La historia del barco del arroz, el buque anclado que se puede ver desde esta playa de Huelva
Distintos episodios históricos forjaron el dicho «estar más perdido que el barco del arroz», el último de ellos ocurrido hace 30 años
Desde la playa de Malandar aún se divisa los dos fragmentos en que quedó dividido el casco
Encuentran en El Portil restos de un barco que podrían pertenecer al pecio de Matagrana hallado en 2008
La arqueología subacuática en Huelva
¿Quién, por estas latitudes, no ha oído alguna la expresión «¡Estás más perdido que el barco del arroz!»? Efectivamente, se trata de un dicho popular que, pese a estar muy extendido, muchos ignoran que su origen tiene una base histórica, con la peculiaridad de que son varios los relatos que han contribuido a dar forma y sentido a esta singular frase.
Remontémonos a la década de los 40, en plena posguerra española, cuando la hambruna golpeaba con fuerza a la población. En ese contexto, Argentina, bajo el gobierno de Juan Domingo Perón, que mantenía buenas relaciones con el régimen de Franco, en un gesto de ayuda, envió un barco cargado de arroz con destino a las costas andaluzas. El barco, el 'Alcatraz', sin embargo, nunca llegó a su destino y su desaparición se convirtió en un misterio. Algunas versiones atribuyeron su pérdida a que la tripulación se apropió de la carga, mientras que otros relatos mencionaban que una enfermedad contagiosa había diezmado a los navegantes, dejando al navío a la deriva. La versión más difundida sugiere que el barco se hundió frente a las costas gaditanas, convirtiéndose en la comidilla –valga la expresión– en la Tacita de Plata.
Casi medio siglo después, en 1985, se vivió una historia similar, pero esta vez era España la que enviaba la ayuda humanitaria, en este caso desde Sevilla hasta Etiopía, emulando el supuesto envío humanitario realizado por Argentina a España en los años 40. Hasta tal punto lo emuló que el destino del cargamento fue idéntico.
Una colecta solidaria promovida por Cáritas consiguió reunir, además de 370 millones de pesetas para fletar el buque, 2.000 toneladas de arroz, harina, leche condensada, mantas, tiendas de campaña y 20 Land Rovers. Sin embargo, después de zarpar, el navío 'Zoru' desapareció sin dejar rastro.
Otros dos episodios contribuyeron a la leyenda. De nuevo en Cádiz, en la década de los 50, mientras los gaditanos aguardaban la llegada del navío prometido desde Argentina, que se perdió en el camino, un vapor se desató de sus amarras en el muelle de Cádiz y fue arrastrado por la corriente hacia la costa. El barco sufrió daños y comenzó a llenarse de agua, lo que hizo que el arroz se hinchara y provocara un agujero en el casco, liberando todo su cargamento, lo que popularizó aún más el refrán «estás más perdido que el barco del arroz».
El último barco del arroz
La historia más reciente, la del barco del arroz de Sanlúcar, nos lleva a 1994, cuando el Weisshorn, un barco chipriota cargado de arroz, procedente de Bangkok con destino a Sevilla, encalló en la entrada del canal del Guadalquivir, entre Sanlúcar de Barrameda y Chipiona, debido a un fuerte temporal que rompió su ancla.
El encallamiento provocó la apertura de vías de agua, lo que causó que las 6.080 toneladas de arroz se hincharan y rompieran las puertas metálicas que lo contenían. Dividido en dos partes, el barco quedó varado y durante más de un mes, los vecinos de Sanlúcar y Chipiona sufrieron un olor insoportable debido a la descomposición del arroz. Aunque la versión oficial apunta a un accidente, la leyenda sugiere que el capitán del barco encalló a propósito como resultado de una deuda con el armador. Las dos partes del barco son visibles desde varias playas, incluyendo Chipiona, Sanlúcar y la del Malandar en Doñana, atrayendo la atención de numerosas embarcaciones privadas.
