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Con José Domínguez en la cuerda floja y virtualmente descendido
11.25 h. Hay un gran enfado en el seno de la directiva del Recre. El equipo no jugó a nada ante el Girona y tampoco mejoró su imagen frente al Mirandés. Eran dos partidos en los que se jugaba la vida y ahora está obligado a ganar cinco de los seis que quedan. Ya casi nadie cree en la permanencia y están obligados a ir planificando el proyecto de Segunda B sin descartar la última bala de cambiar nuevamente de técnico esta semana para buscar el milagro.

Las matemáticas le conceden todavía un hilo de esperanza al Recreativo de Huelva, pero las sensaciones lo dan ya prácticamente por muerto. Esta temporada es la más barata de la historia a la hora de lograr la permanencia, de ahí que si el Decano gana cinco de los seis partidos ligueros que le restan lograría la salvación con 47 puntos. Debe recibir al Valladolid, Leganés, Sabadell y Barcelona B y visitar a Las Palmas y Osasuna. Pero casi nadie, ni en el seno del vestuario, ni en el de la directiva, ni por supuesto entre la afición, confía ya en el milagro. Han sido muchas decepciones y oportunidades perdidas en las últimas fechas, y cuando sólo se han ganado dos de los últimos 23 encuentros (12 puntos de 69 posibles), ya sobran las excusas.
Es verdad que ha habido mala suerte en varios choques, que al Decano le han marcado el gol de la jornada muchas veces o que se ha marcado tantos en propia meta, o que los arbitrajes le han perjudicado, o que las lesiones y sanciones han hecho mella en una plantilla muy corta, o que los impagos han afectado bastante al apartado anímico del plantel... Pero muchas de esos contratiempos también los han sufrido otros conjuntos de la categoría de plata, así que si el conjunto onubense marcha colista a estas alturas de la competición es por méritos más que propios y porque también habrá hecho algo mal. No obstante, ni el presidente, Pablo Comas, ni el secretario técnico, Fernando Iturbe, parecen darse por aludidos y continúan pensando que la plantilla es de las diez mejores de la Segunda División y que no tiene carencias, ni está descompensada.
La falta de gol está siendo alarmante. Nunca en su historia el Decano había tenido tan poca efectividad de cara a la portería contraria, y sin embargo el club albiazul no movió pieza para paliar la salida de Joselu en el mercado invernal, ni para buscarle competencia de garantías a Braulio y Rubén Mesa, que no le marcan un gol ni al arco iris. Aunque lo del pacense es de 'expediente X', ya que no goza de minutos pese a que el equipo onubense está pidiendo a gritos un ariete capaz de intentar ver puerta. Su falta de oportunidades tras el descanso fue uno de los motivos que indignó anoche a los miembros del Consejo de Administración del Decano, así como la timorata actitud del equipo en la primera mitad o la alineación tan poco ambiciosa de José Domínguez teniendo en cuenta que al Recre ni siquiera le valía el empate en Anduva ante un Mirandés que además ya no se jugaba prácticamente nada.
A lo largo de las próximas horas los rectores albiazules van a sopesar la posibilidad de buscarle un sustituto al míster portugués, que comenzó su andadura en el Decano con algo de suerte ganando en Soria, pero que después de tener dos decentes actuaciones contra la Ponferradina y el Albacete ha permitido que su conjunto roce el ridículo frente al Girona y el Mirandés. Ahora se necesita un entrenador que transmita y que tenga tanto conocimientos futbolísticos como psicológicos, y de momento José Domínguez no ha funcionado. Le avala que viene gratis y que tiene detrás un posible futuro inversor para el Decano. Pero con Juan Manuel Pavón el Recre sí que iba en progresión ascendente y estaba mejorando a José Luis Oltra. La decisión de cargarse al onubense se ha convertido en el enésimo error de unos pésimos gestores, que ahora bien harían en ir planificando, con tiempo, el próximo proyecto en Segunda B.
Con el Decano virtualmente (que no matemáticamente) descendido, ya ni siquiera queda aferrarse a la ilusión de salvarse en los despachos, ya que tras la firma del Decreto Ley la semana pasada esta temporada no servirá quedarse el cuarto o tercero por la cola para lograr la permanencia. Y como la vida sigue, también es una incógnita, y existe una lógica y gran preocupación entre la masa social albiazul, saber qué futuro le espera al Decano. Económicamente va a ser tremendamente complicado el palo de descender a Segunda B, y además ya sin elecciones de por medio es difícil que el Ayuntamiento de Huelva esté por la labor de implicarse demasiado. Y en lo deportivo, el club onubense ya sopesa buscar un secretario técnico que conozca el mercado para planificar un proyecto que le permita estar en la zona alta del Grupo IV, mientras que para el puesto de entrenador gusta Juan Manuel Pavón por lo que demostró en las siete jornadas que estuvo en el cargo de primer técnico albiazul esta campaña. Después de 17 años sin pisar dicha categoría, hay que moverse con mucha inteligencia para no errar, como le has pasado a otros clubes históricos.