La sinrazón
Mientras haya vida hay esperanza, pero muy pocos en Huelva ya creen en el milagro. El equipo probablemente gastó su última bala en Miranda de Ebro y volvió a defraudar. Ya no hay tabla de salvación a la que agarrarse y la realidad nos deja a un equipo que se acerca cada vez más al descenso de categoría.