Bádminton > Recepción en el Ayuntamiento
Carolina Marín: 'Esperaba el calor de Huelva, pero me ha impresionado y he llorado con la salve rociera'
21.02 h. La onubense, poseedora de la triple corona y el cariño y admiración de Huelva, ha reconocido que 'no esperaba tanta gente' a las puertas de Ayuntamiento y que se ha emocionado 'muchísimo'. Destaca la salve rociera como 'la sorpresa más grande' del día y que no sabe cuando volverá a la capital onubense para ver el Palacio de Deportes rotulado con su nombre. Resalta que espera competir al menos dos ciclos olímpicos más y el trabajo enorme que le ha exigido ser oro en Río.

Huelva tributó a Carolina Marín un recibimiento a la altura de su gesta olímpica y fue de tal magnitud que una deportista de alto nivel, tan acostumbrada a la presión y los ambientes de grandes pabellón, tan capaz de sorportar duros entrenamientos, viajes y estrés, acabó rendida a su tierra, la que lleva en el corazón.
Del gran recibimiento que le han regalado sus paisanos, Carolina ha reconocido en rueda de prensa que “esperaba el calor de Huelva, pero me ha impresionado muchísimo, no esperaba tanta gente”. Ha señalado que se ha emocionado “muchísimo” cuando le han cantado la salve rociera, momento del que ha dicho que es “la sorpresa más grande que he podido recibir hoy, hasta he llorado”.
Hacíaa cuatro meses que no venia a Huelva y me da mucha pena venir tan poco. Echo mucho de menos a mi familia, mi casa y la comida y no puedo decir cuando voy a venir de nuevo, no lo sé, señalaba cuando le preguntaban que están a su espera para que se rotule el Palacio de Deportes con su nombre.
Ha recordado que su vida ha cambiado “muchísimo” desde que dejó su tierra con 14 años y que aquella niña que se marchó al CAR de Madrid es ahora “una mujer mucho más madura”, pero que tiene presente que le dijo entonces a su técnico, Fernando Rivas, que tenía claro que “quería ser la mejor en todo, campeona de Europa, del Mundo, olímpica y número”. Todo esto lo ha conseguido a base de “mucho trabajo”.
La flamante campeona olímpica en Río además de bicampeona mundial y de Europa, ha mostrado su intención de seguir peleando por más éxitos y ha manifestado que “tengo 23 años y queda mucha Carolina. Espero durar al menos dos ciclos olímpicos más”.
La deportista onubense ha señalado tras el homenaje recibido en el Ayuntamiento de Huelva, que es consciente de que “la vida de un deportista es muy dura” y que “hay que cuidarse de las lesiones”, pero ha destacado que tiene la suerte de que su equipo le cuida, por lo que prevé que haya “Carolina para rato”.
Carolina ha comentado que su medalla de oro “por el momento” irá con ella a donde vaya hasta ocupar “el mejor lugar en mi casa” y que se siente “orgullosa” tanto de que tanta gente haya seguido por televisión sus partidos, como por el hecho de ser “pionera” en su deporte en España.
“El bádminton crece en España desde que gané mi primer mundial y ya todo el mundo sabe lo que es”, ha afirmado Marín, que se ha mostrado segura que tras ella “vendrán muchos campeones que ya saben que con trabajo lo pueden conseguir”.
“Las medallas son muy bonitas pero hay mucho detrás para conseguirlas y pocas personas saben todo el trabajo y sacrificio que hay detrás”, ha resaltado la poseedora de la triple corona, que ha indicado que ha tenido que dejar de hacer cosas que le gustan y ser constante día a día. Especialmente en los dos últimos meses, que han sido “los peores de mi vida”, ha subrayado.
En cuanto a qué está suponiendo en lo económico sus éxitos, ha indicado que “a día de hoy no tengo grandes gastos y estoy orgullosa de vivir de mi deporte”, aunque lo que gana no se puede comparar con “las cifras muy altas” que perciben las jugadoras asiáticas.
Más que pensar en el dinero, lo que pide es que “se ayude a los deportes minoritarios, que sólo se les reconoce cuando hay Juegos Olímpicos” y que en su opinión es “importante” que durante el resto del año “también se acuerden de nosotros”.