El runrún: ¿El coronavirus en la Hispanidad?

Y lo han recibido muchos, muchísimos, a lo largo de esta jornada de lunes. Resulta que algún gracioso –o graciosa– ha tenido la estupenda idea de inventarse que se había detectado un caso de coronavirus en el barrio de La Hispanidad,  y para que el bulo pareciese real se ha molestado en hacerlo como si fuese una noticia que han dado en TVE, rótulo incluido.

El francés ‘piel de cartón’ que quiere ir a Canarias. Huelva tiene una población indeterminada de habitantes inaudibles, que ocupan la parte inferior de las aceras y sin quererlo se camuflan con el paisaje urbano para ser invisibles a los ojos del resto. Quienes pasan por la calle, la prisa, la insensibilidad o la vergüenza, les impide ver más allá y reparar en que quien está tirado en el suelo, sentado, como esperando algo de ayuda para dar más pasos desde su triste situación, es un ser humano. El escritor onubense y propietario de la librería ‘La Dama Culta’, Manuel Jesús Soriano Pinzón, asegura que para muchos estas personas tienen “piel de cartón”, pero él ve alguien con necesidades, inquietudes y deseos, como cualquiera de nosotros. Uno de ellos ocupaba un espacio en la calle Berdigón y Soriano se acercó a él para interesarse por su situación. Se llama Damián, es francés y tiene 26 años. Su deseo es ir a Canarias y para lograr el dinero con el que comprar el billete vende pulseras y otros objetos hechos a mano. En el suelo de la Calle Concepción en adelante se coloca para exponer su género al módico precio de 0,50 y 0,75, 1 y 1,50 euros. 

Luce un sombrero de tres puntas y tiene cerca una bola de cristal con la que hace malabarismos y en la que no sabemos si lee el futuro. Le acompañan dos perros que parecen bien cuidados, la compañía constante a sus horas en silencio trenzando hilos. De él le ha sacado este lunes la conversación con Soriano, que como parte de la Asociación Ayúdanos a Ayudar, le ha entregado parte de lo que otros muchos onubenses antes entregaron con la idea de que lo recibiera alguien como Damián. Un chaquetón, un jersey, dos mantas y una maleta, donde guardar también zumos, batidos, dulces, un sobre de embutido, agua y pienso para sus animales, todo esto ha sido la aportación. Desde luego que si alguien tiene la piel cartón no es él, sino quien no se conmueva, aunque sea un poco, al conocer su situación y su alegría tras recibir una impagable ayuda.