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Ceballos: 'Les pediría a todos los que aman estos colores que remaran en la misma dirección por encima de egos personales'
10.55 h. 'No me puedo arrepentir de firmar en agosto porque en la vida hay que tomar decisiones y cuando se toman hay que afrontarlas. Sabía que me la jugaba y también que podía ocurrir esto', ha señalado Ceballos en su despedida, en la que le ha acompañado el presidente del Recre. Y añadía que 'para mí hay una verdad y para Juanma Pavón otra. No ha habido maldad, porque si no mi contrato no sería el que es. Me voy muy tranquilo y con la cabeza muy alta'.

Alejandro Ceballos, el técnico del Recreativo de Huelva, se despidió en una rueda de prensa en la Ciudad Deportiva en la que le acompañó el presidente de la entidad albiazul, Manolo Zambrano. Comenzó leyendo una carta que traía escrita y que decía lo siguiente. En primer lugar quiero agradecer la presencia del señor presidente a mi lado. Para mí fue un orgullo defender al Recreativo en estos diez meses en ambas etapas. Se mezclan dos palabras, tristeza y agradecimiento, para definir mis sentimientos. Siempre pensé que nunca podia rechazar esta entidad y mi personalidad y mi conciencia estarán muy por encima de cualquier duda al respecto porque este era mi sueño. Esta experiencia me va a reportar muchas cosas en mi vida. No soy nadie para pregonar, pero sí que pienso que a todos los que aman estos colores les diría que remaran todos en la misma dirección por encima de egos personales. Nunca es tarde porque se beneficiarían los jugadores y técnicos. Agradezco a mis futbolistas porque me hicieron feliz y son un gran grupo humano que está por encima de todas las adversidades vividas. Agradezco también a mi cuerpo técnico, que me han hecho más fácil mi estancia aquí. Agradezco al resto de estamentos, empleados en general, físicos, utilleros, delegado, secretario técnico... , que hicieron que el día a día fuese más fácil de llegar. También agradezco a los profesionales de los medios de comunicación, especialmente a los que hicieron más fácil mi día a día en los momentos duros. Y tengo también un especial agradecimiento a la afición, que es lo más grande que tiene este club, y que sobre todo en la pasada temporada me hicieron sentir a mí y a mi familia cosas muy grandes.

El preparador sevillano respondía también a las cuestiones planteadas por los informadores y añadía que sé que no son momentos fáciles para la gente de fútbol y nuestro presidente lo es. Esperemos que en pocos días se cierre este acuerdo, que ambas partes estamos deseando de alcanzar, y se termine una etapa. Le deseo la mayor de las suertes al club porque creo que los que aman a esta entidad, que son muchos, es lo que se merecen. Espero que en esta nueva etapa haya más tranquilidad y las aguas se calmen, y yo desde la tranquilidad me alegraré de esos triunfos.

En cuanto a los motivos de su salida y a si se veía con fuerzas para haber continuado y sacado al equipo albiazul de la zona baja, Ceballos recalcaba que el lunes le comenté al presidente y al director deportivo que mi intención era la de estar el sábado porque creía que era una buena oportunidad con tres partidos en una semana. Mi equipo en el día a día y en la imagen lo estaba demostrando, aunque es verdad que los resultados no estaban acompañando. El Consejo ha tomado esta decisión y hay que aceptarla como hombre de fútbol que soy. No creo que sea difícil llegar a un acuerdo. Ayer hubo una primera toma de contacto y todo está muy caliente. Sé que Manolo como presidente también está sufriendo porque él ha vivido ya esta situación y en tres días que lleva en el cargo no es de agrado negociar una baja. Hay tiempo por delante para ver lo que pasa. Nos sentaremos un día de la semana que viene y habrá que ver lo que sucede con Antonio González, el segundo entrenador, que de momento es lógico que no se siente de corto ya.
Daba pistas, aunque sin nombrarlo, de que el hecho de que negociara en verano con Pablo Comas ha sido una de las causas que ha acabado sentenciándolo. No es el momento para hablar de eso. Me quiero despedir como soy. Creo que todos sabemos las circunstancias, pero no es el día ni es el momento, y este club lo que necesita es un cambio radical respecto a lo que hemos vivido hasta ayer. A partir de ahora debe hablarse sólo del equipo y de lo bien que juega, y cuando no vengan los resultados hay que apoyar si de verdad tenemos sentimientos hacia esto. Hay que dejar de un lado los egos, declaraba.
Eso sí, Ceballos dejaba claro que ni mucho menos se arrepentía de haber vuelto al Decano después de dos meses en los que Pavón fue el entrenador del primer equipo: No me puedo arrepentir de firmar en agosto porque en la vida hay que tomar decisiones y cuando se toman hay que afrontarlas. Sabía que me la jugaba y también que podía ocurrir esto, pero también que se me conociera más tiempo que el que había tenido en esta casa. He tenido muchos mensajes de apoyo en esta segunda etapa, que ha sido la dura. Para mí hay una verdad y para Juanma Pavón otra. No ha habido maldad, porque si no mi contrato no sería el que es. Con Manolo Toledano he vivido muchas cosas en el día a día y él sabe bien como he vivido esta situación. Lo he vivido y disfrutado, y lo poquito de malo que ha transcurrido en este último tiempo lo superó con creces el último partido contra el Linares con esa unión con la afición. Me llevo el trabajo de mis futbolistas porque esta plantilla me ha llegado porque sobre todo los que no han jugado han trabajado muchísimo. Eso es lo que me ha inspirado a ser feliz en esta segunda estancia. Respeto cualquier opinión, pero he sentido el apoyo de mis jugadores al cien por cien. Eso no significa que un lunes o un domingo el que no juegue se cabree, pero eso es muy buena señal del gran profesionalismo que hay en esta plantilla.

Por último, concluía mirando ya al futuro señalando que diría que más que gol, nos ha faltado paciencia. Otros le pueden llamar resultados. Es cierto que me voy muy tranquilo y con la cabeza muy alta. Todo es mejorable y voy a seguir aprendiendo de todo lo vivido. Hasta cualquier crítica voy a intentar reconstruirla y me va a servir para mi futuro. Seguiré ligado a este veneno del fútbol que tengo en mi cuerpo, aunque no sé en qué categoría lo haré. Tengo que aceptar esta decisión porque además como entrenador no me queda otro remedio.