rosal de la frontera
Una mujer inicia una huelga de hambre para pedir la revocación de la orden de expulsión de su marido
14.50 h. Una mujer de 30 años de Rosal de la Frontera, Jessica Pascual, ha comenzado este miércoles una huelga de hambre para pedir la revocación de la orden de expulsión que tiene su marido, de nacionalidad marroquí, y que le prohíbe entrar en España hasta el año 2020.
Jessica Pascual ha indicado que este acto de protesta lo lleva a cabo frente a la Subdelegación del Gobierno, donde este martes mantuvo una reunión con el subdelegado, Enrique Pérez Viguera.Por su parte, desde la Subdelegación han indicado que Pérez Viguera le aseguró que va a analizar el asunto, ya que el escrito de recusación administrativo contra esta orden de expulsión lo presentó el 8 de mayo, y le responderá lo antes posible.Asimismo, la mujer ha indicado que a partir de este miércoles y hasta el próximo 30 de mayo, fecha en la que expira el permiso para poder protestar frente a la sede gubernamental, estará ahí desde las 13.00 y hasta las 23.00 horas cada día, acompañada por su hija de diez meses y un amigo, y no tomará ningún tipo de alimento. De este modo, si una vez concluido este plazo no cuenta con una respuesta a favor de su familia, ha dejado claro que permanecerá las 24 horas frente a la Subdelegación, esta vez sin su hija, apostada. No me voy a rendir, ha enfatizado.De otro lado, ha explicado que conoció a su marido en 2008 y se casó con él en 2010 mediante un matrimonio por poderes, así como ha apuntado que sobre su esposo pesaba una orden de expulsión desde 2004 debido a la comisión de varios robos.Ha narrado que su marido volvió irregularmente a España en 2008 ya que creía que, por la información que le había dado su abogado, que podía hacerlo cuando era hasta 2014. En 2010 la pareja comenzó los trámites para casarse, pero el día en el que los citaron para la audiencia habitual en casos de matrimonios entre extranjeros, la Policía le detuvo.Pascual ha destacado que al haber quebrantado la orden de expulsión, la Subdelegación del Gobierno amplió la misma hasta 2020 y ahora ha presentado un escrito para su revocación y su abogada, según ha puntualizado, prepara incluso otro recurso para presentarlo en el juzgado de lo Contencioso-Administrativo. Por último, ha subrayado que esta orden de expulsión es excesiva en años, ya que su esposo ahora es una persona madura, que tiene derecho a reintegrarse porque no es ningún delincuente.