La marcialidad legionaria marca el Sábado de Pasión onubense
El barrio de los Rosales se hizo cofradía acompañando al Cristo de la Bendición mientras en el centro de la ciudad el Cristo de la Vera Cruz desfiló a sones del 'Novio de la Muerte'
El Sábado de Pasión de Huelva, en imágenes
Itinerarios y horarios del Sábado de Pasión de Huelva 2024
Pasó el Sábado de Pasión. Se acabo la segunda de las jornadas de vísperas de nuestra Semana Santa. La próxima vez que veamos un paso en la calle, si el tiempo lo permite, deberá ser Domingo de Ramos.
La del Sábado de Pasión es una jornada reciente y de muchos contrastes. De Legionarios por el centro de la ciudad acompañando a Cristo crucificado y de jóvenes cofrades que cada vez ven más cercano el momento de convertirse en hermandad de penitencia.
Con gran expectación llegaba como cada año la Legión a las puertas de la parroquia de la Purísima Concepción. Su peculiar caminar, lo vistoso del desfile y la historia que tiene tras de sí este cuerpo hace que sean miles los onubenses que se lancen a la calle para presenciar su paso. Llegaba al templo concepcionista y se plantaba a las puertas para recibir al Cristo de la Vera+Cruz, a quien durante toda la mañana habían estado rindiendo guardia.
El crucificado que realizara Mariano Sánchez del Pino era elevado al cielo onubense por la escuadra de gastadores, mientras en Méndez Núñez resonaban los sones del Himno de España interpretado por la banda de guerra de la Legión. Hermanos de la Vera+Cruz y Oración en el huerto daban forma al cortejo en el que se hacían presentes una numerosa cantidad de representantes políticos y militares portando varas.
Tras el Señor, formaban los más de cien legionarios del Grupo de Caballería Ligero Acorazado «Reyes Católicos» II que este año marchaban haciendo escolta al Cristo de la Vera+Cruz.
Tras salir, bajo un cubierto cielo que pese a ello no amenazaba lluvia, la imagen era cedida por los legionarios a los hermanos de la Archicofradía, encargados de portar a la imagen por las calles de Huelva hasta su regreso al templo, cuando nuevamente los legionarios cargaron con el peso de la cruz de Cristo.
Vítores a España, a la legión y aplausos espontáneos al pasar los soldados fueron incesantes durante todo el recorrido, mientras el 'Novio de la Muerte' calaba en los oídos de quienes acudían a disfrutar de esta procesión.
Bendición por su barrio
Lejos de allí, en el barrio de los Rosales, la multitud se agolpaba en torno a la parroquia de San Rafael Arcángel. Desde la carpa instalada junto a la puerta del templo realizaría su salida el Cristo de la Bendición, ante las pequeñas medidas de la puerta de acceso al templo.
La joven Asociación Parroquial, asentada ya en la parroquia de los Rosales, volvía a procesionar en la jornada del Sábado de Pasión, dando pasos firmes para en un futuro cada vez más próximo ser erigida canónicamente y, de aquí a unos años, plantearse su ingreso en la nómina de la Semana Santa de Huelva.
Mientras llega ese momento, el barrio de los Rosales y toda la Huelva cofrade que hasta aquí llegó para disfrutar de las cofradías vibró un año más junto a su Señor de la Bendición ante Caifás. Los sones de la Agrupación Musical Santa Cruz recibían al Señor en la calle. Unos inigualables sones que hizo las delicias de todos los allí presentes en continua compenetración con la joven cuadrilla de costaleros que porta el paso de misterio.
La Asociación presentaba el estreno este Sábado de Pasión de toda la crestería de la canastilla del paso, así como las cartelas laterales del canasto, donde quedan representados la tercera caída del Señor y su crucifixión.
En el capítulo de orfebrería era estreno también el juego de coronitas de los candelabros de guardabrisas, así como las cartelas frontal y trasera de los respiraderos, donde podemos apreciar a San Rafael Arcángel y a la Virgen del Rocío. Todo ello realizado por el orfebre sevillano Manuel Arenas Vargas. También era estreno el trono que se situaba en la parte trasera del paso, así como la túnica blanca lisa que lucía este año Nuestro Padre Jesús de la Bendición.
Claveles rojos y gerberas moradas salpicaban un friso de helechos a lo largo de todo el paso, colgando unas curiosas plantas en tonos morados por la canastilla. El Señor avanzaba por las calles de la vecina Isla Chica mientras a su alrededor todas las conversaciones versaban sobre el improvisado plan del Consejo de Hermandades para adelantar la jornada del Domingo de Ramos.
