características propias. Características que la hacen, si cabe, más imprescindible en esta tierra nuestra que en cualquier otro lugar. “Aquí en Huelva hay razones de sobra para esta lucha. El cambio climático es un problema global que nos afecta a todos y todas, pero además aquí se agrava con problemas medioambientales como los fosfoyesos, el Polo Químico, las amenazas sobre Doñana, o los espacios verdes donde se quiere edificar. Nuestra labor aquí es importante, y es fundamental acabar con la apatía que pueda haber”, insiste esta joven, estudiante, que como muchas de las personas que la acompañan en el colectivo ha optado por robarle tiempo a otros gustos y aficiones para dedicárselo a una causa para la que, recordemos, la comunidad científica alerta de que apenas queda eso: tiempo.
El daño al planeta y los efectos del cambio climático son una realidad ya, pero ahora toca implementar medidas que mitiguen sus efectos. Las personas tenemos responsabilidades en cuanto al medio ambiente y podemos poner de nuestra parte con gestos como reciclar y reutilizar, reducir el consumo de carne,… Tenemos que ser conscientes de nuestro impacto y reducirlo en la medida de lo posible”. Habla Rafa Malmagro, otro de los coordinadores de Fridays for Future en Huelva, que sin embargo también tiene bien claro que no pueden ser ellos, los jóvenes, quienes hagan todo el trabajo. “Nosotros estamos para darle voz a la gente, a la reclamación que hay generalizada, a los científicos que llevan años advirtiendo del problema, pero es la Administración la tiene que encargarse de cumplir y proponer soluciones también”, insiste, criticando las “declaraciones de emergencia climática vacías, que no vienen acompañadas de medidas que podamos evaluar o contrastar”.
“Tenemos que limitar la subida de 1,5 ºC de las temperaturas de la que ya nos ha advertido la comunidad científica y que tiene su casusa principal es las emisiones de CO2, así que el objetivo primordial es reducir estas emisiones. No es solo que se declare la emergencia climática, sino que se establezcan medidas reales que se puedan supervisar y que tengan un efecto positivo en el medio ambiente. Si no es un simple acto simbólico que no sirve de nada. Ya sabemos que estamos en emergencia climática”, abunda Alba. Objetivo inmediato¿Qué quiere entonces toda esta juventud que en estos días sale a la calle? Pues que el mundo no se olvide de ella, que no se les prive del futuro al que tienen derecho, ellos y las generaciones venideras. “Lo principal es invertir en educación y en concienciación, porque eso hará que en el futuro se avance mucho”, apuntan. “Pero además hay que cuidar los espacios verdes, invertir en ellos y preservarlos, para frenar el aumento de las temperaturas y todos esos fenómenos que ya nos están afectando y se acrecentarán a corto plazo”. Se suele decir que para solucionar un problema el primer paso es tomar conciencia del mismo, reconocer que existe. Y lo que están haciendo los jóvenes en este caso es, además, gritarle –gritarnos- a la cara a los demás (responsables en buena medida de dicho problema) que exigen una solución. “Ya fuimos al Parlamento andaluz antes del verano a decirle a nuestros políticos que hay que combatir el cambio climático, que es urgente, y este viernes vamos a volver a ir –en Sevilla tendrá lugar la manifestación central de esta ‘Week for Future’- a decirles que no nos hemos olvidado del tema y que vamos a seguir peleando hasta que se comprometan realmente a poner en marcha acciones para solucionarlo”. Un colectivo abiertoClaro que podrían ser más. La juventud por el clima en Huelva es un grupo de alrededor de 20 personas activas, y un centenar interesado en el tema y que sigue las noticias en su canal de difusión por whatsapp; pero lo cierto es que los simpatizantes con la causa no dejan de aumentar –sin duda el fenómeno Greta Thunberg y su ejemplo son en buena parte responsables de ello- y las sensaciones del colectivo, en este sentido, son buenas. “El mensaje está calando, sí”, afirman, antes de asegurar que el perfil de las personas que forma parte de la organización es muy diverso, ya que “solo hay que estar interesado en la lucha contra el cambio climático y la defensa del medio ambiente”. Así, “estamos abiertos a cualquier ideología, porque el cambio climático nos afecta a todos, independientemente de la misma: todos tenemos derecho a tener un futuro y que se garantice un planeta habitable y digno”, apunta Rafa Malmagro. Respecto a la disyuntiva que se plantea en demasiadas ocasiones, especialmente en Huelva, entre empleo y medio ambiente, desde Fridays for future Huelva consideran que “sí hay un cambio con respecto a las generaciones anteriores que pensaban –o aún piensan- que la lucha medioambiental iba en contra de su trabajo. Las nuevas generaciones somos conscientes de que ambas cosas no son incompatibles, de que se pueden fomentar puestos de trabajo sostenibles, y hay jóvenes que quieren estudiar ingenierías pero por ejemplo orientadas a las energías renovables o relacionadas con la industria verde, lo que fomentará una sociedad más sostenible y ecológica”. Por ahora a estos jóvenes y a todas esas personas que se van incorporando al colectivo se los puede encontrar en redes sociales (están en Facebook y Twitter) y en asambleas abiertas organizadas normalmente al aire libre, a las que cualquiera se puede sumar y en las que, pese a todo, el mensaje principal es de esperanza.

Un colectivo abiertoClaro que podrían ser más. La juventud por el clima en Huelva es un grupo de alrededor de 20 personas activas, y un centenar interesado en el tema y que sigue las noticias en su canal de difusión por whatsapp; pero lo cierto es que los simpatizantes con la causa no dejan de aumentar –sin duda el fenómeno Greta Thunberg y su ejemplo son en buena parte responsables de ello- y las sensaciones del colectivo, en este sentido, son buenas. “El mensaje está calando, sí”, afirman, antes de asegurar que el perfil de las personas que forma parte de la organización es muy diverso, ya que “solo hay que estar interesado en la lucha contra el cambio climático y la defensa del medio ambiente”. Así, “estamos abiertos a cualquier ideología, porque el cambio climático nos afecta a todos, independientemente de la misma: todos tenemos derecho a tener un futuro y que se garantice un planeta habitable y digno”, apunta Rafa Malmagro. Respecto a la disyuntiva que se plantea en demasiadas ocasiones, especialmente en Huelva, entre empleo y medio ambiente, desde Fridays for future Huelva consideran que “sí hay un cambio con respecto a las generaciones anteriores que pensaban –o aún piensan- que la lucha medioambiental iba en contra de su trabajo. Las nuevas generaciones somos conscientes de que ambas cosas no son incompatibles, de que se pueden fomentar puestos de trabajo sostenibles, y hay jóvenes que quieren estudiar ingenierías pero por ejemplo orientadas a las energías renovables o relacionadas con la industria verde, lo que fomentará una sociedad más sostenible y ecológica”. Por ahora a estos jóvenes y a todas esas personas que se van incorporando al colectivo se los puede encontrar en redes sociales (están en Facebook y Twitter) y en asambleas abiertas organizadas normalmente al aire libre, a las que cualquiera se puede sumar y en las que, pese a todo, el mensaje principal es de esperanza.
“El mensaje está calando, sí”, afirman, antes de asegurar que el perfil de las personas que forma parte de la organización es muy diverso, ya que “solo hay que estar interesado en la lucha contra el cambio climático y la defensa del medio ambiente”. Así, “estamos abiertos a cualquier ideología, porque el cambio climático nos afecta a todos, independientemente de la misma: todos tenemos derecho a tener un futuro y que se garantice un planeta habitable y digno”, apunta Rafa Malmagro.

Respecto a la disyuntiva que se plantea en demasiadas ocasiones, especialmente en Huelva, entre empleo y medio ambiente, desde Fridays for future Huelva consideran que “sí hay un cambio con respecto a las generaciones anteriores que pensaban –o aún piensan- que la lucha medioambiental iba en contra de su trabajo. Las nuevas generaciones somos conscientes de que ambas cosas no son incompatibles, de que se pueden fomentar puestos de trabajo sostenibles, y hay jóvenes que quieren estudiar ingenierías pero por ejemplo orientadas a las energías renovables o relacionadas con la industria verde, lo que fomentará una sociedad más sostenible y ecológica”.
Por ahora a estos jóvenes y a todas esas personas que se van incorporando al colectivo se los puede encontrar en redes sociales (están en Facebook y Twitter) y en asambleas abiertas organizadas normalmente al aire libre, a las que cualquiera se puede sumar y en las que, pese a todo, el mensaje principal es de esperanza.