El runrún: Objetivo indiscreto en la Delegación

Indignación, lógicamente, porque se trata de una violación intolerable de la intimidad de estos trabajadores, ya que el baño —ubicado en la entreplanta— era de acceso exclusivo del personal de la oficina (incluyendo a la propia delegada) y no podía ser utilizado por los ciudadanos que acudían a esta sede a realizar cualquier gestión, ya que éstos tienen uno disponible en la planta baja. El estupor —decíamos— viene provocado por ver relacionado con este escabroso episodio a una persona muy querida por la plantilla de la Delegación. Por lo que hemos podido averiguar, se trata de un trabajador que hasta ahora había mantenido una conducta intachable y nadie podía sospechar que metería la pata de semejante forma. Con alrededor de 50 años, el hasta ahora único presunto responsable de la colocación de esta cámara llevaba más de 20 años desempeñando esta labor de vigilancia en la sede y su relación con sus compañeros era magnífica. La falta de información fidedigna, además, ha hecho circular por la delegación los más variados rumores, como los que aseguran que este indiscreto objetivo lleva años espiando a quien hace uso del aseo. Sin embargo, todo parece indicar que se ha tratado de un hecho muy puntual. También se ha especulado con la posibilidad, ya que se habían recibido quejas de que se fumaba en los servicios, de que el sospechoso simplemente trataba de descubrir al fumador o fumadora clandestino, empleando un método injustificable y que le ha colocado en una posición legalmente muy delicada.

Original pedida de mano. El nombre de José Manuel Rojas no es demasiado conocido en el mundillo del fútbol. Central sevillano de 28 años, vistió la camiseta del San Roque de Lepe en la temporada 2011/12, disputando 28 partidos, en los que casi siempre formó pareja junto a Raúl Albentosa. El equipo aurinegro hizo una gran temporada en Segunda B, quedando sexto en la clasificación. Su técnico era Luis García Tevenet, que el pasado verano lo reclutó desde el Albacete a las filas del Huesca, conjunto con el que ambos lograron el pasado domingo ascender a la Segunda División. Pero Rojas no sólo es conocido ya en Lepe o en Huesca, sino en toda España debido a su original y emotiva celebración del ascenso. Así, en el césped del estadio del Alcoraz llamó a todos sus compañeros y a sus respectivas parejas, además de a la suya, y en medio de la sorpresa de los aficionados que estaban allí presentes, le pidió matrimonio a su novia de toda la vida. Esta aceptó gustosamente antes de echarse a llorar de la alegría. Así que Rojas tuvo una doble alegría en un día que ya nunca olvidará.