El Recreativo sigue empeñado en afear su final de temporada (1-4)

Ricardo Ubric

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

28/04/2024
Actualizado a las 22:48h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

¿Cómo puede cambiar tanto un equipo de una primera vuelta a la segunda? El Recreativo de Huelva se ha caído desde el mes de enero de manera incomprensible. Sea el 'caso Comas', sea el mercado invernal, sean las lesiones y sanciones, sea la falta de profundidad de la plantilla y por ende la falta de gasolina ya a estas alturas porque el banquillo no da la talla, sea que el listón hasta Navidad era engañoso y por encima de las expectativas... El caso es que no podemos ceñirlo todo a los arbitrajes. Que sí, que ante el Linares el árbitro fue protagonista y posiblemente la gran causa de la derrota, pero otros días hubo flor con las actuaciones de Rubén Gálvez y de alargarse un poco más el campeonato liguero a lo mejor hasta peligraría la permanencia. No es descabellado pensar que a Abel Gómez le ha pasado como a Germán Crespo justo hace un año también en la Primera RFEF con el Córdoba. El Decano se ha ido deshaciendo como un castillo de naipes con el paso de las jornadas. Está afeando mucho su final. Que llegue ya el 25 de mayo.

Porque ciertamente, y pese a que el calendario albiazul es bastante mejor que el del Ceuta, el Murcia y el Antequera, parece hasta chistoso pensar que este equipo va a ser capaz de ganar los cuatro partidos que le quedan. Sólo así tendría alguna opción de acabar quinto y jugar el 'play-off'. El objetivo de la campaña se cumplió con creces hace ya algunas semanas. Era la permanencia y la consolidación en la categoría. Hecho está. La pena es que varios jugadores y sobre todo el entrenador están quedando señalados en este oscuro último tramo del curso. Menudos 'partiditos' ante el Atlético Baleares, el Real Madrid Castilla o el Atlético Sanluqueño.

Y lo curioso es que ante el Linares la actuación sí que fue bastante decente. Se tuvieron ocasiones de todos los colores, el Decano hizo internacional al meta visitante Samu Casado, y con un arbitraje correcto posiblemente el resultado hubiese sido otro. Qué más hubiese dado. La semana que viene el Intercity le habría pintado la cara a un Recre que ya lleva un tiempo pensando en las vacaciones. Ha dejado pasar un tren de oro para luchar por el 'play-off'. Un reto que sí que habrá que exigirle la próxima campaña. En la actual ya ha hecho los deberes y ahora de lo que se trata es de acabar con dignidad.

Lo más coherente, una vez que esta hermética dirección deportiva y zona noble han actuado de manera correcta renovando a los pilares básicos de la plantilla, sería hacer lo propio con el entrenador. Si se quiere crear un proyecto a medio plazo sería lo lógico. Pero al no haber anunciado ya su continuidad, y viendo que con el paso del tiempo los números de los albiazules siguen cotizando a la baja, ya cada vez más gente se va a sumar a la teoría de que Abel Gómez está verde y que toca un giro de timón, un cambio de ciclo y aire fresco en el banquillo. Craso error. En definitiva, que posiblemente el que más se va a jugar en las cuatro citas que quedan de aquí al 25 de mayo sea el técnico del Decano. Algo totalmente injusto viendo su grandísima labor con las mimbres tan regulares que ha tenido estos dos años en Huelva, pero así está montado este mundo del balompié. A ver qué pasa porque no debe ser fácil estar estos días ni en su pellejo ni en el de los jugadores.

Llegaba un Linares ciertamente mejorado con Romerito y que le había plantado cara al todopoderoso líder Castellón. Pero era un equipo que llevaba seis partidos seguidos sin ganar, muy tocado anímicamente y que encima visitaba un Nuevo Colombino donde el Recre no perdía desde noviembre. Nadie pensaba en que se iba a dar un 1-4. Por más que haya un garrafal error arbitral, luego todavía quedaba casi una hora de partido por delante y el Recre debió templar sus nervios y jugar con otros argumentos para haberle dado la vuelta al encuentro. No es de recibo perder la cabeza de esa manera. El golpe anímico será duro de digerir. Es de esas derrotas que van más allá de tres puntos, y curiosamente el 'play-off' sigue sólo a cuatro de distancia (con 12 por disputarse), y el calendario del Ceuta, el Murcia y el Antequera es muchísimo más difícil que el onubense.

La plantilla es justita y corta. Por eso las bajas de titulares indiscutibles se notan bastante. No estaban por sanción ni Rahim, ni Rubén Serrano, y para colmo de males también se cayó a última hora por lesión Antoñito. Tocaba recomponer la defensa casi totalmente y sólo repitió Alberto Trapero, que encima se hizo un autogol en el 0-2 en el minuto 53 que dejó ya el partido prácticamente a merced de lo que quisiera hacer ya el Linares ante un Recre que a partir de ahí fue un flan atrás.

Abel Gómez arriesgó con Álvaro Bustos en un lateral, metió atrás a Sergio Díez y Raúl Navas y la cuarta novedad fue algo más inesperada, con la salida de la titularidad de Luis Alcalde en detrimento de Iago Díaz. Y el caso es que la apuesta parecía que iba a salirle bien porque en la primera media hora, de las mejores del equipo esta temporada, hubo muchísimas opciones claras para haber hecho el 1-0 en las botas y la cabeza de Caye Quintana, Antonio Domínguez, Trapero y David del Pozo.

Si eso hubiese ocurrido, otro gallo hubiese cantado porque abrir la lata ante un rival tan tocado (estaba a seis puntos de la permanencia) habría facilitado bastante las cosas. Sí lo logró el Decano el día del Castilla pero no el del Baleares. Este Recre está más hecho para destruir que para construir, y si encima se le junta el pésimo arbitraje de esta tarde el asunto se complica bastante.

Fue también valiente de inicio el Linares, al que no le valía el empate, y tuvo dos buenos avisos de Moreno y Varela antes de que poco antes del descanso llegaran las dos jugadas claves del partido. Caye Quintana envió un remate al larguero y acto seguido fue objeto de un claro penalti que el colegiado no quiso ver. Sí que pitó justo después uno a favor del Linares bastante riguroso por un derribo de Raúl Navas a Moreno dentro del área albiazul, y es que el central se quedó como una estatua y en ningún momento hizo el ademán de hacerle falta al contrario, que cayó al suelo al notar el contacto. Samu Corral puso el 0-1 con el que se llegó al intermedio.

No hubo cambios tras la reanudación y entre que el Decano salió ya con menos brío que en la primera mitad y que se topó con la mala fortuna del autogol de Trapero el choque quedó decidido en el minuto 53. Abel Gómez lo intentó con la entrada primero de Alcalde y Gorka Iturraspe y después de Pablo Caballero, Miguelete y Manu Galán. Arriesgó a un todo o nada en el que su equipo salió perdedor porque se le vieron demasiado las costuras atrás. En el correcalles con más corazón que cabeza fue bastante más inteligente el Linares, que hizo el 0-3 en el 70, obra de Antonio Marín al fusilar libre de marca a Rubén Gálvez desde la frontal del área pequeña.

El tramo final ya sobró y sirvió para que Pablo Caballero hiciese el gol del honor del Recre y justo después Inach colocara el contundente 1-4 que deja a los onubenses más cerca de las vacaciones que de soñar con el 'play-off'. Mal. Muy mal el árbitro. Pero esa no puede ser la única excusa para justificar la derrota. Siendo autocríticos este equipo se cayó hace tiempo y el 25 de mayo habrá que apuntar seguramente hacia más arriba que el banquillo para encontrar la respuesta a esa pregunta.

Ver comentarios (0)

Reportar un error