carta al director
El SAS: dormir en un sillón no reclinable
Escribo desde ese sillón que disponen en las habitaciones para los acompañantes de los enfermos, una vez asumido el hecho del insomnio obligado. El cuerpo no resiste el dolor de intentar ceder al sueño desde el escorzo exagerado: a medio camino entre la postura del ovillo y la de una alfombra que decora una escalera.
Estimado Sr. gerente de un Hospital del SAS:
Esto es el SAS: el Servicio Andaluz de Salud que pagamos entre todos y que nos asiste a todos. Esta es la Sanidad pública y universal que envidian tantos países (esta frase no me la he inventado yo). Y no desprecio en absoluto la labor médica que realizan sus buenos profesionales, que haberlos haylos. Pero no quiero entrar en ese estado tan común en el que entran los familiares de los ingresados en los hospitales, siempre enormemente agradecidos a todo el equipo médico y humano que les alivió, cuidó y acompañó su larga temporada hospitalaria.
En realidad tan sólo quiero pedirle que pase Ud. una noche, tan sólo una, tratando de dormir en uno de estos sillones que tan amablemente disponen para los familiares que acompañan a sus enfermos. Por favor, haga la prueba. Y no vale irse a mitad de la noche habiendo dimitido. Pásela entera como muestra de respeto y consideración por todos aquellos que lo hacen con frecuencia o por largas temporadas.
Sé qué dirá que no es su competencia. Que sus funciones no son la de velar por el sueño de los familiares de los enfermos. Y que no llega el presupuesto para más. Ya. Lo sé. Pero ni usted ni sus responsables políticos superiores saben lo que es pasar una noche (tan sólo una, repito) así: sentado-ovillado-inclinado-amargado sobre un sillón no reclinable dentro de una habitación en la que hay dos enfermos que no comparten entre sí más que la patología similar: cuatro personas desconocidas compartiendo habitáculo, sonidos y emisiones corporales de todo tipo durante una larga noche.
Por favor, pase una: tan sólo una noche así. Y piense. Le aseguro que las horas de insomnio le ayudarán a encontrar una solución. Y si no está en su mano, convencerá a sus superiores de que vivan esta enriquecedora experiencia igual que usted. Seguro que será efectivo.
@elenabarrios