Fran encarna el nuevo impulso que necesitaba el Decano

Hace pocos días cumplía 20 años Fran López Bejarano, la nueva sensación del Recreativo de Huelva. La pasada campaña Alberto Monteagudo ya hablaba maravillas del centrocampista de Villalba del Alcor y su proyección. Con Claudio Barragán tuvo ratitos y la pasada campaña jugó 186 minutos en cinco encuentros, uno de ellos como titular. En esta campaña ya lleva ocho encuentros, con tres titularidades, 373 minutos.

   Hace pocos días cumplía 20 años Fran López Bejarano, la nueva sensación del Recreativo de Huelva. La pasada campaña Alberto Monteagudo ya hablaba maravillas del centrocampista de Villalba del Alcor y su proyección. Con Claudio Barragán tuvo ratitos y la pasada campaña jugó 186 minutos en cinco encuentros, uno de ellos como titular. En esta campaña ya lleva ocho encuentros, con tres titularidades, 373 minutos.  Pero el partido que le ha puesto definitivamente en el foco fue la victoria por 3-1 sobre el San Fernando. Antonio Calle apostó por él ante la ausencia de Dani Molina y respondió a las mil maravillas. Así lo dejó claro el técnico en sala de prensa.  El Recreativo necesitaba ganar y ofrecer una imagen muy distinta a la de los últimos partidos y el espíritu necesario lo encarnó Fran. Todo el equipo estuvo a un gran nivel y los futbolistas, titulares y suplentes, derrocharon ganas. Pero en el joven centrocampista había un impulso especial. Respondió a por encima de las expectativas con un gran partido de jugador de más edad.  Allí donde se le necesitabaEstuvo impecable y corrió muchísimo, trabajó y robó muchos balones. Perfecto en la colocación y sin errores, supo estar allí donde se le necesitaba en cada momento, más cerca de la defensa o más arriba, haciendo circular también el balón. Sin duda su actuación, vuelve a reivindicar el papel de la cantera en una época de profunda crisis en el equipo.

El Recreativo necesitaba ganar y ofrecer una imagen muy distinta a la de los últimos partidos y el espíritu necesario lo encarnó Fran. Todo el equipo estuvo a un gran nivel y los futbolistas, titulares y suplentes, derrocharon ganas. Pero en el joven centrocampista había un impulso especial. Respondió a por encima de las expectativas con un gran partido de jugador de más edad. 

Estuvo impecable y corrió muchísimo, trabajó y robó muchos balones. Perfecto en la colocación y sin errores, supo estar allí donde se le necesitaba en cada momento, más cerca de la defensa o más arriba, haciendo circular también el balón.

Sin duda su actuación, vuelve a reivindicar el papel de la cantera en una época de profunda crisis en el equipo.