La mayoría, mujeres mayores de 65 años
El Ayuntamiento atiende a 1.557 onubenses desde el Servicio de Ayuda a Domicilio
12.33 h. El promedio de usuarios registrados, durante el pasado año en el Servicio de Ayuda a Domicilio asciende a 1.557 personas. De ellas, un 77% corresponde a mujeres, frente al 23% de hombres, en valores absolutos, 1.193 frente 364, lo que ratifica la incuestionable feminización de la población destinataria del servicio.

Este hecho, responde básicamente a dos realidades evidentes que se reflejan cada año en los balances: la mayor esperanza de vida en el sector de población femenino y el rol como cuidadora que aún desempeña la mujer, máxime en el sector de mayores. A estas dos razones, se puede añadir una tercera, aunque con menos peso, relativa a la mayor proporción en general de personas del sexo femenino frente al masculino.Por otro lado, las personas mayores de 65 años conforman el 89,92% de la población atendida, según ha explicado la concejal de Servicios Sociales, Familia y Juventud, Pilar Miranda. Los datos revelan que la mayor parte de los destinatarios del Servicio de Ayuda a Domicilio se encuentran afectados por el proceso de envejecimiento, “con el consiguiente deterioro biológico, psíquico y en ocasiones social, al que se apareja inexorablemente una limitación de la autonomía personal”, ha señalado Pilar Miranda. Atendiendo a la dimensión fisiológica, padecen problemas óseos, disminución sensorial, problemas genitourinarios, cardiovasculares y falta de percepción visual. En relación a la dimensión psíquica, sufren principalmente deterioros cognitivos y demencias, mientras que atendiendo a la dimensión social, los problemas más habituales son el aislamiento, debido al cese en la actividad laboral; la disminución de relaciones con grupos de iguales, provocado por mermas en el estado de salud o fallecimientos y el abandono familiar. Situaciones que en general, implican la desvinculación con el entorno, a lo que hay que añadir el debilitamiento de las redes de apoyo natural y la implantación del fenómeno ya conocido como ‘envejecimiento del envejecimiento’, provocando un aumento en el índice de dependencia, condicionando su autonomía y justificando la necesidad del Servicio de Ayuda a Domicilio.Tras los mayores, con un porcentaje de 9,96, se sitúa el segundo sector de población por orden de representatividad, que incluye a los usuarios con falta de autonomía y dependencia reconocida para el desempeño de actividades diarias, originadas no por el deterioro propio de la edad, sino por enfermedades u otras causas de discapacidad o limitación. A pesar de la enorme distancia existente en términos cuantitativos entre éstos usuarios y el sector de la tercera edad, el año pasado se manifestó un incremento equivalente a 1,39 puntos, mucho menos considerable que el experimentado en 2010 (6,57 puntos). En el tercer grupo de usuarios, con un 0,13% se ubica el sector familia.En cuanto a la distribución de la población destinataria del Servicio de Ayuda a Domicilio, según grupos de edad, el 90% corresponde a usuarios por encima de los 65 años, aunque las personas situadas en el intervalo de entre 65 y 80, que en 2010 conformaban el 64,86%, sufren una reducción muy notoria al 29,42%, 458 en valores absolutos. Una disminución que revierte en el crecimiento del volumen de las que superan los 80 años, que ascendieron el pasado año a un total de 942 y comportan el 60,5% respecto del total, frente al 25,39% de 2010. Estos resultados no son más que el reflejo del crecimiento progresivo que venimos experimentando en las últimas décadas de la población mayor de 65 y del fenómeno demográfico anteriormente mencionando y conocido como ‘envejecimiento del envejecimiento’, que ha supuesto la duplicación del colectivo de mayores de 80 años en las últimas décadas. A ellos les siguen, con un porcentaje del 6,81%, el sector de población con edades comprendidas entre los 50 y los 65 años; un 2,31% entre los 35 y los 50; un 0,83% los que registran una edad igual o superior a los 18 hasta los 35 años; y finalmente, un 0,13% de los casos se refiere a la población menor de 18 años.Respecto al estado civil, al finalizar el pasado año, el mayor volumen de usuarios se encontraba entre el grupo de viudos, con una tasa del 45%, seguido del de casados con un 38%, un 14% solteros y un 3% separados.En cuanto a la distribución geográfica de los usuarios, el Ayuntamiento, para la coordinación de los Servicios Sociales, estructura la ciudad en seis Zonas de Trabajo Social, integradas a su vez por diversas barriadas. En este sentido, las zonas Centro y Polígono San Sebastián, constituyen las más extensas en términos geográficos y también las que concentran el mayor volumen de población atendida. Concretamente, el 55% de los usuarios registrados se encuentran adscritos entre ambas de manera casi igualada, el 27% y 28% respectivamente. El resto de zonas alcanzan unos índices muy equiparados, comprendidos entre 12% de Torrejón y Lazareto, el 11% de La Orden y el 10% de Marismas del Odiel.Finalmente y respecto a la atención, el 56% de los usuarios la recibe durante cinco días a la semana, mientras que el 21% tiene concentradas sus horas de prestación en dos días a la semana y el 12% reciben la ayuda tres días a la semana. En una proporción mucho más reducida se contemplan frecuencias de seis días con un 5%, siete días con un 4% y finalmente, uno y cuatro días con un 1%.
