Prefil del último fichaje albiazul
'El cangrejo la puede romper'
Tiene apenas 22 años pero ya acumula mucha experiencia en sus espaldas. Debutó en la Primera División hace ya más de cuatro años, cuando Salvador Capitano, el argentino que supo dirigir a Wanderers, lo mandó a la cancha allá por abril del 2010, con 18 carnavales recién cumplidos. Las primeras impresiones que dejó en el público bohemio fueron muy buenas.
En un fútbol uruguayo con extremos prácticamente extinguidos. el Cangrejo Javier Cabrera la pasaba muy bien cuando recibía la pelota por derecha y, a pura finta y habilidad, colaboraba de manera precisa en cada ataque bohemio. Pero Wanderers no vivía temporadas tan buenas como las dos últimas y esto se vio reflejado en el juego del atacante, que cada vez sorprendía menos con sus encares y en general lograba ser mejor controlado por los defensas rivales.
Provino de Florida, una pequeña ciudad del interior uruguayo, ubicada a menos de 100 kilómetros de Montevideo, en la que viven poco más de 30 mil personas pero que en los últimos tiempos le aportó muchos -y muy buenos- jugadores al país. Llegó a la capital tras ser ojeado y contratado por un colaborador de Wanderers, que lo vio jugar en el Quilmes de su ciudad natal. Sus condiciones eran evidentes.
Su crecimiento profesional fue ayudado por dos enormes jugadores como Sergio Blanco y Antonio Pacheco, con quienes jugó durante la temporada 2011-12. Cabrera era muy irregular en ese momento, pero un titular casi indiscutido. Le faltaba ese punch final para definir bien las jugadas. Fue cuestionado. En ese contexto le llegó su brava lesión, sucedida en el partido por la Copa Sudamericana ante el Libertad de Paraguay.
Le llevó más de un semestre recuperarse y desde afuera veía como Wanderers crecía partido a partido, acumulaba uno y otro juego sin perder y, cuando estuvo a punto físicamente, su lugar ya lo había perdido. Entraba de a ratitos mientras el bohemio era campeón y jugaba las finales, en las que tuvo mucha participación pero sin salir jamás de la irregularidad.
Tratando de reavivar su carrera, Cabrera recaló en el Recreativo, donde se encontrará con Menosse, un excompañero. Condiciones le sobran. Tendrá que ajustar otras cosas.
Miguel Méndez, del blog de fútbol uruguayo Aguanten ché