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Aguilar: 'Cabrero es uno de mis mejores amigos, pero a ver si le meto un golito'
17.45 h. Alberto Aguilar vive uno de sus mejores momentos desde que llegó al Córdoba hace tres temporadas. El de Benamejí es de esos futbolistas que destacan por su humildad y trabajo en silencio. La pasada temporada, cuando perdió el sitio en la medular a manos de López Garai nunca se le escuchó una palabra más alta que otra. Siguió trabajando y este año empieza a recoger los frutos. Precisamente desde la posición de central por la llegó al Córdoba procedente del Albacete.
De ahí que ante la competencia que vivió la pasada campaña, él tenía claro que este año quería jugar de central, un puesto en el que el míster desde el primer día está contando conmigo, por lo que se lo agradezco, ya que creo que estoy demostrando que puedo ser válido para el equipo.
Estoy contento por poder jugar y disfrutar de minutos, aún más sacando buenos resultados o dando la sensación ofrecida ante el FC Barcelona, apuntó Aguilar, que supo hacerse con el puesto rotando en el centro de la zaga primero con Tena, y luego con Gaspar y Kiko. Ahora llegará Armando, por lo que la competencia subirá en esa posición dado que serán cinco jugadores para dos plazas. Con todo, a Alberto siempre le quedará la opción del pivote, aunque mientras no se lesioné o esté sancionado, esa plaza parece fija para López Garai, de ahí los problemas que tuvo la pasada temporada para formar en el equipo inicial.
De cualquier forma, Alberto prefiere disfrutar del presente y ayudar al equipo a llegar a las vacaciones de Navidad con 29 puntos. Luego ya habrá tiempo de ver como influye la llegada del motrileño Armando. Ahora mismo lo importante es que el equipo esté ahí arriba, si no metido en play off que sea a pocos puntos. Son muchos los equipos que luchan por alcanzar esa situación, pero si conseguimos ganar al Recre nos meteríamos de lleno en la lucha que es lo que todos queremos.
Precisamente, Alberto apuntó que lo bueno es que hemos pasado una racha mala y no nos hemos descolgado de los primeros puestos, por lo que ahora hay que intentar coger una buena dinámica de tres o cuatro victorias seguidas, porque así sería mucho más fácil para afrontar el resto de la temporada.
No obstante, el cordobesista apuntó que eso es muy difícil en Segunda, aunque algunos equipos lo han conseguido como es el caso de la Ponferradina, que cuando fuimos allí supuestamente era el peor equipo de la categoría, desde entonces ha ganado todos los partidos (cinco) y se ha metido en play off, por lo que eso es lo que buscamos nosotros.
Son muchos los equipos los que optan al play off, y este año se está viendo más que nunca, subrayó, de hecho siete y ocho luchan por la sexta plaza porque la competitividad es máxima. Tantos son los aspirantes que Alberto aseguró que incluso el Sporting si encadena tres o cuatro triunfos va a luchar por esa plaza.
Cabrero es uno de mis mejores amigos, tengo ganas de verle y meterle un golito
Dicho eso, tocaba analizar el juego de un Recre sobre el que advierte que su propuesta es muy buena, siempre quiere salir con el balón jugado y ha logrado buenos resultados aunque ahora estén inmersos en una racha negativa. Con todo por ello no van a cambiar su filosofía, por lo que el sábado se verá un partido bonito porque se medirán dos equipos que quieren jugar el balón.
Alberto siguió analizando al Decano para comentar que es un equipo que como nosotros arriesga mucho en defensa, no es que sea mala, sino que son bastante ofensivos, por lo que a veces la defensa puede quedar vendida cuando se le roba el balón. Al margen de esa peculiaridad, por encima de todo destacó su bloque, ya que su entrenador tiene la idea de jugar al fútbol, lo que le convierte en un equipo muy peligroso con gente arriba que se desmarca bien.
Para finalizar, el derbi andaluz de Segunda por antonomasia supondrá para Alberto el reencuentro con uno de mis mejores amigos, el meta del Recre Cabrero, con el que coincidió durante dos temporadas en el Albacete hace tres campañas. Está jugando ahora, así que tengo ganas de verle y meterle un golito, ya me ha dicho que no se lo haga pero ojalá tenga la oportunidad, concluyó entre sonrisas.
