Recreativo
Salmerón recuerda que con tres meses de deuda los jugadores pueden salir y que “será una vorágine que no podremos parar”
15.05 h. El técnico se siente “decepcionado pero no engañado” ante los impagos, confía en que habrá soluciones a los impagos y asegura que se reunirá con quienes le prometieron que no habría problemas. Señala que pese a los males económicos “el equipo está preparado para competir pero la incertidumbre no es buena”. Lamenta que “parezca que vamos mendigando un campo en el que entrenar”.

Todo el recreativismo esperaba que hablar continuamente de los impagos en el club fuera progresivamente cosa del pasado. Esta temporada lo que parecía ser una sombra está más presente que nunca, en el foco de atención. El Recreativo de Huelva sufre de nuevo el calvario económico y todos temen ya su influencia en la marcha deportiva del equipo. El técnico José María Salmerón de momento confía en que se arreglen las cosas y que las dos nóminas adeudadas no vayan a más, pero tampoco esconde que hay problemas y que no se están cumpliendo las promesas que le hicieron. No da nombres pero hablará con esas personas para tener una información que debería llegarle y no le llega.
Al respecto en rueda de prensa de previa del partido ante el Atlético Malagueño, se habló poco de fútbol. Salmerón recordó que “se me dijo en todo momento el club iba a ir en buenas condiciones, que se iba a pagar y tener un año correcto. Eso es lo que espero. Llevamos dos meses de impagos. Sé quiénes son los que me dijeron que estoy iba a ir bien y se iban a pagar los días 10. Se está trabajando para arreglar todo y estoy preocupado del día a día y del grupo humano”.
Agregó que “el equipo preparado para competir y no es excusa los impagos, pero la incertidumbre no es buena y lo sabe todo el mundo. Espero que tengamos más información y dejemos de decir cosas hacia fuera. Sabemos perfectamente quiénes tienen la responsabilidad y que se trabaja para el buen funcionamiento del club”.
No obstante, también avisó de que “si esto sigue así lo jugadores en enero se pueden ir, pero hay un grupo humano trabajado para que no perjudique nada y nosotros cada semana vamos a trabajar para dar el máximo y no vamos a excusarnos en nada, aunque todo trae problemas porque todo el mundo tiene que pagar su casa, la comida y la gasolina”. Señaló que “somos trabajadores y todo el mundo tiene que estar al día y es responsabilidad del club”.
Recalcó una vez más que “estamos trabajando como dese el primer día, pero ya con tres meses los jugadores se podrán ir y será una vorágine que no pondremos parar nadie. Pero ahora mismo que ganemos o perdamos no es por eso”.
Insistió una vez más en que “trabajamos día a día para dar el máximo y espero que los que tienen responsabilidad cumplan. No esperaba tener estos problemas ya en estos meses y pediré explicaciones”.
“Estoy decepcionado pero no engañado.No esperaba esta circunstancia y tan pronto. Tengo esperanza en que esas personas que levantaron la mano para que todo esto se solucione actúen”, expresó el técnico almeriense, que lamentó que “parece que vamos mendigando donde entrenar, sin vestuarios y muchas circunstancias que arrastra el club y eso sí me preocupa, pero no hay excusas. Vamos a trabajar y el grupo está muy fuerte en todos los sentidos”.
Ya quiso entrar en lo meramente deportivo y aseguró que “lo importante es el domingo y el partido ante el Atlético Malagueño, que es en lo que empleamos toda nuestra energía”.
Opinó sobre el rival que es un filial con “mucha calidad individual”, con jugadores que pueden dar el salto al Málaga en Segunda A. Reconoció que tuvieron problemas al recalar en la categoría, pero que vio el duelo con el Almería B y le gustó. “Pudo haber ganado 0-4 pero perdieron con un gol en propia meta en el minuto 90”, indicó.
Es por ello que expuso que aunque es el colista “hay que estar al máximo nivel para ganarle. Pueden hacer daño a cualquiera. La gente puede pensar que es un partido fácil y no lo es. Si lo pensamos empezamos a perder el partido. Va a ser complicado y necesitamos el apoyo de todo el mundo”.
Sobre el césped declaró que “esperemos que aguante y no se levante y esté en las mejores condiciones”.