La afición del Recre se lo pasó en grande gracias al Antoniano

Este domingo, Club Atlético Antoniano y Recreativo de Huelva se vieron las caras en tierras lebrijanas, un duelo que estuvo tremendamente disputado, pese al resultado favorable de 0-2 para los de Alberto Gallego. Sin embargo, más allá del marcador, fue un choque muy peculiar, ya que, durante la semana previa, los locales tuvieron un gran gesto con el club más antiguo del país, cediéndoles jugar con su primera equipación, a pesar de ser visitantes.

Este hermoso detalle fue recibido en Huelva con mucha gratitud porque fue más que eso, fue puro sentimiento de un club señor que quería devolverle al conjunto onubense la aceptación de ser padrino de su cincuenta aniversario.

Pues bien, en Lebrija, se vivieron instantáneas que serán recordadas para la posterioridad. Ambas aficiones compartieron una mañana de fútbol muy bella, aunque, eso sí, muy calurosa, de ahí otro de los grandes detalles que tuvo el conjunto lebrijano: el reparto de gorras rojas para evitar posibles mareos por las altas temperaturas. Por otro lado, el precio de las bebidas estaba ajustado a la realidad, es decir, su coste no era muy elevado, algo que reconocieron los desplazados desde todas las partes de la provincia de Huelva.

Asimismo, durante este choque, se pudo escuchar por megafonía diferentes palabras de ánimo y fuerza para la afición recreativista. El dorsal número 12 del Decano no se quedó atrás y también quiso tener un bonito gesto, cantando y vitoreando a los locales.

En definitiva, se vivió una auténtica fiesta en el Municipal de Lebrija. En el encuentro hubo rivalidad, como debe ser, pero antes y después de este hubo compañerismo y hermanamiento. El fútbol no es perfecto, como cualquier cosa en esta vida, pero momentos así hacen que este juego sea bello y admirado.