El Carnaval de Isla Cristina afronta su semana decisiva antes de la gran final del próximo sábado

Casi no queden localidades por vender. A excepción de mañana lunes, el resto están vendidas, por lo que una vez concluido el concurso habrán pasado por el el Teatro Horacio Noguera 6.300 espectadores.Estos datos caen en el Departamento de Festejos y la Asociación de Carnavaleros Isleños, coorganizadores del concurso (ACI), como agua de mayo porque se cubren los gastos que genera la propia maquinaria de la competición y las agrupaciones participantes se aseguran unos premios adaptados a las circunstancias económicas actuales. La responsable de Festejos en el consistorio costero, Isabel López, ha indicado que “es una satisfacción y orgullo ver tu teatro lleno todos los días y con ganas de carnaval”. Y qué ganas. El respetable lo ha dado todo desde el primer día, aupando a cada una de las veinticinco agrupaciones, de aquí y de allá, que se la están jugando por mantenerse hasta semifinales. No en vano, para que el público disfrute y las agrupaciones desarrollen su repertorio de forma cómoda, un centenar de técnicos municipales, azafatas, miembros de seguridad, Policía Local, Vigilantes Municipales, Bomberos, ACI, presentadores y medios de comunicación, todas las noches, a partir de las 20.30 horas,  se ponen manos a la obra, y  la maquinaria comienza a rodar, lo que se traduce en que las actuaciones fluyan, una tras otra, sin mayores incidentes que pon un clavo aquí o un aplique allá”Informatización de los sistemasComo novedad en esta edición y para evitar posibles errores humanos en el recuento de las votaciones, la ACI, de quien depende los jurados, ha implantado un sistema informático donde, diariamente, se 'vuelcan' las puntuaciones y al que se accede con una clave numérica que solo conoce cada miembro.Y también la informática puede ser una herramienta fundamental, en un futuro cercano, cómoda y rápida, para que el ciudadano, desde cualquier punto del mundo pueda hacerse con una entrada del concurso. López ha asegurado que en su departamento ya se valora la creación de una web para estos menesteres, es decir, con las consiguientes restricciones en el número de entradas, como ocurre en taquilla, y desde un ordenador o smartphone, poder elegir el día, fila y asiento que se quiera, “siempre dejando otro número de entradas para su venta de la forma tradicional en las taquillas y así cubrir todas las necesidades”. Aún quedan muchos días de concurso, a excepción del miércoles que descansan las voces, para enfilar la recta final. Los nervios irán aumentando a medida que se acercan las semifinales porque todos quieren estar en ella, como pase para estar con los más grandes, en la gran final del domingo.